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El secreto de Vega
El contrato

El contrato 68z5n

21/3/2025 · 17:50
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El secreto de Vega

Descripción de El contrato 3l1e5r

Vega recibe una llamada, en este último episodio debe decidir si desea convertirse en la esclava de su Amo desconocido 451oi

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Este contenido se genera a partir de la locución del audio por lo que puede contener errores.

La quietud de la noche, esa suave rutina que me envolvía al caer el sol, se hizo añicos ante la vibración insistente de mi móvil.

Un mensaje, el nombre de secreto iluminándose en la pantalla.

Una promesa y una amenaza contenidas en esas siete letras.

La anticipación danzó con una punzada de inquietud bajo mi pecho, una extraña coreografía de emociones encontradas mientras deslizaba el dedo para desbloquear el aparato.

El mensaje era, como siempre, lacónico, directo, sin concesiones a la retórica, de, secreto, para, vega, mensaje, buzón, una sola palabra, muda pero cargada de significado.

¿Buzón? ¿Qué podía querer decir? ¿Otra de sus órdenes envueltas en enigma? ¿Un nuevo desafío acechando tras esa simple instrucción? La incertidumbre me mantuvo en suspenso durante unos segundos, una respiración contenida hasta que una idea, tenue al principio, comenzó a tomar forma en mi mente, iluminando la oscuridad de la duda.

¿El buzón de correo? ¿No el virtual, la bandeja de entrada digital, sino el metálico, el de mi propia casa, anclado junto a la puerta? ¿Qué clase de mensaje físico, tangible, podría guardarme allí, enviado por secreto desde las sombras? La curiosidad, más voraz que la cautela, me asaltó de inmediato. Abandoné el móvil sobre la mesa de noche, dejando atrás la tenue luz de la pantalla, y me incorporé con rapidez, un resorte impulsándome fuera de la cama.

Salí de la calidez del salón, mis pies descalzos deslizándose silenciosamente por el suelo de madera, dirigiéndome hacia la puerta de entrada del apartamento. El pasillo bajó la luz tenue del sensor de movimiento, se sentía inexplicablemente más largo de lo habitual, la anticipación acelerando el ritmo de mis pasos, el pulso resonando con fuerza en mis sienes.

Finalmente, llegué al buzón, adherido a la pared como un observador silencioso junto a la puerta principal. Introduje la llave en la cerradura fría, sentí el giro metálico al girarla con un clic seco, y abrí la pequeña puerta rectangular que ocultaba su contenido.

Dentro, revueltos entre la habitual publicidad sin destino y alguna factura olvidada que yacía como un fósil de la rutina, destacaba un sobre. No era un sobre cualquiera, este era diferente. De papel grueso y color hueso, evocando la elegancia sobria de lo antiguo, sellado con un llamativo lacre oscuro que lo cerraba herméticamente y sin remitente visible, sin pista alguna de su origen misterioso. En el anverso, simplemente mi nombre, Vega, trazado con una caligrafía elegante y desconocida, de trazos finos y precisos. Mi nombre, nada más.

Pero sabía, con una certeza que helaba y excitaba y a partes iguales, que ese misterioso objeto depositado en mi buzón no era una misiva ordinaria, que contenía algo importante, algo trascendental para nuestra incipiente... relación. ¿Podía siquiera llamarse así lo que existía entre secreto y yo? Extraje el sobre del buzón con dedos que temblaban ligeramente, la textura rugosa del papel áspero bajo mis yemas, el sello de lacre frío y duro como una promesa sellada.

Lo sostuve entre mis manos durante unos instantes, examinándolo con una atención casi reverente, observando cada detalle, cada sombra, sintiendo la intriga y la creciente excitación que palpitaban bajo la piel, extendiéndose como un fuego lento desde el vientre hasta la garganta. Respiré hondo, conteniendo el impulso de abrirlo allí mismo, en la penumbra del pasillo. Regresé al interior del apartamento, cerrando la puerta atrás de mí con un suave clic que resonó en el silencio expectante, llevando conmigo este objeto...

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