El sexo como nunca te lo habían contado | Pausa, episodio 106 5q1a2d

Listo.

Hola, soy Marta García Ayer y vamos a hacer una pausa.

Y la vamos a hacer en un sitio que ahora mismo está nublado, hace mucho frío.

Estamos en la puerta del Hospital de León.

Hay mucho trajín, trajín de ambulancias, de gente que entra y que sale, con muletas, el servicio de limpieza, un patinete, estoy viendo, de alguien que baja por la rampa.

Hemos quedado con una doctora, con Ana López, para hablar de sexo.

Pero no como te imaginas, pero antes te vamos a contar una historia.

Bueno, yo creo que mejor te la va a contar Ana.

Hola. Ana, ¿cómo estás? Bien. ¿Tú? Hola, Ana. ¿Qué tal? Pues, hala, vamos.

Os voy a llevar por ahí para que veáis la puerta derecha.

Primera puerta izquierda.

Cinco euros para la respiración, 50 euros.

Espacio de eucología, donde yo desarrollo la mayor parte de mi trabajo.

Aquí recibes a las pacientes. Sí, eso es.

Y son pacientes, todas ellas, de cáncer de mamá.

Exacto.

Estaba mirando las estadísticas de cáncer de mamá y creo que es una de cada ocho mujeres podemos desarrollar algún tipo de cáncer de mamá a lo largo de nuestra vida, una de cada ocho.

Eso es, sí, sí.

Por eso necesitamos que gente como tú, que tiene tanta visibilidad, hable en los medios de esta enfermedad, porque es algo que nos va a tocar de cerca, por desgracia, o a una de nosotras, o a alguien de nuestra familia, o de nuestras amigas.

Bueno, yo le he prometido a los oyentes de Pausa que vamos a hablar de sexo.

Así es, y no hemos tomado nada.

O sea, se puede hablar de sexo sin haber bebido vinos a las nueve de la mañana, pues así será.

Sí, las pacientes diagnosticadas de cáncer de mamá necesitan muchísima ayuda en la esfera sexual.

Y esto es algo de lo que no hablamos habitualmente.

Ni los médicos, porque no estamos formados y porque todavía hay mucho pudor.

Y las pacientes, porque creen que el médico no es la persona a la que se lo tienen que contar.

Ana, hemos dicho que hoy no voy a ser yo quien va a contar una historia, que vas a ser tú.

Y no va a ser una historia, van a ser tres historias.

¿A quiénes vamos a conocer hoy? Bueno, pues las protagonistas del episodio de Pausa de hoy se llaman Eva, Beatriz y Ana Isabel.

Son tres pacientes que han tenido un cáncer de mamá a lo largo de su vida y las tres han sufrido muchos efectos secundarios, o bien por las cirugías, o bien por los tratamientos que yo les he puesto, en su esfera sexual.

Cuéntame cuál es la historia de Beatriz.

Bueno, pues Beatriz es una chica que está curada de su cáncer de mamá, pero que tuvo el problema o la situación personal que, en cuanto le diagnosticaron el cáncer de mamá, le quitaron una teta y su novio se piró.

Y eso es algo frecuente, lo ves mucho en consulta.

Sí, esto es algo que lo vemos de vez en cuando en la consulta.

¿Y la historia de Ana Isabel? Ana Isabel fue diagnosticada de un cáncer de mamá con metástasis cuando era muy jovencita.

Con veintitantos años se quedó menopáusica, como efecto secundario de los tratamientos.

No tenía ganas de tener relaciones sexuales con su novio.

Cuando lo intentaban, no era capaz, porque tenía mucha sequedad vaginal, le dolía mucho en la penetración.

Entonces, tuvo que volver a descubrirse y redescubrir su relación para volver a disfrutar del sexo, que ella nos va a contar que esto es posible.

¿Y Eva? ¿Qué fue lo que preocupaba a Eva cuando vino a tu consulta, además del cáncer de mamá, por supuesto? Eva tiene un hándicap.

Además de tener un cáncer de mamá, tiene en sus genes una mutación que le predisponen a la hora de desarrollar tumores, entre ellos el cáncer de mamá.

Entonces, ya tenía un hijo, pero después de haberse diagnosticado el cáncer de mamá, quería tener más hijos.

Y esto era algo que a ella le preocupaba.

Entonces, conseguimos preservar la fertilidad, que aunque le pusiéramos quimioterapia, pudiera ser mamá unos años después, y lo ha conseguido.

Y tiene un bebé precioso, que nos trae siempre a la consulta cuando viene a revisión.

Bueno, pues qué bien que vamos a conocer ahora a Beatriz, Ana Isabel y a Eva.

Pero antes, Ana, danos una vuelta por oncología, por el Hospital de León, para enseñarnos tus dominios.

Eso está hecho porque esta es como mi segunda casa.

Así que, adelante.

Como veis, hoy no hay mucha gente.

Los viernes tenemos mucha menos actividad asistencial y lo dedicamos a otras cosas.

Y, además, hasta ahora, los que tienen tratamiento de quimio suelen ir a desayunar, porque es primera hora de la mañana.

Hola, buenos días.

Y esta que veis aquí es nuestra sala de tratamiento.