Marcos Hermosel: "La vida es una vocación" 556sk

A mí me parece que esta es una perspectiva absolutamente necesaria en este momento en el que hay una fractura tan grande, una desconexión tan grande entre la propia vida y la realidad y el contexto y las otras personas.

Estábamos hablando ahora, que me parece un tema muy bonito, del arte y de la manualidad como incluso posibilidades de recuperación de la persona, etc.

Bueno, tú eres un ser manual, intelectual y manual al mismo tiempo.

¿Qué te gusta hacer a ti? Cositas de cuero, cosas así. Pintar siempre me ha gustado.

Lo que realmente me gustaría es hacer muebles o algo así.

Yo hago, a mí me gusta.

La madera es un material útil, muy bonito.

Dices, ¿dónde podría yo irme a una escuela que me enseñen a hacer un mueble? Pues es que no es fácil encontrar eso.

Es decir, hay un montón de chorradas en esta sociedad nuestra para aprender cosas a lo mejor.

Que dices, bueno, todo tiene su valor y su importancia.

Pero no es fácil encontrar.

Yo quiero ser capi, no me voy a estudiar a una FP ahora.

No, no.

Quiero aprender a tallar madera.

Un oficio, un oficio.

Mira, nosotros hemos estado ahora recientemente, algunos profesores, en la Piazza di Mestieri que es un modelo muy parecido al que nosotros tenemos implantado en nuestro colegio que tiene justamente esta finalidad, enseñar los oficios.

Nosotros, en el ámbito del colegio, también es lo que trabajamos en el entorno de la hostelería, de la informática, del deporte.

La idea es justamente esta, enseñar a trabajar a través del trabajo, a través de los oficios.

Y era muy impresionante en Italia, porque para ellos, sobre todo en el norte de Italia, la tradición de los grandes educadores, San Juan Bosco que acabamos de celebrar, etc.

Ha iniciado un carril, una forma de hacer pedagógica muy significativa.

Y a este nivel, desde luego, son referencias.

Pero que en este momento, yo creo que tienen mucho que decir.

Bueno, pero que nace de la cultura misma, de la forma de hacer las cosas en Europa.

Quiero decir, el aprendiz y el maestro, en cualquier oficio.

Mira, yo tengo un alumno de segundo de bachillerato, que lo que quería, precisamente, es ser urbanista, ser carpintero.

Pues en lugar de estudiar un FP, se ha metido en una carpintería.

Y un señor mayor de esto de toda la vida le está enseñando carpintería.

Dice, luego a lo mejor haré el FP.

Pero a mí lo que me apetece es tocarlo.

Una primera introducción.

Fíjate, en Irlanda hicimos otra visita también a varios colegios, que son públicos, pero con un sistema de financiación muy interesante, según el éxito que la escuela pueda tener.

Y la consecución de objetivos que puedan alcanzar.

Pues reciben financiación.

Y esa financiación se va consolidando en el tiempo.

Y les permite realizar proyectos propios.

Cosa que aquí en España ha desaparecido un poco.

Que luego, en lo público, se den proyectos de este tipo.

Pero un colegiera como el héroe Merlín. Increíble.

O sea, increíble con las cortadoras estas.

Ingletadoras, cortadoras, maderas de todo tipo.

Y yo decía, esto es un paraíso.

Claro, porque es una introducción real al mundo del trabajo.

Hablaban de la madera, del cuidado.

Y yo creo que este es un ámbito que tenemos que repensar y reproponer realmente.

Porque lo puramente teórico ahora mismo, en un cierto sentido, para recuperar a ciertos chavales que viven esta desconexión de la que hablábamos antes.

Pero yo creo que cualquier chaval.

Yo últimamente pienso mucho en esto.

Hasta la tecnología, todo esto.

Que antes era coger la segueta y ahora se ha convertido en más pantalleo.

Yo digo que todos los chavales.

Primero yo creo que hay una falta de sentido.

Y creo que Nembrini decía el otro día, me lo decía mi mujer.

Dice, es que este hombre al final está diciendo.

Hay una falta de sentido en los chicos.

Porque los adultos no hemos sabido dotar de sentido la realidad en la que vivimos.

Y efectivamente lo que tú estás diciendo.

Hay una desconexión entre el trabajo manual, que también va a educar, la perseverancia y en el carácter a los chicos.

Que estamos viendo que los chicos por ahí también van haciendo aguas.

Es que nos posicionamos ante la vida con una fragilidad.

Pero aparte, nosotros antes en el colegio hacíamos el viaje de estudios de cuarto.

Íbamos a Roma porque entendíamos que Roma era la casa de la iglesia.

Y estaba muy bien.

Pero de un tiempo a otra parte, vámonos al monte.

Vamos a hacer cosas con naturaleza.

Vamos a hacer campamentos.

Que los chavales vuelvan a tocar la tierra.

Que se vuelvan a manchar.

Que vuelvan a hacer el loco.

Porque lo que están deseando.