Incluso el peronismo reconoce los aciertos de la política económica de Milei e556o

Incluso el peronismo argentino comienza a reconocer la buena política económica del gobierno de Javier Milei.

¡Veámoslo! Las políticas económicas del gobierno libertario de Javier Milei han dado frutos que cada vez resultan más incuestionables, incluso para personas muy alejadas de su espectro ideológico.

Este es el caso, por ejemplo, de Martín Guzmán, exministro de Economía bajo el gobierno peronista de Alberto Fernández.

En una reciente entrevista, Martín Guzmán, uno de los responsables del desastre económico argentino, tuvo que reconocer que el gobierno de Javier Milei había tenido algunos aciertos.

Es verdad que desde su punto de vista, desde su perspectiva peronista, el gobierno de Javier Milei se había equivocado en muchísimas cosas.

Pero claro, como los resultados están ahí, como la caída contundente de la tasa de inflación está ahí, como el desplome del riesgo país está ahí, como el relanzamiento de un crecimiento económico sostenido está ahí, pues entonces, por muy sectario e ideologizado que seas, algo bueno tendrás que reconocer que el gobierno de Javier Milei ha hecho.

Y desde el punto de vista de Martín Guzmán, el gran acierto que tuvo el gobierno de Javier Milei fue haber reducido de manera continuada los tipos de interés del Banco Central.

Algo que, dice, le gustaría haber hecho a él mismo, pero que no pudo hacer.

Escuchemos las declaraciones de Martín Guzmán y luego comentémoslas.

O sea, ahora eso empieza a dar como signos de personas que dicen, che, mira, accedí a un crédito hipotecario, o me endeudé con el banco, qué sé yo, no en términos hipotecarios.

En eso no hay un signo que va en un sendero que la gente puede leer como, che, mira, esto va para mejor, está normalizado.

Sí, hay elementos positivos también, hay elementos positivos y hay un tema que el gobierno manejó muy bien, que es la reducción de las tasas de interés del Banco Central.

Eso lo que considero que era correcto hacer, que de hecho era parte del programa económico que nunca se pudo implementar en el año 2022, en el marco del acuerdo con el FMI, nunca se pudo implementar, pero la tasa de interés había que bajarla, no subirla.

Subió, se la subió y el gobierno la bajó.

El punto era que, pensa esto, los depósitos de la gente, lo que tenés en un plazo fijo, un banco apretaba un botón y se convertía en deuda del Banco Central con ese banco, se llamaba la LELIC, y te pagaba una tasa de interés más alta que la que te pagabas por tus depósitos.

Entonces, en los bancos, la razón de ser, se supone, de los bancos es intermediar el ahorro de la sociedad en inversión para la producción.

Pero cuando vos tenés un sistema en donde el banco aprieta un botón y tus depósitos se los pasa al Banco Central y el Banco Central te paga una tasa de interés, desaparece la intermediación financiera.

Yo creo que eso es un acierto del gobierno.

El hecho de haber eliminado el esquema de la LELIC.

Hay quienes le critican y le dicen, sí, pero la LELIC pasó al Tesoro.

Está bien, está bien, eso es lo que había que hacer.

Y haber bajado la tasa de interés.

Cuando Javier Melell llegó al poder, el tipo de interés que abonaba el Banco Central sobre sus pasivos remunerados era del 133% al año, y en la actualidad ese tipo de interés ronda el 30%.

Por consiguiente, hemos asistido a una rebaja muy sustancial de los tipos de interés.

Y Martin Guzmán dice que esto es bueno porque de esa manera se favorece que la financiación que posee el banco la transforme en créditos para el sector privado, de ahí que ahora mismo se estén disparando las compras de viviendas o de automóviles, porque son compras que están muy influidas por la disponibilidad de financiación.

Cuando gobernaba el peronismo lo que hacían los bancos era captar financiación para prestársela al Banco Central y que el Banco Central les pagara por esa financiación tipos de interés altísimos.

Ahora que el Banco Central ya no paga tipos de interés reales después de inflación tan altos, a los bancos ya les empieza a interesar prestar la financiación que poseen al sector privado para que, por ejemplo, se compre una casa con un préstamo hipotecario o se compre un automóvil con un crédito automovilístico.

Además, y esto Martin Guzmán no lo menciona aquí, pero también es cierto, unos bajos tipos de interés por parte del Banco Central permiten reducir el coste de refinanciar la deuda pública.

¿Está bien? ¿Está bien? ¿Está bien?