Personajes indispensables de la Historia de España: "Felipe IV, el rey planeta". Raúl-Fernando Gómez 2n3m20

Dijo Camilo José Sela en una ocasión, hay dos clases de hombres, quienes hacen la historia y quienes la padecen.

Bienvenidos amigos a un nuevo programa de senderos de la historia. En nuestro programa de hoy de personajes indispensables de la historia de España, os hablaré de Felipe IV.

La larga y dolorosa desintegración del antiguo imperio español recibe con Felipe IV otro golpe mortal. La figura del Conde Duque de Olivares ocupa un periodo en el que se sueña con la recuperación moral y territorial y se recuerda a los viejos tiempos de Carlos el Emperador y Felipe II. Así, mientras el rey se muestra incapaz de asumir un proyecto político, los aires de grandeza de Gaspar de Guzmán derivarán en la pérdida de territorios y de crédito internacional.

Así comienza Senderos de la Historia, un programa presentado y dirigido por Raúl Fernando Gómez.

Felipe IV tenía 16 años cuando fue proclamado rey de España. Por sí mismo o por consejo de los que le rodeaban, dictó su primera orden inmediata. Todos los documentos oficiales y las llaves que tenía en su poder el duque de Buceda, valido de su padre, quedaban a partir de ese momento en manos de Baltasar de Zúñiga, hallo del propio rey y todos los cargos de gobernación pasaban en adelante a Gaspar de Guzmán y Pimentel, conde de Olivares y duque de Sanlúcar la Mayor. Los modos de apropiación del poder por parte de los nuevos privados fueron muy semejantes a los instaurados por el duque de Lerma y la familia Sandoval.

Procuraron diseñar un entramado de beneficios, favores y cargos basados en los nepotismos y así controlar cualquier acción política en el seno de la corona. Los objetivos declarados eran restablecer la dignidad y la honradez perdidas durante el gobierno corrupto de Lerma.

Los logros, sin embargo, fueron otros. La muerte de Zúñiga en 1622 dejó como jefe absoluto al conde duque de Olivares. Los españoles habían depositado sus esperanzas en un nuevo reinado reformista, pero la onipresencia de Olivares atrajo de nuevo el sentimiento de desamparo y desilusión. Y decían, quien alivia al rey del trabajo y la fatiga de su cargo es un ladrón, pues le quita el honor, el orgullo y los frutos de ese cargo, sentenció el moralista Francisco de Quevedo. Felipe IV, rey de España, nació en Valladolid en el año de 1605.

Era el tercer hijo de Felipe III y Margarita de Austria. Antes de subir al trono, en 1621, su padre lo había casado con Isabel de Bourbon, hija de Enrique IV de Bourbon, rey de Francia y de María de Médicis. En los desposorios, Felipe tenía 10 años y la futura reina 12. Cuando se organizó la casa de los príncipes en Burgos, un gentil hombre tuvo a la figura del heredero, se llamaba Gaspar de Guzmán, y no perdió el tiempo en ganarse el favor del futuro Felipe IV. Se dice que fue el propio conde duque quien instó al príncipe a mantener relaciones con la princesa cuanto antes.

El año de la muerte del rey, en 1621, Isabel dio a luz una niña que no sobrevivió. Tampoco cumplieron el año, ni la segunda, ni la tercera, ni la cuarta hija, entre 1623, 1625 y 1627. El príncipe Balthasar Carlos nació en 1629 pero murió a los 17 años. Después de otra hija malograda tempranamente, en 1635, nació en septiembre de 1638 la infanta María Teresa, que se casaría en 1660 con Luis XIV, rey de Francia. La reina Isabel, de quien se murmuraron amores con el famoso galán Villa Mediana, murió con 40 años y sin haber dado un heredero a la corona. El rey tomó entonces por esposa a su sobrina Mariana de Austria.

Mariana le dio a su esposo cinco hijos. Cuatro de ellos murieron al poco de haber nacido, hasta que en 1661 nació el príncipe Carlos, que habría de reinar enfermo y débil hasta la completa extinción de la dinastía de los Austrias en el trono español. Del gusto del rey por las relaciones amorosas hablan sus muchos hijos naturales. Felipe IV compró a la hija del conde de Chiriel por un puesto para éste en Italia y de esa relación nació Fernando Francisco de Austria, que reposa en el Escorial. Tuvo una hija llamada Ana Margarita de San José, que se casó con el rey de Francia.