ALGUIEN PARA PLATICAR_Miedo de volver a comenzar 533871

Hola, ¿cómo estás? Yo soy Eri, y estoy buscando a alguien para platicar.

Este espacio nuevo que se abre, pues justo para eso, para decir lo que estamos sintiendo, para dialogar, para entrar un poco más en comunicación, y que nos metemos acerca de las cosas de la vida, de lo que está sucediendo.

Yo soy un hombre de 42 años, vivo en Tijuana, Baja California, México.

Soy un hombre que se relaciona románticamente con otros hombres.

Estoy casado con un ser humano maravilloso.

Su nombre es Aldo. Irremediablemente va a salir él por acá a colación, pero realmente, pues el podcast se trata de que tú y yo platiquemos quién eres tú.

Vémelo diciendo, me lo puedes comentar por acá en la caja de respuestas, en la caja de interacción que tiene cada plataforma de podcast.

Yo simplemente voy a traer un pretexto para que iniciemos a conversar, para que nos pongamos a platicar así tú y yo, y que hablemos de lo que nos pasa en la vida.

Si tienes más de 30, si tienes más de 40, seguramente vas a coincidir conmigo en algunas cosas.

Y justo el tema de hoy son los inicios, y tiene que ver con el hecho de empezar algo nuevo, lo cual me recuerda cuando iba a la escuela, yo siempre fui un nerdito de esos niños a los que les encantaba ir a la escuela.

No tenía problema, nunca he tenido problema, recientemente sí, pero creo que es por algo de burnout.

Nunca había tenido problema con levantarme temprano por burnout y por ver las redes en la noche.

Pero pues sí, de niño me encantaba la rutina de te levantas, te arreglas, desayunas, porque yo no podía y sigo sin poder salir a hacer lo que sea, que en este caso es trabajo, y no tomar mis sagrados alimentos.

Entonces es muy de mi familia desayunar a la hora que se tenga que desayunar y punto.

Entonces la rutina de la mañana me encantaba, incluso yo era de esos niños que hasta loción usaba.

De repente mi tío, mis tías me regalaban lociones o esos de que te compras el frasco totote y te dan la muestra, o la de viaje y me regalaban ese tipo de esencias o de perfumes, ¿no? Al punto de que, saludos por ahí si hay alguien ochentero y recuerdan la loción, no sé si todavía exista, que se llamaba Obsession.

Entonces yo usaba Obsession y Dracar Noir.

Fíjate nada más, yo a los 5, 7, 8 años usando esas esencias.

Así que este niñito, ese pequeño, ese infante olía a hombre.

A hombre que se iba a relacionar unos años después románticamente con otros hombres.

Bueno, los inicios me encantaban y los inicios más importantes en esa primera etapa pues eran justamente los inicios de ciclo escolar o cuando regresábamos de vacaciones y para mí era todo un acontecimiento.

Comenzar algo siempre me ha entusiasmado bastante.

Dan muchísimos nervios, como siempre, hoy en este primer episodio de esta nueva etapa porque justo en el canal desde donde lo estoy posteando pues ya tengo otras oportunidades de que nos conozcamos pero ahora esto sí es completamente íntimo, personal y entre tú y yo y en los demás es en parte interacción, en parte traerte una rutina de un tema ya muy planeado, muy fraguado y aquí estoy tratando de que fluya así desde el corazón y desde el cerebro y pues a ver qué pasa, ¿no? Ahí disculparás las divagaciones postreras de este hombre de mediana edad, pero prosigo.

En cuanto a los inicios, creo que con el paso del tiempo, no sé, desde los veintitantos para acá, tal vez desde los 25 años para acá en cuanto a mi edad, sí me han puesto cada vez más y más y más nervioso y creo que ese nervio hacia los inicios tiene que ver con las expectativas y la autoexigencia que tengo, ¿no? Acerca de mi desempeño, acerca de esta cuestión de intentar a toda costa ser valorado, ser aceptado, ser ratificado como eres una buena persona, eres un profesionista o un profesional competente, eres un buen estudiante, eres un buen hijo, eres un buen, buen, buen, buen, buen, buen, estamos trabajando en eso, estamos yendo a terapia, bastante nos ha costado en lo económico y en lo emocional y en las, como dicen por ahí, ¿no?, los clavados así súper intensos hacia nuestras emociones y hacia nuestra historia personal, pero sí, sí, sí, sí, los inicios se me han vuelto cada vez un tanto más complicados con el tiempo y creo que por eso dije, ay, como me cuesta trabajo empezar, no hay otra manera de hacerlo sino que haciéndolo, sino que decidirlo.