Monedas conmemorativas actuales: ¿Son una inversión? | PODCAST #208 1h4g1l

Muy buenas a todos, aquí Adolfo Ruiz Calleja en un nuevo podcast del Blog Numismático.

Para hoy traigo un tema verdaderamente peculiar, un tema que en el que muchos de vosotros seguramente no hayáis reflexionado, como yo tampoco lo había hecho hasta ahora. Y es si las novedades numismáticas, estas monedas de colección que emiten muchas casas de moneda, pueden ser un vehículo de inversión o no, entendiendo inversión como una forma de refugiar un patrimonio. O sea, que hoy en día dedicamos un dinero y al cabo de, no sé, unos años pues ha mantenido el valor.

No vamos a pensar tanto en ganar como al menos en mantener este valor. Bueno, este tema, como digo, pocas veces le dedicamos reflexión porque consideramos que las novedades numismáticas es algo bastante minoritario, que es un mercado pequeño, que, bueno, se compran ahora unas monedas y luego al cabo de unos años ya valen menos. Bueno, cuidado, a lo mejor no es tanto así.

Esto, bueno, me ha surgido a partir de una reflexión, de una conversación que tuve con Numismática La Dobla y, bueno, pues de este intercambio de opiniones, que hubo bastante fructífero, como siempre con Numismática La Dobla, pues he querido hacer un artículo y acompañarlo de este podcast, así compartirlo con todos vosotros.

A ver, pensemos una cosa. Una novedad normal y corriente, digamos, de las monedas que, por ejemplo, emite la fábrica de moneda y timbre o cualquier otra ceca, pues tiene una tirada que generalmente son unas cuantas miles de monedas, ¿no? No sé, 2.000, 5.000, 8.000, 10.000 monedas. Y esto pues sería, no sé, pues, por ejemplo, para una moneda de 10 euros.

Bueno, pues de estas 5.000 monedas, a lo mejor se venden las 5.000 o a lo mejor, si se le da mal, pues a lo mejor se venden, no sé, 3.500, 4.000.

Bien, pensemos en cualquier serie histórica. ¿Hay algún tipo de moneda que se venda 4.000 ejemplares en un año? O sea, decimos, no sé, los ocho reales de México de 1802, una moneda de lo más común y que se vende mucho.

¿Cuántos se venden al cabo de un año? ¿Cuántos ejemplares? No sé, a lo mejor, ¿500 ejemplares? O sea, estamos hablando de un orden de magnitud por debajo de lo que es la moneda conmemorativa.

Lo que quiero decir con esto es que el mercado de monedas conmemorativas es muy amplio y muy ágil y se vende mucho.

O sea, hay mucho coleccionista de moneda conmemorativa. Lo que pasa es que, claro, los coleccionistas de monedas históricas, pues a lo mejor no estamos entre ellos. Bueno, hay gente que colecciona moneda histórica y moneda conmemorativa, pero digamos que somos públicos distintos. Entonces, claro, el coleccionista de moneda histórica piensa que hay pocos coleccionistas de moneda conmemorativa y probablemente los coleccionistas de moneda conmemorativa también piensen que hay pocos coleccionistas de moneda histórica.

Pero si habláis con cualquier tienda, cualquier tienda a pie de calle, vais a ver cómo se venden muchas más monedas conmemorativas, monedas actuales que monedas históricas. Entonces, ¿cabe la posibilidad de pensar, oye, y ese mercado que es suficientemente grande y que en muchos casos es más grande que cualquier serie de moneda histórica, ¿se podría utilizar ese mercado como forma de invertir o al menos como forma de refugiar un capital? Bueno, pues esa es un poco la reflexión que quisiera hacer.

Una reflexión que, como vais a ver, es más compleja que decir no, o decir sí de entrada, sino que, bueno, pues hay que poner sus matices. La primera cuestión importante, y esto es un error que sistemáticamente hacen muchísimos inversores, es que confunden la inversión en moneda conmemorativa con la inversión en metales.

No hay vez que yo no hable de una moneda conmemorativa que todo el mundo diga que es muy cara porque es cara con respecto a su valor de metal. Y es que no tiene nada que ver. Estos no son vehículos para la inversión en metales preciosos. O sea, el que quiera invertir en oro o el que quiera invertir en plata, que no compre moneda conmemorativa.

Así de fácil. Vuelvo a repetirlo. Si queréis invertir en oro o en plata, no compréis moneda conmemorativa. Simplemente porque son mucho más caras que su valor intrínseco, en oro o en plata. Entonces no tiene sentido. No son vehículos pensados para la inversión en metales preciosos. Yo creo que ya no sé cómo decirlo de una manera distinta. Las inversiones en metales preciosos físicos se pueden hacer a través de otro tipo de monedas, que son las monedas bullion, con tiradas que son ilimitadas, que son mucho más próximos el valor de la moneda al valor de su material físico. Y que, bueno, pues que...