EP8XT2 | Holísticas 1h4q3q

Hola, soy Virginia Moll y estoy fluyendo, lo que significa que a partir de ahora voy a volver a mi época adolescente y a hacer lo que mejor se me daba, lo que me da la gana.

De eso trata el fluir, cariño.

Por eso vamos a hablar de un fenómeno que está creciendo a la velocidad de la luz.

Bueno, a la velocidad de la luz esta semana no, porque Mercurio está a retrogrado, pero vamos a hablar con la H de holísticas.

Sí, son esas personas que ahora no hacen planes porque tienen que ver si les vibra o no.

Y no, no se refieren al móvil.

Son esas personas que te dejan tirada aunque habíais quedado porque han tenido un pálpito.

¿Queréis que os diga lo que es ese pálpito? Quedarse en casa tocándose el higo mientras encienden un palito santo.

Y sí, claro, amor, por supuesto, yo también soy esa persona.

Soy esa persona que se cree especial porque el universo le habla.

Las holísticas tenemos suerte de vivir en estos tiempos en los que podemos decir estas tonterías y como mucho nos cancelan en Twitter.

Pero las holísticas nacemos hace un tempito antes y ¿qué nos pasaba? Pues que nos ponían una camisa de fuerza y nos ponían también un orfidal debajo de la lengua, cariño.

Ahora, si eres holística, lo que puedes hacer es montar tu propia comunidad en Instagram, venderte como mentora energética y, lo mejor de todo, que te paguen para enseñarlas a fluir.

¿Sabéis quiénes son? Son esas chiquitas que conectan con el universo, pero que no contestan a los whatsapps de su madre, porque, uf, qué pesada, cariño.

Además, hoy me gustaría daros unos tips, unas señales para saber si de verdad eres holística o no eres holística.

Uno, dices, medite sobre ello, pero la realidad es que estabas en el baño haciendo caca con el móvil en la mano.

Dos, te compras un cuenco tibetano, muy espiritual todo, pero todas sabemos cómo termina el cuenquito tibetano, cariño, con las aceitunas para los invitados, o, en mi caso, el cuenco tibetano lo utilizo para mis pitis, cenicerito.

Y, número tres, acumulas pantallazos, que esta me representa muchísimo, pantallazos de las once y once.

Tú crees que es el universo que te está diciendo que pidas un deseo, que vas por buen camino, pero la realidad es que estás todo el puto día pegada al móvil y es casi imposible que no veas el pantallazo de las once y once porque es que estás enganchada al telefonito.

Y luego está ella, esa amiga que una vez fue a Bali a un retiro y ahora te dice que canaliza energías.

Pero, cariño, si lo que tú canalizabas era el Roncola en los botellones, déjate de tonterías ya con la canalización.

Y, ojo, que estas me gustan mucho, son mi categoría favorita, las holísticas malas personas.

Van por ahí sembrando el mal, reventando todo lo que tocan, manipulando, enredando, pero luego llegan a casa, encienden un incienso y se apuntan a una señora para que les limpie las energías, como si eso fuera ir a la tintorería.

Como si fuera decir, me limpias esta maldad.

Yo conocí a un personaje de estos.

Mala, pero mala, pero mala de verdad.

Un día la veo con una pulserita roja, antimal de ojo, y yo pensando, cariño, igual si dejas de sembrar el pánico, puedes dejar la pulserita para otro día.

No te van a salvar los siete nudos de una pulsera roja comprada en Ibiza, porque el karma existe, para eso somos holísticas.

No te va a salvar un trocito de cuerda.

Luego están las otras, las que han decidido mirarse a sí mismas y con la excusa de yo primero, no te ceden el sitio ni en el bus.

Estas son las peores, porque van por mis huevismo.

Están priorizándose, cariño.

Y claro, todo acaba igual.

Manifiéstalo, manifiéstalo.

Pues nada, cariño, yo manifiesto que también quiero ser holística, pero eso sí, holística, con aire acondicionado y Netflix, porque vibrar alto sí, pero solo yo.

¡Bienvenida Mamarracha! ¿Estás escuchando? ¿Qué pasa? Era necesario hacer otro podcast, pero has hecho otro podcast.

Tengo cosas que contar y ¿qué pasa? No soy ego, siempre y caminada.

Tantas cosas que contar y ¿qué pasa? Yo no soy una mamarracha.

Mamarracha, un podcast de Virginia Moy.

Holísticas, bienvenidas todas.

Hoy estoy muy bien acompañada.

Estoy acompañada por mis amigas Anais Oliveros y Camila Parker-Bowles, que es un alter ego, por si no habéis...

A ver si se creen que me he apellido Parker-Bowles.

Bueno, podría ser, te pega.

Bueno, pues nada.

Bueno, Bowles.

Bowles.

Primero, hablando de Bowles...