San Jorge y la Guerra Santa_3x20 4e6q4w

En la historia hay un personaje muy importante, muy relevante, uno de los santos más conocidos que tenemos en nuestro país y en otros rincones del mundo, como es aquel gran caballero, a veces portando con un caballo alado, como era San Jorge, vencedor de batallas, ayudó a reyes como el propio Pedro I en una gran batalla en Huesca, y al final esa forma de milagros de ayudar a vencer al enemigo.

Pero esta noche queremos adentrarnos en un San Jorge diferente, en un día de Aragón diferente, porque el otro día reflexionaba, digo, ¿cómo eran las batallas en aquella época? ¿Realmente iban espada en mano? ¿Realmente había las caballerías? ¿Son tan numerosos esos enfrentamientos? Bueno, pues desgranamos cómo era la guerra en aquella época y por supuesto, esos enigmas y milagros que rodean a una figura tan espectacular como este santo y patrono de Aragón.

Así que, atentos, que comienza Abismo. Muy buenas noches. ¿Qué tal, Silvia? Buenas noches. Hablando de nuevo de San Jorge, como cada año, pero es que hay muchísimos datos que podríamos seguir descubriendo durante años y años y años. Hoy nos vamos a centrar más en su faceta como guerrero, como soldado de la religión.

Hay que diferenciar, ¿eh? Siempre lo digo muchas veces, San Jorge a San Miguel. Dicen, ¿qué diferencia hay? Muy sencilla. San Jorge no lleva alas y San Miguel sí. Aunque los dos están ahí con el dragón dándole, pero es la gran diferencia. Llegan a las iglesias y dicen, ¿está San Jorge en el altar? No, es San Miguel.

Coronel Francisco Rubio. Paco, ¿cómo estás? Buenas noches.

Muy bien, buenas noches. Pues encantado de estar aquí. Yo tengo una norma que creo que creo que se cumple para saber si lleva alas, si es ángel. Si acaba en él, suelen ser ángel. El nombre acaba en el. Si te fijas, son todos o todos los que se me ocurren ahora son ángeles. Oye, pues es verdad. Hay cosas que vas cayendo con el paso del tiempo. Es que con el coronel se aprende cada día.

Es verdad, ¿eh? Estoy haciendo un repaso ahora en mi cabeza.

Dale, haz un repaso y lo verás como... Sí.

Silvia, hablamos un poco de San Jorge. Bueno, vamos a introducir esta figura brevemente porque lo conocemos todos. Además, ya hemos hablado en este programa de él. Fue un ciudadano romano nacido alrededor del año 280 en Mitlene, en Caspadocia. Y se sabe que hizo una brillante carrera militar. Se convirtió en un reputado tribuno y él era de una familia cristiana, por supuesto.

Así que, bueno, pues comenzó una gran persecución. Ya sabéis que en aquel momento, Roma estaba intentando luchar contra los cristianos y el emperador Diocleciano lanza una campaña contra todos. Pero San Jorge, bueno, pues se negó en todo momento a decir que abandonaba la fe cristiana. Y bueno, pues fue perseguido hasta que lo encontraron y lo torturaron.

Unas épocas muy haciagas, muy complejas. Allí desde Nerón, que fue el que abrió esa gran lucha. Y al final, bueno, si nosotros vamos a Roma y vemos todas esas catacumbas, recuerdan a esos primeros cristianos. Más adelante, en torno al año 311, 313, ya fue con Constantino I el que aquella firma tan reconocida como fue ese Edicto de Milán, que lo que supuso fue frenar ya esa persecución que había.

Hay que imaginar una época, esa antigua Roma, pues ¿por qué no? En el cine imaginamos el Coliseo, esos grandes anfiteatros donde la diversión diaria o la diversión semanal... Bueno, pues vemos los gladiadores luchando con esas bestias, pues habitualmente los gladiadores y las bestias pues se sustituían por cristianos. Era más...