Moda Emblemática z3d2b

El tweed es un tejido de lana virgen escocesa, que se caracteriza por su jaspeado y por ser fuerte y resistente al desgaste. Coco Chanel lo importó de Escocia durante su visita al Duque de Westminster en los años 20. Sin embargo, no fue hasta 1954, después de la Segunda Guerra Mundial, cuando creó su famosa chaqueta tweed que se convirtió en todo un símbolo de comodidad para la mujer y de liberación de todas las prendas encorsetadas de la época.

Choque de generaciones es un espacio en el que preguntamos a diferentes generaciones qué opinan sobre una misma prenda, en este caso, del sujetador femenino y de sus tendencias actuales (bralette). ¿Qué pensaran abuelas y nietas al respecto? ¡Puede que nuestras abuelas nos sorprendan y sean más modernas de lo que pensamos!

Si vuestro Instagram necesita una renovación y os gustaría capturar fotos tan guays como las de los influencers, no os perdáis La cara Oculta. En esta ocasión, hemos recopilado algunas de las mejores apps . Las hay de todo tipo: estilo vintage, con herramientas que mejoran la calidad del objetivo o, incluso, auténticas cámaras desechables antiguas. Id ganando espacio en la memoria del móvil porque será imposible quedarse solo con una.

En nuestra sección En La Gran Pantalla os hablamos de prendas icónicas que aparecen en grandes películas. En este caso, de la mítica chaqueta de cuero de Grease y Top Gun. Muchas curiosidades y anécdotas poco conocidas que os darán una visión distintas de estos clásicos del cine.

El kimono es una prenda tradicional japonesa del siglo V que se ha ido transformando y adaptando con el paso del tiempo, las diferentes dinastías y las circunstancias. La moda oriental ha llegado a nuestros días, pero en clave actual.

Sección en la que jugamos con los oyentes para ver cuánto saben sobre la prenda del día, en este caso, las irónicas Converse ¿Habrán acertado? Escucha las preguntas del pasado lunes sobre estas zapatillas que no pasan de moda y en el programa completo tenéis las solución a las preguntas.

Las Converse existen desde 1917. Estas zapatillas fueron concebidas para ser un calzado de la liga profesional de baloncesto americana y en sus inicios, solo estaban disponibles en tres modelos: una monocromática con una suela y cuerpo en negro; otra, blanca con goma blanca y los bordes azul y rojo; y una última zapatilla toda de cuero negro. Este diseño se fue extendiendo por distintos grupos urbanos y sociales y actualmente, se ha convertido en un básico en el armario de hombres y mujeres.

A principios de 1900, los aviadores y del ejército utilizaban las chaquetas de cuero para resguardarse del frío, pero fue durante la II Guerra Mundial cuando adquirieron el nombre de “chaquetas de bombardeo”. Estas cazadoras eran perfectas para proteger a los soldados y oficiales de las bajas temperaturas. En la actualidad es una prenda que no pasa de moda y que utilizan tanto hombres como mujeres.

El esmoquin femenino fue creado en 1967 por Yves Saint Laurent. Hasta ese momento, el pantalón era una pieza prohibida para las mujeres de la época y podían ser imputadas penalmente. Yves Saint Laurent se encargó de introducir esta prenda masculina en la alta costura femenina de manera que el pantalón rompió este esquema y pasó a ser, además de una prenda unisex, un símbolo de poder femenino.

Durante el siglo XV el calzado con tacón era muy popular, tanto entre los hombres como entre las mujeres. Pero no fue hasta el siglo XVIII cuando el zapato de tacón paso a ser un calzado únicamente para mujeres. Los tacones de aguja deben su nombre a un comerciante y diseñador italiano llamado Giacomo Pirandelli, barón de “Styletto,” en 1760.

El Little Black Dress fue creado en 1926 por Coco Chanel y fue diseñado para las mujeres que necesitaban una prenda representativa de su nueva independencia. Este vestido funcional, y a la vez elegante, le quitó a la mujer todos los adornos que la estigmatizaban. Además, a día de hoy, se ha convertido en un clásico que no puede faltar en el armario de ninguna mujer.

El sujetador femenino fue creado en 1914 por Mary Phelps Jacobs. Para ello, utilizó dos pañuelos de seda y unos cordones. Su creación ayudó a que las mujeres dejaran de usar el estorboso y molesto corsé . Sin embargo, en la actualidad es una prenda que ha causado polémica entre las feministas, ya que declaran que es algo transgresor.

En 1873, Levi Strauss y Jacob Davis crearon una de las prendas más icónicas de la historia: los jeans. Desde entonces, han sido utilizados por todos sin dejar espacio a los clasismos, conflictos raciales o tiempos de guerra. Esta vestimenta ha demostrado que el paso del tiempo no tiene importancia para un básico como este.

El bikini nació en 1946 y es un icono de liberación femenina. Hoy en día, es tan común en nuestro armario de verano, que no somos capaces de imaginar que, hace poco más de un siglo, su existencia era impensable. Y es que, no es hasta bien entrado el siglo XX, cuando las piezas de baño comienzan a dejar ver el cuerpo femenino.

El trench coat fue creado por Burberry en 1912 para los soldados británicos que lucharon en la Primera Guerra Mundial. Ha pasado de ser una vestimenta de carácter militar a un gran clásico del armario tanto masculino como femenino.

La minifalda causó un gran revuelo en la década de los sesenta. Fue obra de la diseñadora inglesa Mary Quant, primero, enseñando las rodillas y, poco después, acortándola hasta prácticamente la mitad de los muslos. Se dejaron de lado los vestidos largos para darle paso a esta vestimenta mucho más corta, que brindaba sensación de frescura y libertad a la mujer moderna.