La clave para atraer dinero, ser libre y vivir sin preocupaciones financieras | Carlotta Sabina 3ow4z

Llegué a un punto de inflexión en mi vida que me pregunté a mí misma si esto era lo
que me iba a esperar por el resto de mi vida.
Sentía que quería ganar más dinero y mi padre me había enseñado y mi madre que si
quería ganar más dinero tenía que trabajar más horas, más duro, pero al final me di
cuenta que trabajando día y noche pues ganaba más dinero pero no tenía tiempo.
Y yo me dije a mí misma, es que yo no quiero esto, yo no he venido a esta vida para ser
una esclava del sistema, así como vive el 95% de la población, dije yo esto no quiero,
quiero algo diferente pero que tampoco se haya que hacer.
Lo vendí todo para poder invertir en mi conocimiento, educarme a mí misma, cambiar
mi mentalidad porque me di cuenta de que si yo quería tener un resultado distinto tenía
que yo convertirme en una persona totalmente diferente.
Me enseñó habilidades que a día de hoy si no fuera por esas habilidades seguramente
no estaría aquí en este podcast, que fueron las habilidades súper importantes que hay
que aprender.
Carlota Sabina, bienvenida a Vida Magna.
Muchísimas gracias por la invitación.
Gracias a ti por estar aquí.
Para mí, Carlota, yo te conocí sobre todo por tu libro de Camarera Millonaria y también
porque enseñas algo que espero que hoy lo expliquemos porque yo no tengo ni idea, que
es la automatización de YouTube, pero parece que es algo muy bueno y que te hace, además,
poder transmitir a muchas personas este camino de la abundancia, de la libertad financiera.
Porque además lo enseña desde ese lugar que hablamos mucho en Vida Magna, de la conciencia
también, que es importante.
De un camino que creo que ahora es el deseo, sobre todo de muchas personas jóvenes como
tú.
Así que yo empezaría por, ¿cómo es esta historia, Carlota, de camarera a millonaria
con 26 años?
Bueno, ahora tienes 27.
Y acerca de los 30.
Pues a ver, es una historia larga, pero voy a intentar resumirla.
Yo vengo de una familia normal, de una familia humilde, mi madre pues todavía trabajando,
mi padre también, él por su parte ha sido emprendedor.
Y con 16 años dejé los estudios porque sentía que para mí pues no era mi camino,
yo sentía que al final estudiar no era lo mío y me di cuenta que al final pues yo quería
ganar dinero.
Con lo que le dije a mi madre, oye mamá yo quiero ganar dinero, la respuesta de mi madre
fue pues ponte a trabajar.
Y encontré mi primer trabajo de camarera en una pizzería, donde en mi primer trabajo
trabajaba como 10-11 horas al día, porque en Málaga, en la Costa del Sol, trabajando
de camarera te dicen que terminas a las 9 y aquí todos sabemos que es mentira.
Acabas a las 2 de la mañana.
En Málaga y yo creo que en toda España también.
Sobre todo en temporada, ¿no?
Sí.
Trabajaba muchas horas y bueno, en esa época pues cobraba 900 euros al mes, pero yo con
16 años cobrando 900 euros al mes pues era la reina.
Yo me acuerdo que entraba Zara, entraba cualquier tienda de ropa y me sentía ahí la reina de
la tienda.
Y digo, va, me puedo comprar un montón de cosas.
Claro, no tenías otros gastos tampoco.
Claro, lidiar con mi madre para mí pues era mucho dinero en aquel entonces, con lo cual
yo estaba súper contenta.
Después de trabajar de ahí, me moví a un restaurante donde ya no era de pizzería,
era de pescado, salía oliendo a pescado frito y ahí estuve también como un año y pico
más o menos.
Y luego pues acabé trabajando en un montón de sitios y así me tiré durante 6 años
trabajando en la hostelería de mañana, poniendo desayunos, comida, después cenas también.
Y también acabé trabajando de noche en un bar, o en una discoteca mejor dicho, poniendo
copas.
Porque al final pues por el día trabajaba y sentía que quería ganar más dinero.
Y mi padre me había enseñado, mi madre, que si quería ganar más dinero tenía que trabajar
más horas, más duro.
Y eso hice.
Pero al final me di cuenta que trabajando día y noche pues ganaba más dinero pero
no tenía tiempo.
Y ahí empecé a darme cuenta un poco de que no tenía libertad.
Decía, a ver...
Algo falla.
Sí, algo falla.
Yo quiero ir a ver a mis amigas, quiero ir a un cumpleaños y no puedo.
Mi padre vive en Italia, que de hecho vengo de Italia ahora, y si yo quería ir a ver a
mi padre pues la semana que viene no puedo porque estoy bajo las órdenes de alguien
más.
Y después de seis años llegó un punto de inflexión en mi vida que me pregunté a mí
misma si esto era lo que me iba a esperar por el resto de mi vida.
Yo veía a mi madre con 40, 50 años, 50 y pico que tiene ahora, que estaba trabajando
en el mismo empleo, llevaba toda su vida trabajando y siempre cobrando el mismo sueldo.
Entonces yo empecé a preguntarme a mí misma si eso era lo que yo quería para mi vida.
Yo en aquel entonces me juntaba con un grupo de amigas que veían que a los 16, 17, 18
tenían hijos, pero es que los hijos los cuidaba la madre porque ya no tenían dinero y todo
esto que ya sabemos que existe hoy en día.
Y yo me dije a mí misma, es que yo no quiero esto.
O sea, yo siento que yo no he venido a esta vida para ser una esclava del sistema, para
luego tener hijos, comprarme una casa con la hipoteca, endeudarme, luego al final que
mi madre me tenga que ayudar.
Y bueno, así como vive el 95% de la población dije yo esto no quiero.
Quiero algo diferente pero tampoco sabía qué hacer.
Y bueno, al final, pues yo siempre digo que cuando empiezas a...
No sabía lo que quería en mi vida pero sí sabía que quería algo más.
Yo sé que no quería nada más.