El Gato al Agua | 13/05/25 513f58

Muy buenas noches, señoras, caballeros, bienvenidos al Gato al Agua.

Tenemos dicho, usted me perdonará, pero es que tenemos dicho que el proceso de ocupación del poder por parte del socialismo, con Pedro Sánchez, se parece mucho, mutatis mutandis, ¿verdad?, al esquema venezolano, que ha sido muy interesante desde el punto de vista de la teoría política, porque no ha consistido en apoderarse del poder mediante un putsch, mediante un golpe, mediante una revolución, mediante un cambio, no, sino de progresivamente ir ocupando los tres poderes para hacerlos cada vez más uno solo, aunque sigan pareciendo formalmente tres, ejecutivo, legislativo y judicial. Bueno, en ese proceso hoy el gobierno ha dado un paso importantísimo con la reforma legal propuesta, la reforma del sistema judicial presentada por el señor Bolaños. ¿Por qué es importante? Vamos a ver.

En principio, la idea de que las causas las instruyan los fiscales en lugar del juez podría tener sentido, más en un programa judicial como el español tan colapsado. En principio, la idea de que el fiscal general del estado sea elegido por cinco años para que no coincida con las legislaturas de gobierno y que se mantenga en su puesto y no pueda ser cesado por falta de confianza podría estar muy bien, favorecería la independencia de la justicia. En principio, en principio, en principio, así como en principio la apertura tanto de la carrera fiscal como de la judicatura a otras personas.

El problema es que quien lo propone es este gobierno, el problema es que quien lo propone es un gobierno que ha utilizado expresamente a la Fiscalía General del Estado como abogada defensora del círculo personal familiar y político de un presidente del gobierno acusados de corrupción o en incursos en causas de corrupción. El problema es que esto lo propone un gobierno cuyo fiscal general del estado que está acusado de revelación de secretos, que es una salvajada. El problema es que esto lo propone un gobierno que ha demostrado fehacientemente que quiere destrozar la independencia de la justicia.

Ahora se acuerda uno de aquella famosa firma de Borallos y González Pons con Reinders en cuerpo presente antes de que se dedicara, o no, ya se había dedicado a hacer los chanchullos aquellos con las loterías y tal, ¿verdad? Cuando el PP tragó con el asunto de la reforma del Poder Judicial del Partido Socialista. Ahora se acuerda uno y constata que al final, quiera o no quiera, siempre hay una mano del PPE dispuesta a firmar el camino, el camino para que el PSOE haga las mayores salvajadas como esta que seguramente viene ahora al horizonte. Hoy hablaremos de eso. En todo caso aquí lo que queremos subrayar es lo fundamental. Tenemos un gobierno que es un enemigo directo de las libertades y de los derechos de los ciudadanos, de todos los ciudadanos y por supuesto de la separación de poderes.

¿Y con eso qué hacemos? ¿Otra manifestación en Colón o un conclave del PP? 21.48, 20.48 en las Islas Canarias y nosotros vamos a repasar la actualidad de un día cargado de titulares y de cosas que a ver si conseguimos ordenar qué es de lo que serán los titulares.

Bueno, hay que ir al asunto de los mensajitos, siguen apareciendo los mensajes de Sánchez y Ábalos, hoy con un nuevo personaje, La Pájara. ¿Quién es La Pájara? La Pájara es Margarita Robles, así la definían. Era una pájara y luego está el estulto, el estulto que es Pablo Iglesias, que dice que los hijos de los maldades estulticia, dice Pedro Sánchez.

Viste que hay ciertas dudas sobre la realidad precisa de estos mensajes porque están escritos de una forma tan acabada que no parece normal en una conversación por WhatsApp, pero bueno, vaya usted a saber. Como ya sabe, dijo Ábalos que esto lo guardaba porque quería escribir sus memorias, o sea que hay lo que saldrá ahí.

El tema judicial es más importante, sin ninguna duda, la nueva maniobra del gobierno para controlar la justicia por la persona del fiscal general del Estado o más exactamente por la institución de la Fiscalía General del Estado, tiene toda la pinta de ser un golpe, no sé si definitivo, pero en fin, a la independencia judicial.