90 - Jefes mediocres con Arianne Rovira - Humanismo Digital 463g4s

Me gustaría que habláramos de cómo ha mejorado esta realidad en las empresas.

Cómo han mejorado estos datos preocupantes de bajas laborales, de salud mental, de índice de personas que se cambian, de trabajo por su mala relación con el jefe, de esta falta de compromiso.

Estos datos que yo creo que hoy deberían ser inaceptables, no los deberíamos aceptar.

Me gustaría que habláramos de cómo ha mejorado esta realidad en las empresas.

Me gustaría que habláramos de cómo ha mejorado esta realidad en las empresas.

Me gustaría que habláramos de cómo ha mejorado esta realidad en las empresas.

Las cosas están cambiando.

La gente es más feliz.

La gente va al trabajo y el trabajo no es el motivo de su frustración y de su ansiedad, sino que es un sitio donde hay un enriquecimiento.

Yo creo que lo tenemos que hacer mejor sobre todo por esto, porque creo que como país, como sociedad, el pensar que la gente no es feliz en el trabajo es durísimo.

En Humanismo Digital conversamos sobre la esencia y el valor de ser humanos en el centro de un presente y un futuro cada vez más digital.

Un espacio donde hacernos preguntas, compartir conversación y reflexiones sobre talento, innovación, aprendizaje, futuro del trabajo, creatividad, emociones, ética o el poder de las buenas preguntas.

¿Has sufrido alguna vez en tu vida a un jefe mediocre? Yo particularmente me considero afortunado.

De todos los que tuve, pude aprender algo.

Cosas que he intentado emular y otras que he procurado evitar.

El buen liderazgo, como sabéis, depende de un equilibrio de competencias y de una evolución a los tiempos, al contexto, que no todas las personas son capaces de hacer al ritmo necesario.

En la conversación de hoy, Ariane Rovira, autora del libro Jefes Mediocres, explora los rasgos de un buen y un mal líder, basándose en su experiencia de 35 años con buenos y especialmente no tan buenos jefes.

Según Ariane, la mediocridad en el liderazgo es un problema generalizado y cree que las organizaciones necesitan transformar sus estructuras tradicionales para fomentar un liderazgo más inclusivo y más eficaz.

Os dejo ya con la conversación en la que os emplazo a que reconozcáis algunos comportamientos de vuestro peor o mejor jefe.

Hola Ariane, muy buenas tardes, ¿qué tal estás? Buenas tardes, pues encantada de estar aquí conversando.

Muy bien, ¿qué tal arrancas de lunes para ti? Bueno, intenso, intenso. La verdad es que son semanas, bueno, empieza el año y empiezan muchas actividades, que es bueno, que todos tenemos ganas de iniciar cosas nuevas y de buscar nuevas cosas y estoy encantada, estoy encantada.

Además he empezado, como bien sabes, con la publicación del libro, con lo cual, pues muy dedicada, muy dedicada a darlo a conocer y te agradezco por eso la oportunidad.

Genial, gracias a ti por aceptar la invitación.

Te conocí la semana pasada en esa presentación del libro de Jefes Mediocres, del que hablaremos, por supuesto.

Y bueno, las personas que siguen el podcast ya saben que muchas veces sois personas que habéis publicado un libro, pero generalmente, o siempre diría, en mi humilde opinión, sois personas interesantes y tenéis mucho que decir. En este caso, el libro es una buena excusa para conocer un poco mejor a Ariane Rovira.

Pero arrancamos siempre el podcast con la misma pregunta, Ariane, y es ¿quién eres?, ¿a qué te dedicas ahora mismo? y ¿qué te ha traído hasta este momento de tu vida? Bueno, pues mira, soy Ariane Rovira, soy una persona que empecé hace 35 años en el mundo la empresa, básicamente sin una gran vocación, sino se presentó un primer proyecto, después de un primer proyecto un segundo y he pasado 35 años.

Y bueno, un poco lo que me ha llevado a donde estoy ahora es haber cerrado un poco este primer ciclo de 35 años de mundo de la empresa, muchos tipos de empresas, muchas, la mayoría multinacionales, aunque no todas, Juegos Olímpicos, un reto, la verdad, impresionante que en el arranque de mi carrera me marcó mucho por un tema de esto, por un tema de compromiso, pocas veces yo creo que ninguna o no me he encontrado otra empresa privada que sea capaz de igualar el grado de compromiso, de implicación y de reto que tenía en ese momento el organizar los mejores Juegos Olímpicos en la ciudad de Barcelona.

Entonces sí que es verdad que eso ya marcó un inicio afortunado en este sentido de poder haber participado en un reto tan grande y haber estado en ese momento con gente tan comprometida, con buen liderazgo, con un compromiso enorme que todas las empresas pagarían millones y millones para tener a los empleados comprometidos como los que estábamos en aquel momento.

Entonces, me he desarrollado estos 35 años de la empresa y el año pasado pues un poco,