Reprográmate 5x4vr

Te doy la bienvenida al podcast infinito tú, un espacio para reencontrar tu esencia, reilusionarte, reprogramarte, relacionarte y reagendarte. La empresaria y coach integrativa Maribel Jiménez Atienza, autora del libro Coaching para la Felicidad Cotidiana, te explica con ejemplos prácticos claves para reencontrarte y alcanzar ese estado que te permite conectar contigo y con el mundo.

El título del podcast de hoy es Reprogramate, entonces para comenzar te voy a proponer algo y es que cierres tus ojos y que respires profundamente y cuando hayas podido respirar un par de veces quiero que te contestes a ti mismo de manera automática o que, bueno, que completes las frases que te voy a decir. Por ejemplo, yo soy . Suspensivos, yo no soy . Suspensivos, la gente es . Suspensivos, los hombres son . Suspensivos, las mujeres son . Suspensivos, no sirvo para puntos suspensivos y mi mejor habilidad es puntos suspensivos. En sesiones de coaching, incluso en dinámicas grupales de este estilo, la gente responde muy fácilmente, en automático, a lo que son, a lo que no son, a lo que les parece a ellos que es un colectivo determinado, o la gente que pertenece a un país, o una nacionalidad, o lo que significa el dinero, o lo que significa trabajar.

Hay frases de lo que pensamos sobre nosotros, sobre las personas que nos rodean, sobre los conceptos que nos rodean, y por experiencias reales tanto nuestras como de otros. Por ejemplo, os pongo un ejemplo, si para mi familia el dinero o la idea que tienen del dinero es algo que corrompe, pues si yo no lo pongo en cuestión, probablemente yo acabe pensando también eso, que el dinero corrompe. Entonces, si yo tengo esta idea muy interiorizada, pues bueno, inconscientemente a lo mejor no me quiero asociar al dinero, o no quiero tener más dinero, y crearé situaciones para que eso ocurra, aunque sea de manera inconsciente. Y conscientemente a lo mejor estoy deseando tener más dinero para poder comprarme una casa, o para poder irme de viaje, pero sí que con tal de ser fiel a una idea muy arraigada, que es que el dinero corrompe y que no es bueno, pues yo voy a querer alejarme de eso. Entonces, lo que nos decimos tiene muchas consecuencias, muchas consecuencias en lo que vivimos.

Por eso es muy importante atinar bien, y vale la pena ser riguroso y ser crítico con aquello que nos estamos contando, porque a veces puede ser verdad y nos puede estar protegiendo, pero otras veces no. En las dinámicas en las que la gente dice las cosas que son y las que no son, y muestran su forma de pensamiento, pues oigo cosas como, por ejemplo, yo soy buena compañera, o yo no sirvo para vender, o yo soy muy exigente, ¿vale? Entonces, de una simple frase como yo soy buena compañera, que además es una frase que es positivo, ¿no? Ser buen compañero es algo positivo. Sin embargo, el solo poder analizarla ya trae mucho conocimiento y mucho autoconocimiento. Por ejemplo, si tú dices soy buena compañera, eso quiere decir que a lo mejor te prestas y ayudas a tus compañeros de oficina, y que seguramente eres muy apreciada por ello, ¿no? Pero también, en mi experiencia como coach, a veces ese ser buena compañera deriva en no ser muy buena compañera contigo misma.

Es decir, si tú eres muy buena compañera, eres conocido por ello, tú misma lo dices sobre ti misma, y no le has puesto traba ninguna a ese comportamiento, claro, mi experiencia es que a lo mejor hay un desequilibrio entre el dar y el recibir. Así que vale la pena ahondar un poco más en esa creencia de yo soy buena compañera. Si tú me dices yo no sirvo para vender, pues bueno, es una frase muy grande, ¿no? Que también tiene muchas consecuencias. Recuerdo el caso de un coachee que me decía que no quería promocionar, porque promocionar estaba asociado a vender más, y él había visto cómo vendía a la gente. Bueno, tenía varios ejemplos de cómo se comportaban vendiendo, y me decía que vender era manipular, que normalmente se vende humo, que se dicen medias verdades, y bueno, es verdad que en algunos casos puede ser, ¿no? Pero imaginaos, ¿no? A través de