Javier Sierra y Josep Guijarro. Síndrome DIANA. Abducción y Visitantes de Dormitorio. Conferencia. Jornadas de Ufología 436o6v

Los casos no serán aprobados o condenados, yo recuerdo los últimos acontecimientos en las grandes ciudades, en la ciudad de Sobrevivencia.

Aquí se trata de casos completamente aislados por parte de una persona y pese a que se puede contagiar, esto lo podemos dejar claro, pese a que se puede contagiar los pares de una persona individualmente.

Hablamos también de agresiones, es la primera de las ases de la definición.

Es de agresión porque en las ciudades que ha aparecido ese tipo de visitas o de monitoreo no han sacado un proyecto tan menos ratificante como lo han podido sacar.

Los ados han tenido agresiones primarias, antes hablaba en medio de un broma de salvajudismo, pero ha salido en los puntos radicales.

Hay una agresión, se les ha llevado el streamer y incluso hablaba de telecación anal.

En el caso de algunas mujeres han habido baratos psicológicos, son cosas que uno no pensaría que hubieran pasado antes.

Han habido baratos psicológicos, han habido, a lo largo de las edades, en el caso de Madrid, agresiones. Por tanto, es una agresión nocturna, porque siempre se va de noche.

Los padres visitando el monitoreo normalmente en la mediodía se tienen que reproducir con la oscuridad, siempre.

Por tanto, en el lugar donde el monitoreo se da normalmente en la oscuridad.

...porque presumiblemente la debilidad de estos manifestantes sea obstructoria.

Debido a lo que se siente hoy en día, podríamos...

Podríamos hablar del proceso que siguen las personas, a los que piden guía para lograr desarrollar esa integridad económica.

Digamos que en la última etapa de nuestras investigaciones era, básicamente, cuando comprobábamos que tradicionalmente la investigación nos enseñaba que los ados eran personas que establecían más de una reunión o más de un meeting con los extraterrestres, con los que intercambiaban todo tipo de información.

Sin embargo, los asesinos, tradicionalmente, insisto, eran personas que tenían una experiencia traumática en determinado momento de su existencia y que generalmente no volvían a tener ya ninguna otra experiencia de esas características.

Pues bien, con la aparición de los libros, incluso Sicomunión, los que antes aludieron y se fijaron en su conferencia, se revela un nuevo fenómeno.

Se revela lo que sería el paso intermedio entre las abducciones y los os.

Es decir, ahora los abducidos, aquellas personas que sufrían experiencias traumáticas, no las sufrían alguna vez, sino que se daban cuenta de que las estaban teniendo continuamente y que estaban siendo continuamente monitoreadas, o seguidas, por esas presuntas entidades extraterrestres.

Bueno, el proceso se basa fundamentalmente en descubrir, como también ha apuntado antes, incluso fijado en su conferencia, si existe o no existe un estímulo real que motive la aparición de este tipo de fenomenología.

La conclusión a la que hemos llegado es que efectivamente ese estímulo existe, aunque no tiene por qué ser un estímulo extraterrestre.

La visita, no sé, de pacientes de cada planeta, procedentes de no se sabe qué planeta, los que producen todo este tipo de características.

Y decimos esto porque nos fundamentamos también en hechos históricos.

Recuerden ustedes, si se van un poco a relatos desde la Edad Media hasta esta parte, que en todas las culturas han aparecido visitantes del dormitorio que han tenido otro tipo de denominaciones.

Se habla de los incubos y los incubos famosos del medievo, de otro tipo de ciudades nocturnas que visitarían y que desaparecerían incluso a personajes tendentes en sus sueños, indicándoles modos de proceder políticos, etc.

Este es un problema universal que se ha ido produciendo a lo largo de toda la historia y que nosotros ahora denominamos extraterrestres.

Denominamos extraterrestres en una cultura que puede contemplar la existencia de extraterrestres gracias a su proceso de desarrollo tecnológico, gracias a que nosotros hemos enviado naves a nuestros familiares.

Nosotros tenemos conciencia de que somos un planeta minúsculo en medio de un gigantesco universo y contemplamos la posibilidad de vivir una inteligencia extraterrestre.

En el medievo la posibilidad no se contemplaba, y se hablaba de otro tipo de entidades.

El trauma que nosotros analizamos en este caso, lo mínimo es que existe un trauma externo que conduce al sujeto a una desesperada búsqueda de solución a sus vivencias, unas vivencias que a continuación especificaremos, y generalmente acaban siendo un desesperado intento para encontrarse a sí mismos.

Eso es una gran crisis de identidad cuando se tiene este tipo de experiencias, y generalmente, y esta es una de las constantes que hemos venido comprobando a lo largo de los últimos años, tanto abusivos, personas que viven en esta esencia traumática, incluso después de rechazo al tema extraterrestre, como compartados es la escena contraria a ese rechazo, es la agitación incondicional de alta, los extraterrestres acaban cayendo todos en lo que nosotros llamamos un riva, que marca de alguna manera...