#273 | "Imponer sanciones a Rusia es declarar una guerra absurda que perjudica a Europa" ENTREVISTA EN NOGOCIOS TV 1i572x

Pues vamos con nuestra entrevista del día en negocios televisión en este cierre de Wall Street cuando son las 8 y 23 minutos hora central europea.

Recibimos a Anxo Bastos, economista. Bienvenido, gracias por acompañarnos.

Gracias a vosotros por la habilidad. Anxo, contexto donde muchos países están aprovechando fechas como el día de hoy, este día de la victoria, para reforzar pues un cierto nacionalismo económico, ¿cómo valora el uso simbólico del proteccionismo en un contexto como el actual, como parte del discurso conmemorativo que estamos viendo? Es que nos sorprendió, ¿no? Buena parte de los conflictos bélicos en su momento tienen que ver con ese tipo de nacionalismo económico.

Nacionalismo económico que en mi entender es equivocado, porque la nación es una entidad política, pero no es una entidad económica, o sea, no tiene lógica económica, no tiene una lógica de escala adecuada a diseñar un sistema económico de acuerdo con ella. Porque hay estados de dos millones de habitantes y hay estados de cientos de millones de habitantes. Ambos son estados, ambos pueden tener una lógica económica, ambos pueden tener un nacionalismo económico, pero es absurdo usar ese referente político como una forma, digamos, de protección.

Y bueno, no parece que nos aprende mucho al respecto.

¿Cree que las guerras comerciales y los aranceles actuales son una continuación del nacionalismo del siglo XX por medios económicos? No son del siglo XX, son errores mercantilistas que siguen viviendo y no sé cómo viven y perduran a través del tiempo. Debe ser una especie de pauta repetida que nunca se logra cambiar, ¿no? La idea de que hay que exportar mucho, importar poco, que hay que empobrecer al vecino, que tenemos que estar como en conflicto comercial siempre unos con otros y centrarse solo en la balanza comercial y no en las demás balanzas.

Las balanzas de un país siempre tienen que estar equilibradas, porque solo pensamos en la balanza de mercancías y la balanza de servicios. Nosotros podemos importar muchos automóviles o lavadoras de otros países, pero lo contrarrestan viniendo millones de turistas aquí que no van millones de turistas allá.

Después hay balanzas de capital, hay inversiones, sea en empresas de aquí o que crean fábricas aquí de otros países o simplemente que invierten en deuda pública de aquí. Al final tiene que estar equilibrado, no puede haber… Pero si centrarse en una balanza es absurdo, porque nosotros muchas veces vendemos servicios, no vendemos bienes.

Y nosotros y muchos otros países, pero hay esa fijación con la industria nacional, con los otros nacionales, con algunos sectores concretos, no con todos. Parece que hay sectores más importantes o más relevantes para lo que es la nación que otros, cosa que tampoco es fácil de determinar. Pero seguimos, seguimos, seguimos con el mercantilismo, no muere nunca.

Ese mercantilismo, hablabas de que los países están empeñados en exportar mucho e importar poco y en que no haya equilibrio. Al final ese desequilibrio provoca una desestructuración del libre comercio, del libre mercado. Claro, el libre comercio siempre tiene que estar equilibrado.

Usted no puede importar más de lo que exporta, le estarían regalando cosas, no se da cuenta.

O sea, usted importa cosas, importa bienes, pero acaba intentando quedar algo a cambio o le regalan las cosas. Lo que pasa es que hay unas que son más visibles, como son industriales, afectan a trabajadores visibles, y otras que son más etéreas. Cuando venden títulos de deuda al extranjero, que al final acaban financiando, bueno, otra cosa es que financen bien, no acaban financiando servicios o bienes públicos aquí, pues está haciendo una aportación.

Cuando le invierten desde fuera, es así. Cuando vienen turistas o vienen personas de visita no le están aportando recursos aquí. Me parece que eso no se mide en la balanza. Solo se miden cosas duras, ¿no? Automóviles, acero, hormigón, cosas de ese estilo. Pero la economía moderna son economías de servicios, no son economías estrictamente industriales. Entonces, seguimos con eso. Claro que se estructura todo, se estructura el biocomercio, porque nos fijamos solo en unas cosas.

Es más, por ejemplo, estamos viendo con Trump, Trump se centra sobre todo en los trabajadores del cinturón del óxido, que son fabricantes de automóviles o antes fabricaban aluminio, ahora fabricaban acero y instrumentos duros. Pero no piensen que otros hay. Otros americanos, por ejemplo, necesitan acero para hacer latas o para hacer otro tipo de productos, y poner lanceres a lo de fuera encanece su propia producción.

Claro que se estructura el comercio, pero parece que hay sectores que son más visibles que otros. Fíjese que Trump, cuando hace su puesta en escena, lleva mineros o lleva trabajadores de esos sectores. No lleva, por ejemplo, un productor de productos audiovisuales o un programador informático, que son bienes menos etéreos, pero también dan rendimiento.

Anxo, hoy hemos asistido, hemos...