Programa 304 (413) de Peligrosas Sociales - La leyenda de la Casa del Infierno 6p5pu

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Buenas tardes zagales y zagalas. Hemos vuelto. Hemos vuelto y desde ahora probablemente, no probablemente no, vamos a estar aquí con más regularidad. Sí, bueno, con más facilidad. Ahora también viene el verano, este del infierno, que ya empezamos a padecer. Ya he pensado que cumplo el 15 de junio, por cierto. Cumpleañito, Saraceli, efectivamente.

Yo recuerdo que algún año, tía, llevábamos chaquetilla. Hace muchos eso. Sí, pero bueno, por la noche. Sí, eso era una fantasía. Cuando hacía ahí en la terraza, luego por la noche había que ponerse algo. Sí, sí, había que ponerse algo, refrescaba. Incluso yo, noches de estas largas malasañeras de 5 de la mañana en la calle, eso estaba fantástico. Pero que tenías un poco de fri-fri.

Sí, sí, sí, pero ahora hemos empezado junio y ya es el calor infernal. Y lo que viene.

Y lo que viene, en fin. Es el programa 413 y es el décimo de la temporada 14. Muy bien, estamos un poquito vagas este año, pero como como vengo diciendo, vamos a remontar. Vamos a remontar, que mi Araceli ya está un poquito mejor. Y bueno. A ver si empiezo la rehabilitación. Sí, eso te va a venir muy bien. A ver qué tal. La rija. La rija del piescito, no de las drogas. Sí, sí, sí, sí. Y nada, bueno, no hemos...

Bueno, Araceli, por razones obvias, no ha estado saliendo, pero sí que has hecho algunas actividades. Sí, lo que puedo. Se hace lo que pueda. No hay tan mal lo que haces. Fui a una... Eso es lo que quería que contaras. Mira, vamos a ponernos en antecedentes. Vi que había un documental en una librería y digo, bueno, pues mira. A ver, ya desplazarme me cuesta un poco con autobuses y tal, pero tardo más de lo normal, vale. Pero bueno, digo, venga, voy.

Compro las entradas, que vendían entradas, que yo que sé, podía ser gratis. Yo de hecho creía que era gratis, pero luego dije, bueno, aquí pone 3 euros, no sé qué. Y digo, bueno, venga, tal. Y era un documental que yo sabía, el Synth Britannia, que sabía que lo había visto y tal, pero digo, bueno, como está en YouTube y lo he visto así cutremente, pues hombre, digo yo que lo harán como más, todo más mejor. Y luego como que había coloquios, no sé qué.

Madre mía. Llego allí, a la hora, y me dicen que es que no hay montado nada y que es que, que era, primero me dicen a las 8, cuando yo estoy a las 6 y media, digo, aquí pone 6 y media. Bueno, no, entonces es a las 7. Vale, vale. El tío llega a las 7 y cuarto, 7 y media. Sin montar ni nada, que para lo que había que montarlo. Un señor mayor. Es que ahora no sé decirte cómo se llama el colectivo que es el que lo monta. Mejor no decimos nada. Mejor no decimos.

Estábamos cuatro gatos allí. El sitio está muy bien, porque bueno, está en la calle de dos hermanas, una librería y tiene una cueva, bueno, no es tipo cueva como las de Malasaña, pero sí que es como un sótano, con unas escaleras de caracol, un poco para mí dificultosas, pero bueno, y se estaba muy fresquito ahí abajo y hay mucho espacio y tenía, era como sillones. Pero ya cuando ponen el documental de YouTube.

Eso no puede ser. O sea, poner el documental de YouTube y... 50 , que cada 10 minutos salía un anuncio. Luego, no sé qué le pasaba al proyector, el que proyectaba, que él no lo sabía usar, yo creo. Lo siento, pero es que es así, porque era demasiado grande y tú puedes ponerlo al tamaño que quieras. Yo que sé de proyectores, porque a veces me supe ponerlos en reuniones. Claro, efectivamente, eso hay una rueda de fica.

Efectivamente, desenfocado. Él no sabía cómo se enfocaba. También podría haber llegado un poco antes investigar, tampoco hay que ser ingeniero. Es que yo creía que estas cosas las había hecho más veces.

Pero vamos, ya simplemente, a mí lo que me parece delirante es que lo ponga de YouTube y encima con anuncios. Dice, no he podido pagar la cuenta.