Aquellas maravillosas revistas. 6l2d69

Aquellas maravillosas revistas aquellas revistas maravillosas y yo compraba cuando tenía apenas diez años luego con doce y catorce donde aprendí leyendo y releyendo y volviendo a esas revistas una y otra vez gran parte de lo que se y luego tuve la fortuna de dejarles el lector y trabajar en esas revistas en una de esas revistas y luego en otras y aprender como profesional esas maravillosas y había un nivel un nivel de periodismo espectacular y muchos me preguntaría es porque habría pasado pues soy muy franco lo siento yo creo que las revistas de ahora no están a ese nivel bueno bienvenido a los de los lunes de garaje hermético un pocas que hoy hoy precisamente no va a ser nada actual lo siento es sábado por la tarde catorce de agosto de dos mil veintiuno hace un calor tremendo además como tu que cerrar la puerta la ventana perdón para que no haya ruido no entran ruidos pues un calor enorme pero aquí estoy al pie del cañón pero me apetecía me apetecía hablarnos esto por qué porque aprovechando estas fechas impuesto ordenar revistas ese trabajo para mi lo hecho muchas veces cada mudanza huelva reordenar es un trabajo que nunca acaba nunca sacaba sabéis por qué porque cuando a en las revistas os vais a alucinar es que cada revista que me acuerdo sobre todo en la época en la que llora lector antes de trabajar en esas revistas y luego trabajaba allí porque luego cuando me echaron reconozco que tuve de cierto resquemor y deje de comprarla sobre todo no quería comprar revistas de la empresa que me había despedido pero las revistas de la época en la que trabaje en en esa empresa te digo cual era entonces se llamaba bueno yo empecé siendo que editor luego lo que motor press y luego motor presión erika ahora ya ni se como se llaman y como es pero en esa época me acuerdo de las revistas perfectamente y claro una revista de las manos veo veo la puerta y onda pero si esta revista que probó vital que no se quien hizo tal cosa aquí aparecía la otra y claro pues es que me bajo una hora al garaje y ordenó diez o quince revistas y me he acordado de lo que sentía leyendo estas revistas y luego lo que sentí empezando a trabajar he cogido en unas pocas y me subido y he pensado voy a compartir con la gente que tiene la paciencia de escucharme que por cierto os lo agradezco infinito porque unos videos bueno se puede decir bueno me escuchan pero aparte rodrigo se le ocurra se ven imágenes pero no aquí es solo mi voz y lo cualquiera contar así que os agradezco enormemente que me sigues yo siempre digo una cosa bueno este vídeo este este post lo hago sin guión meter que un montón de revistas a lo que a la aventura bueno para eso estamos en verano no de vacaciones en mi caso pero pero de veranito pero yo solo creo solo me atribuyó dos méritos uno me apasionan los coches desde pequeñito es una cosa casi enfermiza toda mi familia lo tenía claro que a max máximo algunos me llamaban lo odio por ciento en nadie se le ocurre a llamarme así vasito le encantaban los coches y las motos todos eso vamos lo tengo clarísimo la segunda bueno porque llevo muchos años primero leyendo y luego trabajando en revistas y luego todo lo que tiene que ver con el mundo del motor pero aquella maravillosa revistas como os digo tenían dos virtudes que yo creo que la revista de hora y me tiran a la piscina y la mayor parte de las webs de ahora no tienen la primera todos todos sin excepción los que estaban en ellas eran profesionales como la copa de un pino a ver que nadie se alarme no quiero decir dios me libre que ahora no haya buenos profesionales los hay y muy buenos pero la cantidad de revistas de webs y de medios que informar del motor y la forma en que informan pues hace que realmente la media yo lo siento en el alma haya bajado una barbaridad porque ahora muchas veces prima más la cantidad que la calidad y prima el seo frente a la calidad real el contenido para los que no sabéis que es el seo es la capacidad de que tú hagas un texto y google te quiero