
El origen de la Música en la Antigüedad 2/2 - La Piqueta de la Arqueoloca | LBP 3o5w27
Descripción de El origen de la Música en la Antigüedad 2/2 - La Piqueta de la Arqueoloca | LBP 4h4y55
- Os ofrecemos la segunda entrega de la Piqueta de la Arqueoloca, de Isabel García Trócoli, que cierra el audio sobre el Origen de la Música en la Antigüedad que arrancaba hace varias semanas. 492a5r
Este contenido se genera a partir de la locución del audio por lo que puede contener errores.
Estás escuchando La Biblioteca Perdida, un podcast en de divulgación histórica hecho por y para amantes de la popella de la humanidad. Nuestro programa es semanal y está compuesto por diferentes secciones y temas. Esta que vas a escuchar es sólo una pieza más de las que componen cada entrega. Te rogamos que tengas en cuenta que originalmente se emitió en un programa estructurado de anteriores temporadas, por eso las referencias de actualidad o cuestiones como sorteos están obsoletos. Síguenos en iVoox, así como en nuestra página web www.lavibliotecaperdida.info para estar al tanto de nuestras novedades.
¡Comienza la aventura! Queridos radioescuchas de La Biblioteca Perdida, empiezo con un saludo para Supermickel y la cuadrilla de bibliotecarios en este nuevo año 2022.
Decía yo la última vez que la música está presente en todos los ámbitos de la vida de la antigüedad. Hay dioses y diosas músicos, o que inventan instrumentos, o que crean la música para comunicarse con la humanidad. Hay también sacerdotes músicos. Hoy conoceremos incluso a reyes y princesas músicos.
Había música en la guerra, en el deporte, en las celebraciones ciudadanas, en los rituales religiosos. Ya lo dice Natch, el rapero, la música es el idioma de los dioses. Pero empecemos por el principio. Seguro que conocéis uno de los descubrimientos arqueológicos más famosos de Mesopotamia, el protagonizado por Serleon Arbuley, uno de los primeros arqueólogos con todas las letras. Me refiero a las tumbas reales de Ur, excavadas a finales de los años 20 del siglo pasado. Toda la excavación en sí es interesante, pero las joyas de la corona son las liras, conservadas hoy en el Museo Británico.
Ur está a pocos kilómetros de Nasiriyah, en Irak, y es una antiquísima ciudad patrimonio de la humanidad mencionada en la Biblia. En el cementerio real, el arqueólogo inglés encontró dos magníficas y espectaculares liras, una de plata y otra de oro, esta última decorada con lapislázuli. Son los instrumentos de cuerda más antiguos que se conservan y datan del tercer milenio antes de Cristo.
La madera no se había conservado, pero sí las placas que revestían la madera, hechas de nácar y cornalina. Arbuley siguió el mismo proceso que se había realizado en Pompeya, rellenó con yeso los huecos que había dejado la madera desintegrada, de manera que las plaquitas quedaron pegadas al yeso y así las pudo desenterrar enteras.
La caja de resonancia de la lira de oro tiene forma de toro, la cabeza es impresionante, de oro con ojos y barba de lapislázuli. En los relieves mesopotámicos vemos en varias ocasiones liras en forma de toro. ¿Por qué siempre el toro? Si lo recordáis, en la anterior entrega hablábamos del tambor lilisu, cuya membrana estaba hecha con una piel de toro.
Pues parece que el toro era el animal relacionado con el dios de las tormentas, Adat, y los mesopotámicos asimilaban el sonido de la lira con el sonido de las gotas de agua de la lluvia. ¿A qué sería chulo oírla sonar? Bueno, pues a lo mejor podemos hacerlo. Un súper descubrimiento, la verdad, pero con una parte oscura.
Junto con las liras aparecieron muertas las personas que las tocaban. Hasta casi 200 sirvientes acompañaron a la tumba a los reyes allí enterrados. Soldados, criadas, sirvientas y músicos, y músicas, finamente vestidas y dispuestas ordenadamente en hileras. Otro gobernante famoso, Gudea, informaba en un texto que
Comentarios de El origen de la Música en la Antigüedad 2/2 - La Piqueta de la Arqueoloca | LBP 6t6d35