Tiempo de Ley 31/03/2025 10694e

Tiempo de Ley. Producido por Oír y Ver, presenta y dirige Jorge F.

Aporcentaje.com es el despacho de abogados para grandes reclamaciones en toda España.

Para reclamar perjuicios por accidentes y negligencias médicas.

Para reclamar seguros de vida e incapacidad.

Para grandes reclamaciones patrimoniales, empresariales y por responsabilidad civil.

Ya lo sabes, para grandes reclamaciones en toda España, Aporcentaje.com.

Consultanos sin compromiso en Aporcentaje.com o llámanos al 911-196-314.

Nuevo giro de guión en el caso Dani Alves.

Esta semana hemos tenido conocimiento que el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña ha decidido revocar la sentencia dictada en primera instancia por la Audiencia Provincial.

Y se preguntarán ¿Por qué? ¿Por qué se revoca una sentencia condenatoria? Y los factores son múltiples.

En primer lugar, no es que exista un nuevo juicio, como ya se ha escuchado más de una tertulia, sino que en base a los hechos probados dictados por la Audiencia Provincial en la primera sentencia, el Tribunal Superior de Justicia decide que el razonamiento lógico que lleva dentro de esos hechos probados es distinto y que por lo tanto concluye con la absolución.

En segundo lugar, parte de los estándares de credibilidad y de fiabilidad que debe tener una víctima para poder ser prueba básica y fundamental de cargo para condenar a un acusado.

En este caso, el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña decide y concluye que si la persona mintió o más bien ocultó o faltó a la verdad en el antes y en el después, tampoco tiene por qué ser cierto del todo el durante.

No está diciendo que no se la crea o que esté mintiendo, de lo contrario, hubieran abierto un procedimiento por falso testimonio, sino que lo que se concluye es que los estándares de credibilidad y de fiabilidad de la víctima, teniendo en cuenta que había pruebas y no solo las cámaras que no se compadecían con su relato, no concluyen en este caso.

Por lo tanto, y al final, en una aplicación de la presunción de inocencia, deciden aplicar toda esta prueba practicada en favor del acusado, en este caso, Dani Alves.

Como en 12 hombres sin piedad, película en la que es un paradigma de la dificultad sobre decidir entre el veredicto de culpabilidad e inocencia dentro de un proceso penal, el caso de Dani Alves seguramente no ha sido fácil.

No se está diciendo que la víctima haya mentido, incluso Dani Alves puede ser culpable.

Las cuestiones y respetamos las reglas del juego del proceso penal.

Seguimos en tiempo de ley y hoy estamos con el magistrado Rafael Estevez Benito.

Es el titular del penal 1 de Cáceres, es el juez decano de Cáceres y autor de artículos que no dejan realmente indiferente a nadie.

Su voz es una de las que está replanteando cómo vemos la justicia en España.

Hoy nos sentamos con él para hablar de la carrera judicial, de los desafíos del sistema, de la corresponsabilidad social y también un poco de su lado más personal. Muy buenas tardes, Rafael.

Jorge, buenas tardes. Encantado de estar con vosotros.

Bienvenido a tiempo de ley. Empezamos por cómo se inició todo esto de ser juez.

¿Cómo fue? ¿Por qué te vino, Rafael? Mira, Jorge, cada uno tiene una historia personal que cree que es la más importante del mundo.

Yo tengo una historia personal que no sé si es la más importante del mundo, pero sí curiosa.

Mi vocación para ser juez fue muy tardía. En principio, mi aspiración era dedicarme al mundo de la arquitectura.

De hecho, cuando estudié el COU antiguo, porque ya tengo años y estudié el COU, tenía las asignaturas de matemática, física, química, dibujo técnico y mi idea era ser arquitecto.

Pero, ¿qué sucede? Que yo no estaba llamado por el mundo del dibujo artístico, que es una de las asignaturas importantes, sobre todo al principio de arquitectura, y me di cuenta que, como yo a la hora de dibujar un perro dibujaba un coche, mis derroteros me di cuenta que no iban por ahí.

Empecé la carrera de Ingeniería de Caminos, que me dijeron los técnicos que era la que más se parecía a arquitectura.

A mí no me gusta conducir, aunque conduzco y me iba a dedicar toda la vida a hacer carreteras, y al final opté por hacer Derecho. No porque fuese un mal menor, porque siempre me había gustado, pero un poco desde fuera. Y la verdad es que cuando me matriculé en Derecho y empecé la carrera, me di cuenta de que esa era mi verdadera vocación, que era una rama del conocimiento apasionante, y luego lo de ser juez me vino rápidamente porque me di cuenta que era la manera de conocer mejor el ordenamiento jurídico y, sobre todo, de poder ayudar a las personas, que es lo que más me gusta de ser juez.