ESTE EMPRENDEDOR ESPAÑOL ha CREADO UN DISPOSITIVO REVOLUCIONARIO: EX02 DESDE VALENCIA j2y4s

¿Qué tal queridos amigos? Bienvenidos a un nuevo viaje en el Cascarón de Nuez.

Hoy sí de viaje y madrugando porque todavía no ha amanecido. Estoy en un sitio un poco tétrico, hace frío, estamos en invierno. Me han citado y solamente me han dado dos palabras claves, Edu Pérez y Exodus. Vamos a ver exactamente qué es lo que me tienen preparado en este sitio que parece el escenario de una peli de acción de Hollywood. En el Cascarón de Nuez viajamos por toda España y Europa buscando las mejores historias y también personajes especiales.

Nos gusta apoyar a los emprendedores en un país tan árido y en el que cuesta tanto salir adelante y eso es lo que vamos a hacer hoy en Valencia. Vamos a visitar a una persona que lleva muchos años desarrollando muchas innovaciones en el campo de la seguridad y de las Fuerzas Armadas, pero a pesar de todo le falta todavía mucha financiación y visibilidad.

Así que allá que vamos, este es el primer episodio de varios porque no nos cabe todo en uno único, pero te aseguro que no te va a defraudar. Vamos a conocer a alguien que ha desarrollado una tecnología nueva, parece un arma, pero realmente ni lo es ni tiene catalogación de arma. ¿De qué estamos hablando? Eduardo Pérez, ¿cómo está usted caballero? Tenemos papeles para estar aquí, no vamos a hacer nada clandestino.

No, no, no. Vale, bien, lo dejáis un poquito más tranquilo porque, madre mía, la que me habéis montado, he estado viendo lo que me habéis organizado y tiene miga, no os lo perdáis, de verdad, quedamos hasta el final porque vais a alucinar con lo que vais a ver aquí gracias a este señor, este caballero. Nombre Eduardo Pérez, edad desconocida, profesión, toda una vida dedicada al desarrollo, fabricación e instalación de laboratorios.

Lugares donde ha conocido a científicos increíbles y donde ha podido saber cuáles son las necesidades que todavía no se han inventado.

Éxodos es un sistema completamente nuevo y modular que sirve para apagar incendios, para que cualquier persona o cuerpo y fuerza de seguridad de un estado pueda defenderse de una agresión con fuego, pero más allá de eso se ha convertido en un invento al que prácticamente se le puede acoplar cualquier cosa, gracias a su innovador mecanismo en el que la pirotecnia es la clave. En este vídeo lo vas a ver y te aseguro que no vas a salir de tu asombro.

Así que hoy me voy a enfrentar a cócteles Molotov, a agresiones, a una turba enfurecida y voy a intentar salir victorioso de todas estas situaciones y emboscadas.

Bien, pues vamos a hacer una prueba, mejor dicho, me vas a dejar que haga una prueba demostrativa de cómo apagar un fuego con el Éxodos. A ver, ¿cuál es la operativa? Cuéntame un poco cómo lo haríamos. La operativa, esto es un sistema piroeléctrico, se introduce el cartucho, se cierra con firmeza la recámara y se acciona la cola del disparador, el gatillo.

Tiene un seguro, ¿no? Tiene un seguro, efectivamente, al ser un elemento policial que se lleva adosado el cuerpo, pues era obligado a cumplimiento tener una medida de seguridad. El cartucho no tiene dilatación, apenas hagas un giro de muñeca, el cartucho abandona la recámara. Se inserta sin dificultad, se cierra y está listo para operar.

Siempre verificar que no está el seguro puesto, se apunta a la base de las llamas y se empuja el fuego hacia el final. Y verás que tú mismo vas manejando el fuego como si fuera una escoba de gas que lo barre todo. Y un profesional o cualquier persona que utilizará esto podría llevar varios cartuchos en caso de que fuera necesario poder hacer el recambio. La recarga es muy sencilla.

Sobre la marcha. Es muy sencilla, se trae el cartucho, se mete otro y tantos cartuchos como puedas cargar, que son muchos, pesan menos de 100 gramos cada cartucho y equivalen a unos 3 kilos de extintor. Entonces, claro, la capacidad logística de un operador de este elemento son muchos fuegos los que puede atacar. Ahora lo vas a comprobar. Bueno, si te parece empezamos por uno y vemos a ver qué tal se nos da.

Sí, subimos la apuesta. Venga, vamos a probar. Así que ahora ha llegado el momento de la verdad. La prueba de fuego, iba a decir, pero es que esto va de apagar fuegos. ¡Dios! ¡Segunda voy! Bueno, ¿qué es exactamente lo que he hecho mal en este primer intento? Básicamente, no he seguido las instrucciones porque no es lo mismo verlo que hacerlo.

Hay que atacar el fuego desde su base y avanzar de manera decidida y yo me he dedicado en los primeros segundos a pajarear como si estuviera lanzando un spray en lugar de utilizar un sistema apagafuegos. Menos mal que tengo a mi lado un bombero muy experto y profesional que me hace de coach para intentar hacer bien estas cosas. Bueno Edu, muy interesante. La segunda ha salido muchísimo mejor. Cuando conoces los dos detallitos. La experiencia en todo es un grado. La curva de aprendizajes una o ninguna vez.