Megalomaní-A -261- Marejada en la frontera - El Equipo A - 2x04 4m5x3n

Ellos siempre vencerán, porque cuentan con la verdad.
Mantienen la paz, la Academia de Policía triunfará.
Ellos siempre vencerán, porque cuentan con la verdad.
Mantienen la paz, la Academia de Policía triunfará.
¡Aquí está!
Un saludo y bienvenidos a un programa de Megalomania.
El programa en el que estamos repasando todos y cada uno de los episodios del Equipo A
en esta ya su segunda temporada.
Hoy me acompaña Ricardo Mariscal. ¿Qué tal, Ricardo? ¿Cómo estás?
Muy bien. Buenos días, tardes, noches, Fernando.
Ideólogo y creador de los podcast.
Yo no soy Michael Caine.
¿Y el otro secundario es cómo?
Me acuerdo de esos secundarios que nos traumatizaron, que era lo que hacía Viruete, pero no.
¿El tuyo es cómo?
De leyenda. Secundarios de leyenda.
Secundarios de leyenda.
Eso es.
Secundarios que merecen ser reivindicados.
Muy bien.
Sí, sí.
Bueno, te tengo que agradecer a ti que me animaste también a hacer esto.
Yo los podcast de mi escuela son los que publican 20 podcast en un mes, como tú.
Esos son de mi escuela. Los demás que no.
El único requisito para ser de mi escuela es grabar mucho y subir mucho.
Ya no hablo yo de conocimiento, calidad, edición...
No, no, no.
¿Cantidad? ¿De volumen?
Súper productividad.
Sí, sí.
Hay gente que hace un podcast y parece que ha criado un hijo.
He tardado 9 meses en gestarlo y míralo.
Ahí lo tienes.
Si no te gusta este, pues te escuchas el próximo.
O sea, ese no tiene más.
No tiene mucho.
Bueno, cuéntanos, porque a lo mejor los oyentes habituales te conocen,
pero si alguien llega nuevo por aquí, ¿de qué va Yo no soy Michael Caine?
Como el propio nombre indica, de dar a conocer toda la filmografía del gran Michael Caine.
El actor británico más conocido de todos los tiempos para mí
y el mejor actor de toda su generación para mí también.
Y que, además, ha hecho a lo largo de su carrera casi 200 películas.
Y mi objetivo es hablar de todas.
Objetivo ambicioso.
De las malas también.
Sí, eso quizás es lo que más...
Cuando hablabas conmigo de, por ejemplo, yo hago lo mismo con Stallone
y tú me decías, no, porque nada más quiero hablar de las buenas,
pues de las malas también.
Al final el programa de Tiburón 4 es el que más escuchas tiene.
Sí, curiosamente.
Y al final es más satisfactorio porque además tienes como menos responsabilidad,
como que vas más libre a lo largo de las películas malas.
Te puedes sentir más liberado y más espontáneo, digamos.
Hay películas que te sientes más rígido.
He hecho hace poco una que es El hombre que pudo reinar,
que es un mito para mucha gente y le di muchas vueltas para hacerla.
Al final la hice con el director del programa Días de Cine de la Dirección Española.
Por eso, porque buscaba que alguien así, con cierto prestigio,
hablara de ella porque me da mucha responsabilidad.
Y entonces al final resulta casi más divertido hacer las películas malas.
Sí, yo estoy de acuerdo contigo porque yo hago el Stallone en mi vida
y todavía no he hecho las de Rocky ni Rambo.
Solo hago Rhinestone, hago las chorradas que tiene Stallone.
Llevo ya cien y pico programas y todavía no he hecho, yo que sé,
Joel Alcón, ni Máximo Riesgo, ni Demolition Man.
Hago las otras. Es así mejor.
No hay que darle a los oyentes lo que quieren. Películas malas.
Y lo de los secundarios que te dio de repente también, ¿no?
Sí, pero porque eso cobra todo un tema de reivindicación.
Porque hay actores que siempre vemos en las películas que no suenan su cara
y que cobran mucho menos que los protagonistas,
pero que a veces roban la función, que a veces roban la película.
Y yo creo que se merece reivindicar los que son tan buenos como los protagonistas,
pero ganan mucho menos y tienen mucha menos visibilidad.
Entonces pensé que merecía la pena reivindicarlos
siguiendo un criterio un poco subjetivo, bastante subjetivo.
Y bueno, sale mucho porque además como es muy amplio,
pues te puedes tener secundarios de leyenda de todo tipo de filmografías
y de todo tipo de épocas. Entonces ahí no hay límite.
Sí, es un recurso del que yo me he agarrado también para esto.
Porque este programa del Megalomania A se basa en que
un montón de estrellas de Hollywood pasaron por la serie
y en cada capítulo tienes a alguien del que si no tienes tema de qué hablar,
como puede ser el caso de hoy, pues tenemos un actor del que
podemos tirar del hilo y estar hablando una hora entera.
Y si no es el actor, es el director o si no es algo.
Entonces, bueno, el equipo suele tener tramas un poco más enrevesadas,
o menos enrevesadas, pero normalmente fáciles de contar.
Y el resto, hasta rellenar por lo menos una horita, que es mi idea,
pues siempre tenemos ahí a alguien.