MM18 - El mito de Aracne 6h4fr

Desde marineros que se transforman en cerdos a ninfas de las que brotan árboles o a una mirada que convierte al espectador en piedra la mitología griega rebosa de transformaciones asombrosas los dioses poderosos por lo general cambiaban sus propias formas a voluntad pero para los mortales las mutaciones solían ser indeseadas a la tejedora aracne le sucedió una de esas transformaciones desconcertantes aracne era la hija de un comerciante que pasaba sus días tiñendo telas con los tonos más profundos de púrpura tenía un don para hilar las mejores hebras tejiendo horas en la tela que fluía y creando magníficos tapices la gente acudía en masa para ver sus manos volar sobre superar como si el hilo surgiera directamente de las yemas de sus dedos pero conforme los elogios por su trabajo crecían también lo hacía su orgullo aracne a menudo se la podía escuchar alardeando de sus habilidades declarando que su talento superaba al de cualquier otra persona mortal oh divina se negó a ver el arte del tejido como un regalo de los dioses por el contrario hizo alarde de él como si fuera su invento personal desafortunadamente la diosa de la sabiduría y la artesanía atenea escuchó aracne hacer estas afirmaciones planeando dar una lección a la ingrata chica atenea se disfrazó como una anciana y camino sigilosa entre los mortales reprendió aracne en público cómo se atrevía la tejedora afirmar ser más grande que los dioses pero aracne solo se rió apenas levantando la vista de su telar provocada la anciana se quitó la capa para revelar su verdadera identidad se hará que me insistía en difamar a los dioses atenea la desafiaría a un concurso directamente enmascarando su sorpresa ante la aparición de la diosa de ojos grises aracne aceptó el desafío atenea sacó su propio telar reluciente mientras una multitud se reunía para ver las tejedoras comenzaron con los ojos fijos y las lanzaderas desdibujándose atenea conjuro volutas de nubes desde lo alto y esbeltos hilos de hierba desde abajo en un espectáculo de destreza tejió tremendas escenas que mostraban el poder de los dioses poseidón montando las olas zeus disparando rayos y apolo volando por el cielo en el magnífico tapiz de atenea la gloria de los dioses empequeñecía la vida mortal pero aracne no tenía interés en estimular egos divinos su tapiz mostraba los dioses abusando de su poder peleándose entre ellos bebiendo y presumiendo entrometiéndose en la vida de los mortales representó a zeus como un mujeriego transfigurándose asimismo para atrapar a las mujeres un cisne paralela un toro para europa una lluvia de oro para danae aracne luego recurrió a los delitos de otros dioses del secuestro de perséfone por hades a la búsqueda salvaje de dioniso de origone a pesar de que presentó los dioses con la luz más desfavorable el trabajo de aracne brilló con su deslumbrante habilidad su tapiz estaba casi vivo lleno de movimiento y colores brillantes que titilaban triunfantes cuando tenía vio el trabajo indudablemente mejor y evidentemente rebelde de aracne se enfureció y deslumbró la tejedora humana la alegría de aracne desapareció cuando sintió su cuerpo encogerse retorcerse sus dedos se agitaron violentamente cuando sus brazos se pegaron a sus costados y pelo negro brotó por todo su cuerpo la diosa dejó aracne con un carrete de hilo desplegándose de su vientre un delegado recordatorio de su talento humano por desafiar la supo posición de que los dioses eran intocables atenea había reducido a su adversaria la primera araña hasta el día de hoy aracne y sus hijos siguen tejiendo prolongando así su penitencia o quién sabe si su tenaz desafió a los dioses