EL CAFELITO DE JOSEP PEDREROL #15 | MONTSE TOMÉ | PODCAST COMPLETO 3n6k12

Monse, tome un poco de café y te pongo. Si me cae siempre todo, es fatal esto.

Bienvenido al cafelito, Monse, bienvenida. Muchas gracias. Campeona del mundo, se dice rápido.

¿Lo has asimilado ya? No sé, lo hemos celebrado un poco, que sí, a ver, ha habido mucho trabajo en ese éxito. Yo soy de, bueno, esto se consigue y ya a otra cosa. ¿Sí? Sí. O sea, no, no, te cuesta, siempre que consigues algo no tienes tiempo a celebrarlo, estás pensando en el siguiente reto.

Así es. ¿Siempre has sido así? Sí, y sobre todo porque siempre he sido alguien que trabaja mucho para preparar X cosa y cuando lo logras es como un vacío, necesitas esa paz, pero ya estás buscando nuevos retos. Y bueno, después de aquel éxito pues necesitaba descansar mucho y ya empezar a pensar en lo siguiente. ¿Qué es descansar? ¿Para ti qué es descansar? Pues esto es una buena pregunta. ¿Sabes descansar? No mucho.

No mucho, no mucho. O bueno, descanso a mi manera, yo creo que cada uno busca un poco eso. Para mí descansar es tener tiempo para hacer deporte, tener tiempo para desconectar del fútbol que me cuesta, es verdad que me cuesta desconectar, tener tiempo con la familia, poder ir a Asturias. Asturias es un paraíso, es donde nací, amo esa tierra y solo estar ahí ya me da una energía súper buena. Y bueno, cuando jugaba el fútbol descansar era poder hacer otros deportes.

Ahora siendo entrenadora, seleccionadora, descansar es ver el fútbol de otra manera, disfrutarlo, que a veces me cuesta verlo sin ese análisis de oye, ¿esto qué está pasando aquí o allí? Pero bien, lo que te he comentado, poder hacer deporte y estar con la familia. ¿Eras buena en otros deportes también o el fútbol es lo que mejor hacías? Era una niña muy inquieta, súper inquieta. Cuando empecé con el fútbol, yo con cuatro años ya vi el balón y dije esto me encanta y empecé a correr detrás de él. Pero como en aquella época no podíamos jugar con niños, hice otros deportes y me permitieron hacer karate. Hice karate hasta tener cinturón marrón. Hice también natación. Me gustaban todos los deportes. Balón, mano, le daba un poco a todo.

Todo lo que era moverse, a mí me gustaba. ¿Qué queda de aquella niña que soñaba con ser futbolista? Pues queda el amor a lo que hago. A veces dices la responsabilidad de estar donde estás, pero siempre trato de llevar esa parte al disfrute, al no sé lo que haces. Te gusta, disfrutas, has nacido para el fútbol y compartirlo con la gente que te quiere, que te adora y darles la alegría. Eso es un poco lo que queda. ¿Cómo era jugar con niños siendo la única niña en aquellos momentos? ¿Con qué edad? ¿Con 10, 12 años? Incluso menos, con 7 años. Y cuando estaba mal visto que una niña jugara al fútbol. Bueno, yo lo he vivido y soy más mayor que tú.

Y me acuerdo mucho porque cuando salíamos del colegio en Proa y en Barcelona, nos íbamos a La Farga, que era un lugar donde había un campo de fútbol. Me acuerdo de Ramey, se llamaba Ramey Remedios, la que quería jugar con nosotros. Y el portero de aquellas instalaciones, cuando estaba, de vez en cuando desaparecía o no estaba, cuando aparecía decía que ya no podía jugar al fútbol. Y me acuerdo aquellas charlas, aquellas reuniones, tenemos que conseguirlo para que ella pueda jugar. Y me da cosa pensarlo. Pienso en ti. Pues mira, yo he tenido suerte y siempre he pensado que soy alguien con suerte. Porque me he rodeado de un grupo de niños que siempre me ha aceptado.

Y me ha hecho crecer con esa armonía, con ese cariño. Monse era la que hacía los equipos.

¿Era seleccionadora? Soy de un pueblo de Pola de Siero, donde también es Javi Fuego, que ahora es jugador. Y compartíamos.

Y muchas veces, si eras quien es, decidía cómo jugaban. He tenido esa suerte. No te voy a decir que no he tenido algún niño que se enfadaba porque hacía algún regate.