Los Borjas y la Mari; unos pícaros de cuidado. 1f274v

Sí qué si se encuentra con el estado de ánimo anormalmente deprimido ya se va alargando durante bastante tiempo si tienes sensaciones o no se reconoce a usted mismo como que la vida le pesa y esto se prolonga durante el tiempo procure acudir procure acudir a sus profesionales de salud mental de referencia psiquiatras cinco farmacólogos psicólogos clínicos bien acreditados y si no está a gusto con los profesionales que le están tratando no tenga dudas cambie eso se lo recomendé se lo recomendaría incluso en la relación terapéutica conmigo bienvenidos a cuadernos de lógica un espacio para la reflexión sobre el comportamiento humano que no una terapia ni ningún contenido de ningún tipo de autoayuda si le sienta bien intentar estimular un poco el sentido crítico tener algo de información intentar estimular un poco el sentido común cosa que también intentamos en el programa esto pretendo que sea un contenido intelectualmente nutritivo moralmente combativo y un contenido donde no vamos a bajar el nivel vamos a mantener un nivel razonable y hay que subir un poco el nivel para ajustarse a este programa vale tienen niveles mucho mucho mucho mucho mucho más bajos de cuidan a los contenidos de autoayuda ya se desvía advirtiendo que se harán mucho daño lo que supone poco esfuerzo no suele dar grandes resultados fueron josé luis torres especialista en psicología clínica veinticinco años en la profesión treinta mil horas de experiencia profesional acreditada y esta es mi particular percepción de la realidad desde me voy trazando opiniones mejor o peor fundamentadas pero siempre relativas como saben que me gusta mucho la música les voy a entregar un pedazo de tema y después arrancamos vámonos sí al día siguiente ya tenía comprada la cartilla y habían hablado con el maestro fui señora a la escuela me recibió muy alegre diciendo que tenía cara de hombre agudo y de buen entendimiento yo por no desmentir le dimos bien la lección aquella mañana el maestro me sentaba a su lado ganaba la palmatoria casi todos los días por llegar el primero y me iba el último por hacer algunos recados a la señora que así llamábamos a la mujer del maestro respecto a la palmatoria palmatoria el primero en llegar a la clase tenía el privilegio de guardar la palmatoria o palmeta y emplearla para los castigos físicos que el maestro imponía a los malos alumnos es la palmatoria con semejantes caricias a todos me los tenía ganados me favorecían demasiado y por esto creció la envidia los demás niños me acercaba sobre todo a los hijos de caballeros y personas principales y particulares