radiochip de Manolo el del bombo entrevistado 5q3v46

El que no falló en el Mundial y tampoco mañana es Manolo Del Bombo, el señor que con su bombo hizo frente ni más ni menos que a las bubucelas, ¿a que sí Manolo? ¿Qué tal? Muy buenas noches.

Buenas noches, ¿qué tal? Nosotros muy bien, ¿y tú qué tal por Sudáfrica? Pues muy bien, fenomenal, la gente se ha portado de maravilla, pensé el primer aeropuerto hace 5 días y la gente fue maravillosa conmigo, ¿sabes? Sobre todo porque te cogieron a hombros confundiéndote con Vicente, ¿no? Pues sí, eso me dicen la gente, me dicen la gente que sí, luego me acerqué a ellos y tal y bueno, yo creo que se confundieron cuando me vieron bajar las escaleras, creo yo.

Yo creo que fue por el bigote, ¿no? Sí, sí, sí.

¿Entre cuántos te mantejaron? ¿Eh? ¿Entre cuántos te mantejaron? Pues bastante, yo creo que había 100 o 200 personas, ¿sabes? Sí, sí, sí.

No me hubiera fiado yo mucho, ¿eh? Tú ni te molestaste en decirles que yo no soy del bosque, dijiste, venga, pues venga, vale, hay que firmar otra cosa.

Luego ya la gente decía Manolo, Manolo decía.

Ah, luego decía Manolo. Oye, si hace 3 años no cambiaste el bombo por una bubucela ya no lo cambias más, ¿no? No, no, que va, yo hice unas pruebas y tal y se oía también mucho el ruido del bombo, ¿eh? Oye, ¿mañana va a haber bubucelas? ¿Os habéis enterado si hay bubucelas o no? O ya que ya pasó la historia.

No sé, ha comentado algo pero no sé si va a haber, no sé.

Eh, Miguelito, Juanma, ¿sabéis si va a haber bubucelas? Bueno, es que va a haber poca gente en el campo, sinceramente.

¿Ah, sí? Sí, 35.000 personas aproximadamente sobre un estadio que tiene una capacidad para 90.000, o sea que por muchos que vayan con la trompeta va a ser más llevadero que el mundial.

Y el mundial fue sencillamente horrible, o sea, por mucho que hablemos ahora de la gracia de las bubucelas, yo lo recuerdo como una de las peores experiencias de mi vida, de las experiencias además más inútiles y del derroche de energía más tonto que puede hacer un ser humano, que es estar durante 90 minutos en vez de ver un partido y soplar una bubucela.

Fue de verdad algo que marcará el Mundial.

Pues hijo mío, mañana sin bubucelas es un partido de coña.

Hombre, puestos de bubucelas no va a haber.

¿No va a haber? Esperemos que los que la compraron no la lleven mañana al campo.

Manolo, ¿tú cómo llevaste las bubucelas? Bueno, las llevé bien porque había mucho español y tal, y las vamos bien.

Al principio muy bien, y luego pues fíjate conforme iba el partido, para mí después de ocho Mundiales, ganar este ha sido ponerme enfermo primero, marcharme a España, volver otra vez para Sudáfrica.

Hoy he visto el campo y todavía me acuerdo del padre de Mata, que eso ha comentado a él, cómo corría cuando pitó el árbitro el final del partido.

Corría que parecía que por las gradas, que había jugado él.

Para ti habrá sido el mejor momento deportivo que habrás vivido, claro.

Tantos años persiguiendo a la selección.

¿Y para mañana qué repertorio tienes? ¿Has ensayado algo? Sí, ha habido mucho español y dice que va a haber un grupo de 40 o 45 personas.

Estaremos juntos y animaremos todo el partido.

Ah, esos los pones a andar pero rápido, además, con el bombo, ¿no? Sí, sí.

Claro que sí.

Y donde esté la cosa armónica del bombo, que se quite la bubucela, claro.

Anda que no has tocado tú las narices por todos los campos del mundo con el bombito.

¡Manolito! Ah, y que se ha cortado con Manolo del Bombo.

Sí, se ha cortado.

Sí, está ahí y se ha cortado.

Yo creo que en México ya estaba en el 86, ¿no? ¿Quién? Manolito del Bombo.

¿Ha dicho ocho mundiales? Sí, seguro.

O sea que...

Por eso digo que hemos desquiciado en los cinco continentes.

Sí, sí, sí.

Sí.

Claro, es que estoy pensando que pensará un sudafricano con una bubucela cuando ve a Manolo del Bombo atizando la maza y dándole al bombo.

Pues pensará lo mismo que piensa usted de las bubucelas, más o menos, ¿no? Sí, hombre.

No, en serio, ¿eh? Fue complicado.

¿Sabes para qué fue complicado, además? Yo creo que esto se contó.

Para las televisiones que retransmitieron aquel mundial, era complicado atenuar el volumen, el sonido ambiente y convertirlo en algo audible para el espectador que estaba en Estados Unidos, en España, en Francia, en Reino Unido, conseguir hacer un sonido limpio.

Calla, que a ver si no lo quita.

Manolo, estaba preguntando a Tomás Guas si tú estuviste ya en México 86, ¿sí, no? Sí, claro.

Yo creo que te conozco allí.

Yo soy de España 82.

Yo me acuerdo del año 86 en México en unos chalets que me hacían tocar el bombo a las 7 de la mañana.

Despertaba todo el mundo, todo el mundo se enfadaba conmigo y tal.

Como Manolo.

Manolo, una curiosidad, porque lo recuerdo de algún viaje.

¿Cuántas veces te han perdido el bombo? Porque recuerdo que en algún viaje, no sé si has trabado y luego apareció.

¿Cuántas veces te ha pasado? Sí, dos veces.

Una vez, cuando fueron las Olimpiadas de Barcelona, yo estaba en Barcelona, bueno, fui de Alemania a Barcelona, ¿no? Y el bombo apareció en Holanda.

Me lo mandaron al día siguiente.

Vaya.

Y luego, el otro día, cuando fue la Sub-21, en Bosnia, me quitaron el bombo y apareció a los 5 minutos y ya la policía los había escogido.

Ah, bueno, bueno.

¿Pero te lo robaron? Me lo robaron, sí.

Ah, caray.

Estaba yo con el conductor en el autocar, oímos un ruido y es que habían abierto el autocar y se llevaron el bombo.

Anecdotas de toda una vida, las de Manolo y el bombo.

Manolo, que disfrutes...

Era por...