Puerta a lo Desconocido 28/02/25 - MALDICIONES 3t1x63

No tengas miedo, pues en realidad tememos lo que no conocemos.

Es el momento de abrir una puerta a lo desconocido.

Mal cáncer te coma, que te parta un rayo.

Así te estrelles o maldigo toda tu vida en nombre del dolor que tú me has causado y de los golpes de mi rostro.

Yo los maldigo en compañía de todos los poetas.

Maldigo a 112.090.

No, que nadie se asuste.

No maldigo a nadie, pero así se maldice.

Mercedes, así se maldice.

Ni más ni menos.

Hola, buenas noches.

Bueno, el tema de las maldiciones yo creo que tiene mucho que hablar porque es algo que a lo largo de la historia tenemos mil y un casos de familias, historias, objetos, personas que se han visto afectadas e involucradas por esta palabra tan temida, maldición.

Pero esto es mentira, ¿no? Nadie puede maldecir, es decir, es un brindis al sol.

Nadie puede causar un daño que no vaya más allá de la deshonra, más allá del agravio verbal.

Ahí se queda eso, ¿no? Bueno, yo creo que no, Juan Antonio.

Una maldición, vamos a explicar un poquito a nivel teórico, una maldición es un deseo, un decreto de daño o desgracia hacia una persona, un objeto, una situación, una leyenda.

O sea, vamos a dar una explicación brevemente de qué es lo que puede ocasionar una maldición.

Una maldición puede ocasionar tales desgracias en una familia, por ejemplo, que tenemos casos muy verídicos y muy estudiados a lo largo de la historia.

Por ejemplo, la familia Kennedy.

En la familia Kennedy podríamos hacer un poquito de estudio a ver qué es lo que pasó ahí.

Bienvenida a Puerta al Desconocido.

Muchas gracias.

Doctor, no se puede maldecir a nadie.

Es decir, te pueden decir lo que quieran, pero no tiene ningún efecto sobre la persona que recibe ese mensaje verbal, ¿no? Bueno, buenas noches, antes que nada.

Yo creo que la clave está precisamente en la palabra, nunca mejor dicho, porque si cogemos maldición, realmente lo que estamos diciendo es maldicho.

Y si vemos bendición, estamos diciendo bien dicho.

Entonces parece que la maldición necesita primero expresarse de palabra.

O sea, necesita algo que se diga, que se lea, que se escriba, etc.

Y luego, claro, hay mucho componente psicológico, hay mucho componente antropológico.

También hay mucho componente de la propia capacidad que tenemos para convencernos de algo que no existe.

La sugestión, ¿no? Exactamente.

Entonces, claro, existe la maldición.

Yo creo que existe el efecto psicológico que podríamos llamar maldición.

Pero tal como maldición, muchas maldiciones, una vez que se analizan, se sabe que no lo son.

Bienvenido a Puerto a lo Desconocido.

José Guillén, ¿se puede maldecir a alguien? Buenas noches.

Totalmente sí.

Sin ningún género de dudas.

Sin ningún tipo de duda.

Te puedo hablar de ello, te puedo explicar, y te puedo hablar de las consecuencias inclusive que puede llegar a acarrear a las vidas de algunas personas.

Con Mercedes Garoz, con Álvaro Álvarez y con José Guillén vamos a hablar de maldiciones.

Hoy en Puerto a lo Desconocido, programa de radio que realizamos en Onda Jerez, en el 101 de la FM, y que se emite para toda Andalucía a través de la Onda Local Andaluza, o EMARTV.

Oye, compañeros, que son 100 emisoras de toda Andalucía que están pendientes de si realmente alguien se puede tomar a pecho que durante la mañana en el trabajo alguien le haya dicho mal cáncer, te coma.

Porque eso queda un pozo, ¿vale? Creamos o no, ese agravio queda.