LOS ÁNGELES DEL HOGAR 96q3b

Bueno, vamos a esperar a ver qué viene. La meditación es un estado natural, es una disposición, podemos seguir el ritmo de la música como si fuéramos un bambú que está oscilando y tenemos estos sonidos que nos pueden ayudar a coger un ritmo y es muy importante. Esa no rigidez acostumbrada vuestra. Soy el viento. Moveros desde la raíz, desde el coxis, toda la columna. No os apoyéis los rinados. Tal cual, el coxis es lo único que apoya y alguien os está tirando por la cabeza. Hacia arriba. Hacia arriba. Una bola de navidad colgada.

Alguien os tira de la cabeza. Sentir esa columna que se va despejando como si fuera una persiana y entre vértebra y vértebra pasa la luz. La luz penetra entre cada vértebra porque alguien nos está tirando hacia arriba. Vuestro guía y estáis flotando. Sentir la ligereza. Esa ligereza debería ser la del cada día vuestro. En vuestra cotidianidad de trabajo, las caseras, con esa ligereza, con ese no peso, ese alguien que tira de vuestra cabeza. Es un hilo de luz. Estáis colgando y flotando. Las vértebras respiran, cimbrear, soltar.

Soy un bambú que no pesa nada y el viento lo mece. Aquí están nuestros maestros, nuestros ayudantes en la tierra. Hoy se presentan los veintiocho primeros arquetipos que hace años que conocemos y quieren formar parte de vuestra vida, de vuestro trabajo y de vuestro servicio. Se ponen al servicio de vosotros. Hacer un servicio a la humanidad. Donde podáis y como podáis. Con su realidad, su staff de gente, su capacidad de servir. Estos entes, estos veintiocho entes que hoy se presentan para uniros, para secundaros en vosotros.