Trump pincha el crecimiento económico de EEUU 2d706a

En sólo un trimestre, Donald Trump ha conseguido hundir el crecimiento económico de los Estados Unidos.

Veámoslo.

Primer trimestre de gobierno de Donald Trump, desde enero a marzo de 2025, y la economía estadounidense entra en contracción por primera vez desde 2022.

Concretamente, y como podéis ver en este gráfico, el PIB de los Estados Unidos estaba creciendo trimestre tras trimestre a unas tasas anualizadas de entre el 2 y el 3%.

Y sin embargo, en el primer trimestre de 2025, la economía estadounidense se ha contraído, ha retrocedido un 0,3%, ha pasado de crecer anualizadamente en el último trimestre de 2024 un 2,4%, ha de crecer anualizadamente un 0,3%.

Una caída, por tanto, del ritmo de expansión de la actividad de 2,7 puntos porcentuales.

Y lo sabrá que, probablemente buscando una analogía con lo que hizo Milley durante sus primeros meses de gobierno, traten de justificar esta contracción del PIB estadounidense en el primer trimestre de gobierno de Donald Trump, diciendo que esa contracción se debe a que Donald Trump está aprobando fuertes ajustes del gasto público dentro de los Estados Unidos.

Y claro, si hasta entonces el gasto público estaba impulsando artificialmente el crecimiento del PIB, ahora que se está recortando el gasto público, el crecimiento artificial que estaba experimentando la economía estadounidense desaparece.

Por tanto, en realidad, no se trata de que antes la economía estadounidense estuviese creciendo y ahora esté decreciendo.

Se trata de que antes la economía estadounidense estaba creciendo artificialmente, impulsada por el gasto público exuberante y ahora, en cambio, que se está podando ese gasto público exuberante, se está mostrando el auténtico estado de salud en el que se hallaba la economía estadounidense.

Sin embargo, si calculamos la tasa de variación del PIB estadounidense sin tener en cuenta la aportación positiva o negativa del consumo público a ese crecimiento económico, obtendremos un gráfico como el siguiente.

Es verdad que excluyendo al sector público, la tasa de crecimiento del PIB estadounidense bajo el gobierno de Joe Biden es algo menor que la que hemos visto antes.

En lugar de movernos en crecimientos del PIB entre el 2 y el 3%, más bien nos ubicamos en crecimientos del PIB entre el 2 y el 2,5%.

Y a su vez, excluyendo al sector público, también se modera la magnitud de la caída del PIB estadounidense en el primer trimestre de 2025 bajo el gobierno de Donald Trump.

Pero es que aún así el PIB estadounidense se contrae.

Estaba creciendo sin tener en cuenta al sector público un 1,9% anualizado en el cuarto trimestre de 2024 y ahora mismo, en el primer trimestre de 2025, sin contar la influencia negativa que sobre el PIB tiene el ajuste del sector público, la economía estadounidense se está contrayendo un 0,05%.

Por tanto, la caída del ritmo de actividad económica de los Estados Unidos, incluso sin tener en cuenta la influencia del sector público, se cifra en dos puntos porcentuales.

Ha pasado de estar creciendo al 1,9% a decrecer el 0,05%.

Y ya supongo que los que entienden algo más sobre economía me intentarán aclarar que cuidado, que esa es sólo la influencia directa del gasto público sobre el PIB.

Pero que también deberíamos tener en cuenta la influencia del efecto multiplicador de ese gasto público.

Es decir, cómo un mayor gasto público puede inducir un mayor consumo privado o una mayor inversión privada y cómo un menor gasto público puede inducir a un menor consumo privado o a una menor inversión privada.

Sin embargo, las mejores estimaciones del efecto multiplicador para la economía estadounidense en un contexto de expansión económica, es decir, fuera de una depresión y de pleno empleo de los recursos, es decir, sin que haya muchísimo desempleo, las mejores estimaciones del efecto multiplicador lo cifran en uno.

Algunas en el 1,2, otras en el 0,8, pero en general en torno a uno.