2x05. Noemí Casquet: "La insatisfacción sexual en mujeres es enorme en comparación con los hombres" b332u

La forma en la que follamos es algo que necesitamos cambiar.

La gente no sabe sentir.

Tengo la sensación de que, de verdad, cada vez hay más mujeres que hemos perdido el miedo a estar solas.

Porque eres un puto adulto disfuncional que no sabes ni poner una puta lavadora.

Y ahora hablando de lo que estamos hasta el coño, ¿qué pasa con la rabia de las mujeres? Para mí toda revolución es incómoda.

Si la revolución se hace cómoda, no es revolución.

Tenemos ese complejo de ser la buena ex.

Han destrozado, hermana.

¿Por qué tenemos que avergonzarnos de que nos hayan engañado de estarte? Pero sería infiel y sería falsa.

Y yo no soy ninguna de las dos.

Tengo lealtad sobre todo a mí misma.

En esta época de la individualidad máxima, ponte tú a gestionarlo.

Nos han vendido un amor basado en el sacrificio, la exclusividad y el aguante, dejando de lado el placer, el deseo y la autenticidad.

Nos han enseñado a priorizar al otro en el sexo, a callarnos cuando algo no nos gusta y a sentir culpa por nuestro propio disfrute.

En este episodio de Salud Hormonal Podcast hablamos con Noemí Casquet sobre cómo desaprender lo impuesto y recuperar una sexualidad libre y consciente.

Noemí, bienvenida. ¿Cómo estás? Muy bien, muy ilusionada de estar aquí.

Enhorabuena por este espacio.

Muchas gracias.

Estoy muy contenta de tenerte aquí, de que hayamos podido combinar agendas que ya sabemos que a veces es un poco complicado.

Casualidad de la vida, pero estamos las dos un poco premenstruales.

Pero perdidas.

O sea, yo me he levantado esta mañana y he dicho gripe o reglas.

¿Sabes? No te pasa a veces.

Total, tía.

¿Por qué estoy tan frustrada? ¿Por qué estoy tan cansada? ¿Qué ha pasado? ¿Me estaré poniendo mala? Y dices, coño, es mi día 26, me quedan cuatro días para arreglar.

Y entonces todo cuadra.

Tía, sí, que poco le hacemos caso a toda esa parte.

Mira que intento ser como súper consciente de toda esta parte, pero muchas veces estás como tanto en el hacer que no te das cuenta de en qué punto está tu cuerpo y qué es lo que necesita.

Totalmente.

Y además lo hablábamos antes que incluso a la hora de hablar, a la hora de gestionar el contenido, a la hora de pensar, es que muchas veces cambiamos la manera...

A veces digo, tía, que soy dos personas diferentes.

Total, yo también lo siento así.

Es como que cuando estoy premenstrual me pongo un poco abuela sauce, ¿sabes? No sé si te pasa, pero me pongo súper sabia de repente.

O sea, tú pregúntame si quieres un buen consejo cuando estoy premenstrual.

Me encanta.

Me pongo súper abuela sauce y después también muy creativa, pero muy creativa desde la calma.

Sí, la introspección.

No desde la acción, muy desde la introspección.

Entonces, sí.

Yo la disfruto mucho de la premenstrual.

O sea, es una fase que me gusta.

He aprendido a amarla y a que me guste porque creo que en un sistema donde nos está exigiendo constantemente el hiperproducir a todos los niveles, es muy bonito cuando de repente paras y tu cuerpo te frena también.

Total, totalmente.

Además, ¿qué es eso? Que cuando no hacemos caso, luego todo va atropellado.

Es como una cascada de situaciones, pero cuando empiezas a entenderte, también empiezas a sacarle como partido a las dos partes.

Total.

Entonces, ¿a ti te afecta la sexualidad? Aunque ahora ya hablaremos un poco más de lleno ahí, ¿pero notas cambios ya sea en la manera de desear en tu líbido o en la manera de los gustos que tienes o las prácticas sexuales? Cuando estoy premenstrual, es como que primero llega un punto que cuando paso de la ovulatoria a la premenstrual, hay un bajón de mi deseo sexual.

Es como que mi cuerpo dice, no hemos procreado, pues no jodamos.

Y yo, ¿vale? Entonces, claro, es como que de repente mi deseo se frena.

Y muchas veces, como también estamos ahí, como, no, pero es que, claro, tengo que tener relaciones sexuales, porque, claro, tengo que, no sé qué.

¿Sabes? Esas cosas que tenemos en la cabeza y que muchas ocasiones, coño, estamos intentando combatirlas, pero es que son muy difíciles.

Porque nos han enseñado que, claro, las mujeres tenemos que estar ahí disponibles siempre, sino el hombre se va a ir y nosotras tal, ¿sabes? Y esa cosa, por más que la tengas muy deconstruida, al final sigue estando ahí también, ¿sabes? En muchos aspectos.

Entonces, tía, pues sí, a mí me cuesta mucho deconstruir esa parte.

Después, cuando ya estoy premenstrual y ya entro de lleno, estoy en modo abuela sauce, ahí sí que la forma de mantener relaciones sexuales es como que me gusta mucho.

Porque también siento muchísimo más todo lo que es la energía sexual, siento muchísimo más mi cuerpo, estoy más sensible.

Pero no me sirve el mismo sexo que puedo tener, por ejemplo, cuando estoy ovulando, que es como empotrarme contra la pared y arráncame el pelo, ¿me entiendes? Pero aquí es como, ni se te ocurra darme una embestida fuerte, ¿sabes? O sea, lo necesito mucho más conectado, mucho más respirándolo, mucho más fluido, ¿sabes? Mientras el de la ovulación puede ser muy fuego, este tiene que ser muy agua, ¿sabes? Me encanta.

Entonces, sí.

Y al final también darte el permiso de ser todo lo que eres, ¿no? Porque esto también eres tú.

Y eso es así un poco como me afecta.

Y luego, cuando tengo la menstruación, a mí me encanta tener relaciones sexuales con la menstruación.