La Buena Vida 12-02-25 24593d

Pues aquí estamos, un miércoles más. Qué contenta estoy, ¿verdad? Bueno, pues seguramente será
porque nos acercamos a Santontín, por decirlo de alguna manera. Ya sabéis, aportaros, ¿eh? Bueno,
pues aparte de eso, en realidad estamos en el ecuador del invierno, con lo cual hace un frío
que pela por las mañanas. Pero bueno, ya prácticamente hemos superado la mitad del
invierno y bueno, pues ya sabemos que marzo normalmente nos suele hacer ya un tiempo mucho
mejor, ya aparecen las fallas. Yo recuerdo cuando mi hijo mayor era pequeño que bueno,
pues llegaron fallas y veía a la gente pues comiendo helados y me decía, era chiquitito,
y me decía que él quería un polo y yo le decía, no, cuando lleves manga corta,
que todavía llevas manga larga y hace frío. Y miraba las falleras y decía, jolín, pues si
llevas manga larga, manga corta. Bueno, pues esto es lo mismo, no se engaña, pero bueno,
hasta marzo no hay nada que hacer. Vamos a ver, hoy en nuestro momento zen, a ver,
celebrar una noche romántica dándole un giro al día a día y sorprender a vuestra pareja,
reavivando la llamita. Bueno, pues luego os cuento ya más o menos por dónde van los tiros.
En la cocina, como decían nuestras abuelas, pues apetecen los calenticos y de eso va la cosa,
porque una cosa lleva a la otra y bueno, ahora os lo explico porque me ha ocurrido que me he
liado con una cosa que me ha sorprendido y a raíz de ahí pues he empezado a profundizar,
y bueno, ahora os contaré lo que vamos a hacer, porque bueno, prácticamente receta a receta de
comida hoy no vamos a tener. Lo que vamos a tener hoy es, os lo voy a adelantar directamente ya,
vamos a hablar de café, de infusiones y todo eso, ya digo que ahora los calenticos apetecen y no
siempre vamos a tomarlos de café, hay otras muchas más opciones, por lo tanto, después de nuestro
momento zen que vamos a empezar ahora mismo, pues comentaremos el tema de las infusiones y de los
cafés, que la verdad que a mí me ha parecido interesante, sobre todo a mí, porque me gusta
mucho, mucho, mucho el café, por lo tanto, ya vamos a empezar con nuestro momento zen.
Los aceites esenciales son una excelente manera de mejorar tu bienestar y crear un ambiente
relajante. En la aromaterapia se utilizan aceites como la lavanda, que es conocida por sus propiedades
calmantes, también está el eucaliptus, que puede ayudar a despejar las vías respiratorias,
luego para los masajes relajantes, pues podemos optar por aceites como el de almendra o el de
yoyoba, que son excelentes portadores, recordar que ya hicimos en su día el aceite de almendra y
ya comentamos que es portador, es decir, que se añade o se utiliza para unir o hacer una sinergia,
que es una mezcla con otros aceites más elaborados, como puede ser el yangán o el de bergamota,
por decir alguno. Lo que hay que tener muy claro, porque ya hemos hecho en su día el aceite de
almendra y hoy ya adelanto que vamos a ver si conseguimos hacer aceite de lavanda, por si nos
da tiempo, pero lo que es muy importante...