¡Detente, instante, eres tan bello! (Nómadas 36) 2g2l4y

En la historia de la literatura, entre los grandes libros, hay ciertos relatos que van más allá de lo literario, de la fantasía que un autor u otro han querido imaginar.

Hay personajes literarios que trascienden a la obra dramática o a la novela para convertirse en símbolos, en arquetipos. Podemos pensar en Don Quijote, en Hamlet, en Madame Bovary o en tantos otros. Son personajes que conectan con algo profundo dentro de nosotros mismos y que incluso se proyectan como símbolos de una cultura, de un país o de una parte de la humanidad. Fausto es mucho más que el personaje de una obra famosa. Su leyenda se extiende a diversas creaciones literarias y también a terrenos como la música o la pintura. Fausto es un símbolo que nos lleva a reflexiones sobre temas que son contemporáneos.

Hay quien dice que vivimos en un mundo fáustico, en una civilización fáustica. Y al parecer también hubo un Fausto real, un doctor Fausto de carne y hueso. Si me acompañas conoceremos no sólo el mito de Fausto, sino a algunos autores que se sintieron fascinados por él.

Autores todos ellos atraídos por el brillo magnético de esa antigua historia contada una y otra vez. El doctor Fausto, el demonio Mephistófeles, la desdichada Margarita y todos aquellos que se dejaron seducir por este relato y por las implicaciones de todo lo fáustico son el tema de este episodio. Un episodio que se titula Detente instante Eres tan bello. Esto es Nómadas y yo soy Octavio Deniz. La versión canónica, aunque no la primera del mito de Fausto, se encuentra sin duda en la obra de Johann Wolfgang von Goethe.

Goethe es un personaje tan grande que resulta casi imposible abarcarlo con palabras. Como sabemos es el autor más grande en lengua alemana, pero también hay que decir que además de escritor fue un hombre interesado en la filosofía y un gran conocedor de las ciencias naturales. Creó una teoría del color y su interés por la anatomía lo llevó a describir un hueso de la mandíbula humana, un hueso desconocido hasta entonces. En el terreno del arte se puede decir que fue por sí mismo el iniciador del movimiento romántico. Goethe sintió un amor temible.