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El algoritmo de la felicidad

El algoritmo de la felicidad 4j552e

16/5/2025 · 05:41
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Descripción de El algoritmo de la felicidad 2a6k

Los pasajes de "El algoritmo de la felicidad" de Mo Gawdat abordan la naturaleza de la felicidad a través de una perspectiva analítica y personal. El autor explora su búsqueda de una ecuación replicable para la felicidad, influenciada por la pérdida de su hijo y su formación como ingeniero. Critica la idea de que la riqueza y el éxito garantizan la felicidad y argumenta que la verdadera alegría reside en controlar el propio pensamiento y actitud, más que en las circunstancias externas. Gawdat también examina conceptos como la ilusión del yo y la naturaleza ilusoria del tiempo y el miedo, proponiendo que la felicidad duradera proviene de vivir plenamente en el presente, liberado de estas percepciones erróneas. Finalmente, presenta un argumento a favor de la existencia de un Diseño inteligente basado en la improbabilidad del azar, que le proporciona consuelo ante la pérdida. q3uy

Lee el podcast de El algoritmo de la felicidad

Este contenido se genera a partir de la locución del audio por lo que puede contener errores.

Arrancamos hoy con una historia, la verdad, muy potente, la de Mo Gaudat, un ingeniero de éxito en Google, y su vida cambia radicalmente con la pérdida de su hijo.

MO GAUDAT POR INTÉRPRETE Sí, una historia tremenda.

Y lo más sorprendente, quizás, es que a raíz de ese dolor se lanza a una misión, pues eso, aplicar su mente de ingeniero para entender la felicidad.

Exacto.

Y de eso trata su libro, El algoritmo de la felicidad, en el que vamos a profundizar hoy.

Es un enfoque distinto, ¿verdad? Totalmente.

Trata la felicidad casi como, bueno, como un sistema que se puede analizar, ¿no? Como un problema a resolver con lógica.

Y la idea hoy es desgranar un poco esa fórmula que él propone para estar bien de forma más sostenible.

Una fórmula, has dicho.

El corazón del libro es una especie de ecuación, ¿no? Eso es.

La fórmula es, felicidad es mayor o igual que la percepción que tienes de los acontecimientos menos tus expectativas sobre la vida.

O sea, que somos felices, o al menos no infelices, si como vemos lo que nos pasa, iguala o incluso supera lo que esperábamos que pasara.

Exacto.

La clave, dice él, está en ese desajuste.

Cuando la realidad percibida no cumple con la expectativa, ahí surge el sufrimiento.

Ahí está el punto, entonces.

No es tanto el evento en sí, sino, bueno, la comparación mental que hacemos.

Nuestra interpretación.

Gaudade insiste mucho en esto, ¿verdad? Lo del poder de los pensamientos.

Muchísimo.

Habla del test de la mente en blanco.

O sea, si quitas tu juicio negativo sobre algo que ha pasado, el sufrimiento baja, ¿no? Aunque el hecho en sí no cambie.

El dolor viene de cómo lo piensas.

Ya.

Y eso conecta con otra idea que me pareció muy fuerte.

La ilusión del pensamiento.

Esa vocecita constante en la cabeza.

Él dice que no somos esa voz.

Esa sí.

Sí, sí.

Es fundamental en su argumento.

Le da la vuelta a Descartes, ¿sabes? No es pienso, luego existo.

Sino más bien, existo y por eso mi cerebro piensa.

Ostras.

Claro.

Nos identifica con la conciencia que observa esos pensamientos.

No con los pensamientos mismos.

Y eso te da como libertad.

Porque si no eres tus pensamientos, puedes aprender a manejarlos.

Entiendo.

Puedes elegir no dejarte arrastrar por ellos.

Vale.

Esa distinción es clave.

Y siguiendo con replantear ideas, ¿qué dice de esa conexión que siempre hacemos entre éxito dinero, fama y la felicidad? Pues la cuestiona bastante.

Dice que, bueno, una vez tienes cubiertas tus necesidades básicas, más éxito material no se traduce directamente en más felicidad.

De hecho, sugiere que podría ser al revés.

¿Cómo que al revés? Que la gente que ya es feliz tiende a tener más éxito.

Son más productivos, más resilientes.

O sea, la felicidad primero y el éxito quizás viene después.

Interesante.

O sea, que buscar el éxito como camino a la felicidad podría ser un error de cálculo.

Entonces, ¿cuál es nuestro estado natural, según él? ¿De dónde partimos? Él cree que la felicidad es nuestro estado base.

Como un niño pequeño, ¿sabes? Que está absorto jugando, feliz sin más.

El sufrimiento, la ansiedad, todo eso son como capas que añadimos con pensamientos y expectativas que no gestionamos bien.

Su algoritmo es, en el fondo, una forma de quitar esas capas para volver a ese estado natural.

O sea, no es tanto buscar algo fuera, sino limpiarlo de dentro, quitar lo que nos impide ser felices.

Y ahí entra la actitud, ¿no? Frente a lo que no podemos cambiar.

Fulmarental.

Pon ejemplos como el del Apolo 13 o la peli La vida es bella.

La idea es que siempre podemos elegir nuestra respuesta interna, nuestra actitud, da igual lo que pase fuera.

Incluso si no puedes controlar las circunstancias.

Exacto.

Dice que si hay algo que no puedes cambiar, una variable incontrolable, pues la sacas de tu ecuación mental.

Te centras en lo que sí depende de ti, tu respuesta.

Aceptar lo incontrolable ya es un paso enorme.

Vale, gestionar pensamientos, aceptar lo que no controlamos.

¿Y cómo se cultiva activamente esa felicidad base? Habla de gratitud, de amor incondicional.

Sí, pero no como ideas abstractas, sino como herramientas prácticas.

La gratitud, por ejemplo, es entrenar la mente para valorar lo que sí tienes en vez de compararte siempre con quien tiene más.

Es cambiar el foco, ¿sabes? Mirar hacia abajo o alrededor en lugar de siempre hacia arriba.

Ya.

¿Y el amor incondicional? Empieza por uno mismo.

Es difícil ser feliz, dice, si dependes de la validación externa o de cumplir unas expectativas brutales contigo mismo.

Cultivar un aprecio básico por ser quien eres, con tus luces y sombras, crea una base más sólida.

Entendido.

Entonces, resumiendo mucho, la felicidad, según Gaudat, no es tanto una meta que alcanzar fuera, sino un estado interno.

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