El Gato al Agua | 23/05/25 35b3v

Muy buenas noches señoras, caballeros, bienvenidos al gato al agua. La Unión Europea, la Comisión Europea aprobaba ayer una derrama masiva, bueno derrama no porque es aspiración, de 150.000 millones de euros para armarse frente a la amenaza rusa y bielorrusa. Viene usted a Bielorrusia y verá que amenaza es, ¿verdad? ¿Por qué? Lo que sí que sabemos es a quién ver ese dinero, porque fundamentalmente van a ser industrias británicas, ucranianas y turcas, de momento, y las europeas las controladas por los fondos que ya conocemos, que son norteamericanos, bueno, son transnacionales.

Eso es la gran decisión que han tomado las naciones de la Unión Europea o al menos la Comisión, porque las naciones ciertamente ya no existen, en una situación en la que todo se está yendo a hacer puñetas en Europa y no se les ocurre otra cosa. ¿Se acuerda usted, usted que nos sigue, del plan Draghi famoso, cuando aparece Mario Draghi, saca un plan diciendo que reducción de la burocracia...

Nada, un paripé. Al final lo que van a hacer es lo típico, es decir, venga a aspirar dinero público, o sea, dinero de usted, para gastárselo en algo que permita poner en marcha una maquinaria que ya veremos dónde conduce, porque la maquinaria bélica no es inocua. Todo eso ocurría mientras, al mismo tiempo, el Parlamento Europeo decidía no investigar a Ursula von der Fayser por la cacicada de las vacunas. Digo cacicada por quedarme moderado.

Gracias a quién, al PP y al PSOE, como siempre. Y al PSOE y al PP. PSOE y PP a escala europea, más o menos. El consenso. Uno de los mayores escándalos de corrupción económicamente, cuantitativamente, de la historia de Europa, va a quedar sin investigar por el consenso social conservador, valga el término, en la Unión Europea. Y mientras tanto sigue adelante toda la política de lobbies que ya conocemos. ¿España será verde o no será? Dice el gobierno con esta cosa. Descubren una fórmula, como no habían leído nada nunca, pues de repente leen esto y dicen, a ver qué cosa más brillante.

Mal robo. Bueno, ¿para qué vamos a entrar? Y lo repiten. ¿España será verde o no será? Mientras se arrancan miles y miles y miles de hectáreas de olivos para poder planchar solares. ¿Verde? Qué cara más dura. Bueno, y en esto están de acuerdo todos los fundamentales. En esto y en dar por válidas unas elecciones rumanas que apestan, en fin, desde Rosario, Argentina. Y en secar a cualquier fuerza alternativa al consenso de Bruselas. Esta es la situación. No le digo esto para que usted ahora desconecte y diga, pues me voy a beber o algo para olvidar. No, pero uno tiene que ser consciente de contra qué se está enfrentando.

Yo entiendo que es mucho más fácil pensar que la culpa es de Sánchez y Ayuso nos redimirá, pero la realidad no es esa. Estamos ante una estructura de poder que conviene identificar para entender la gravedad de la amenaza y la urgencia de levantarse. La urgencia de levantarse porque no hay otra opción.

No hace falta que nos levantemos de forma, cómo decir, agresiva. No, no necesariamente. Todo dependerá de lo que ellos tiren la cuerda, ¿no? No, pero hay que ser consciente y hay que protestar y hay que elevar la voz y hay que recordar a esa gente que ahora manda en Europa que esta tierra, la tierra europea, es la que vio nacer el concepto de ciudadanía.

Y a lo mejor empezar a recordar el juramento de los jóvenes de Atenas. Y eso lo dejamos para la semana que viene. ¿Y qué decía el juramento de los jóvenes de Atenas? Esto ya le digo, lo dejamos para la semana que viene porque me parece que es la primera declaración de deberes de la historia de Europa. Digo de deberes, no de derechos. Está francamente bien. O sea, ser ciudadano te obliga a ciertas cosas.

Y eso era precisamente aquel juramento que, por otra parte, es precioso. Bueno, le cuento, si escucha usted a lo largo del programa como un chirrido o así, no es porque súbitamente los coleópteros se hayan adueñado del estudio, sino por las sillas que tenemos. Estamos intentando cambiarlas y ya veremos si le podemos pedir un crédito a Putin o a quien sea.

Y mientras tanto, eso sí, nosotros aquí en la barra de la cantidad. El menú. Bueno, la OMS lo vuelve a hacer. Una vacuna para gobernarnos a todos. Tratado mundial de pandemias. Pero, pero, pero esta vez, esta vez hay algo que falla. Y eso que falla fundamentalmente son los Estados Unidos, que ya han dicho que van a fallar.