
LA ENERGÍA ILIMITADA - CUANTO MÁS HAGA, MÁS HACE c162y
Descripción de LA ENERGÍA ILIMITADA - CUANTO MÁS HAGA, MÁS HACE 26p18
Cuando estamos cansados, a menudo es porque estamos aburridos. Cuando no nos enfrentamos a un desafío real, entramos en un letargo mental y físico. «A veces la muerte llega por falta de energía», dijo Napoleón cierta vez, y la falta de energía proviene de una falta de retos, llega cuando hemos asumido menos de lo que somos capaces. Si acepta un riesgo, tu mente y tu cuerpo responderá con un aumento de energía. Convierta el riesgo en una práctica constante; no se acomode. Pronto vivir en terreno mortal se convertirá en una especie de adicción porque identificará que se siente más vivo. Cuando los alguien sobrevive a un roce con la muerte, siente una euforia que desea repetir. La vida cobra más significado frente a la muerte. Los riesgos que va asumiendo, los desafíos que va superando, son como muertes simbólicas que agudizan tu apreciación de la vida. 401i53
Este contenido se genera a partir de la locución del audio por lo que puede contener errores.
3, 2, 1 Muy buenas a todos, soy Pedro Ibar y esto es Emulsion.me Napoleón tenía muchas cualidades que lo convirtieron, tal vez, en el mejor general de la historia.
Pero la que lo elevó a la cumbre, y lo mantuvo ahí, fue su energía ilimitada.
Durante las campañas trabajaba de 18 a 20 horas diarias.
Si era necesario, pasaba sin dormir varios días.
Pero la falta de sueño rara vez reducía sus capacidades.
Trabajaba en el baño, en el teatro, durante un banquete.
Para controlar todos los detalles de la guerra, cabalgaba interminables kilómetros sin cansarse, o al menos, sin quejarse.
Sin duda, Napoleón tenía un aguante extraordinario, pero había algo más.
Nunca se permitía descansar, jamás estaba satisfecho.
En 1796, en su primer puesto de mando real, condujo a los ses a una notable victoria en Italia.
Y luego se fue de inmediato a otra campaña, esta vez en Egipto.
Ahí, descontento con el rumbo que estaba tomando la guerra, y con la falta de poder político, que a su entender, estaba recortando su control sobre los asuntos militares, regresó a Francia y conspiró para convertirse en primer cónsul.
Una vez logrado, puso en marcha de inmediato su segunda campaña italiana.
Y así continuó, sumergiéndose en nuevas guerras, nuevos retos que requerían apelar a su energía ilimitada.
Si no afrontaba la crisis, perecería.
Y ahora bien, ¿qué tiene esto que ver con usted? ¿Qué tiene esto que ver contigo? Pues, no sé si se ha dado cuenta, o si te has dado cuenta que cuanto más haces, más haces.
Cuando estamos cansados, a menudo es porque estamos aburridos, porque llevamos toda la tarde en el sofá, porque hemos dormido demasiado, porque hemos comido demasiado.
Y esto, pues obviamente, tiene un impacto mitocondrial.
Que si quieres saber, te recomiendo a mi amigo Antonio Valenzuela, que por cierto tienes un podcast sobre ello aquí en el canal, o en Spoti, donde nos escuches.
Pero el tema, principalmente, es que no necesitamos algo externo para tener energía.
Pues cuando no nos enfrentamos a un desafío real, entramos en un letargo mental y físico.
A veces, la muerte llega por falta de energía, dijo Napoleón cierta vez.
Pero es que esta falta de energía proviene de una falta de retos.
Pues cuando llega, cuando hemos asumido menos de lo que somos capaces...
Perdona, cuando llega cuando hemos asumido menos de lo que somos capaces, la falta de energía viene porque estamos sin usar nuestro potencial.
En el momento que nos volvemos audaces, en el momento que nos retamos, en el momento que nos arriesgamos, el cuerpo, nuestra mente, responderá en coherencia.
Por esto, debes convertir el riesgo en una práctica constante.
No debes de acomodarte, porque vivir en terreno mortal se puede convertir en una especie de adicción, pues te sentirás mucho más vivo.
Y no me malinterpretes, no significa que debas hipotecarte o debas tener otro hijo o un primer hijo, o debas mudarte, pero que sabes que al final cuanto más haces, más puedes.
Cuando alguien sobrevive a un roce con la muerte, siente una euforia que le desea repetir, porque se siente vivo.
La vida cobra más significado frente a la muerte.
Los riesgos que vamos asumiendo, los desafíos, son como muertes simbólicas que agudizan nuestra apreciación a la vida.
Pero vamos a ver, ¿por qué cuanto más hacemos, más hacemos? Bien, este fenómeno ocurre porque la acción genera impulso y cambia la percepción del esfuerzo.
Es un principio que combina aspectos psicológicos, neurológicos y prácticos de la productividad.
Es básicamente la ley de Newton aplicada.
Un cuerpo en movimiento tiende a permanecer en movimiento.
Tú piensa lo que cuesta arrancar un tren, pero también piensa lo que cuesta frenar un tren.
Y tal vez no lo sientas, o tal vez sí, pero hay una inercia que ya te está arrastrando.
Y será mejor.
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