Falsificación de Moneda. Arma de Guerra [Capítulos de Historia 259] 241yn

Buenas y bienvenidos a Superbia in Proelio, podcast dedicado a la historia militar e historia contemporánea.

Durante los años 90 los expertos en seguridad nacional de los Estados Unidos empezaron a rastrear una amenaza nueva y bastante inusual.

Algún individuo o grupo estaba inundando a propósito la economía mundial con millones de billetes falsos de 100 dólares estadounidenses.

Estos facsímiles, apodados en su momento superdólares por su calidad de producción superior, se imprimían con tintas de la más alta calidad, en reproducciones casi perfectas de la mezcla de algodón y lino utilizada en la fabricación de los verdes billetes estadounidenses.

Incluso se imprimía en una prensa calcográfica, igual que el propio equipo de la Casa de la Moneda de los Estados Unidos, incluso los elementos de seguridad como fibras rojas y azules incrustadas y marcas de agua se reproducían fielmente.

Los billetes eran casi perfectos.

En los 15 años siguientes se identificaron al menos 19 variantes de este superdólar y cada nueva versión mejoraba el diseño del anterior.

Se calcula que solo en un año se lanzaron a la economía mundial billetes falsos por valor de 25 millones de dólares cada año.

Al final uno de cada 10.000 billetes de 100 dólares estadounidense era en realidad uno de estos falsos superdólares.

Los investigadores especularon con la posibilidad de que los responsables de esta falsificación fueron los sospechosos habituales, es decir, grupos de delincuentes rusos o chinos, mientras que otros culparon a Corea del Norte.

Por su parte, otros de la comunidad de inteligencia teorizan que Pyongyang, con problemas de liquidez, ideó el plan tras la desintegración de la URSS en 1992 y lo hizo con dos posibles objetivos, uno, debilitar financiamente a los Estados Unidos y el otro sería proporcionar estas divisas duras no necesarias para apuntalar esta casi muerta economía de Corea del Norte.

Si Corea del Norte en realidad estuviera detrás de estos superdólares, desde luego no sería la primera vez que una potencia mundial utiliza moneda falsa para perjudicar a un adversario.

De hecho, durante más de 200 años, esta falsificación ha formado parte de las estrategias bélicas de varios países.

Según varias fuentes, incluso durante la Guerra de los Siete Años, tanto el ejército austríaco como el ruso dispersaron moneda polaca falsa mientras estaban en campaña como medio de debilitar todavía más al enemigo.

Fue una estrategia recuperada más tarde por Napoleón cuando quiso acabar las economías de Austria, Rusia y Gran Bretaña.

Buenas y bienvenidos a Supervivir Pro Helio, en este capítulo de historia vamos a hablar sobre el uso de esta moneda falsa en las guerras.

Uno de nuestros primeros ejemplos nos lleva a cuando los británicos buscaban formas de debilitar la incidente economía estadounidense durante la guerra de independencia de estos últimos.

Para ello pidieron ayuda a dos agentes Tories en los Estados Unidos, un tal David Farnsworth y otro John Blair.

Ambos viajaron por estas trece colonias, poniendo en circulación fajos de dólares continentales de totalmente limitación.

Con esto, los británicos esperaban que las falsificaciones miraran la fe de los colonos en esta moneda rebelde y que perturbaran la capacidad del congreso recién formado para financiar esta guerra e incluso provocar el calapso total de esta nueva economía estadounidense.

Farnsworth y Blair serían más tarde arrestados por agentes rebeldes con más de 10.000 dólares falsos y George Washington ordenó que fueran ahorcado.

Siguiendo con la historia de Estados Unidos, un tal Samuel Oppam amasó una fortuna imprimiendo miles de réplicas de billetes confederados de 5 dólares durante la propia guerra civil estadounidense.

Pero el escritor y empresario de Filadelfia, conocido como Sam el Honesto, no era un estafador ni trataba de derrotar a estos aficionistas.

Su dinero falso se vendía en el mercado.