Máxima vulnerabilidad 493v6z

Hola, bienvenidos a Loop Infinito, el podcast diario de Pelesfera sobre Apple y su ecosistema.

Yo soy Javier Lacorte y empezamos.

La semana pasada se produjo una detención, aquí en España, de estas que nos marcan un antes y un después un poco en nuestra relación con la tecnología, sobre todo a largo plazo, y estoy seguro de que dentro de un tiempo vamos a recordar este momento y esta detención como el principio de algo, como un cambio.

Me explico.

Un joven fue detenido en Barcelona por grabar sin consentimiento a cientos de mujeres usando las Ray-Ban Meta.

Lo hacía para crear luego contenido promocional de su curso de seducción, cito esto de seducción, que vendía por 3.000 euros, aparte de una cuota mensual de 45.

Y los datos son un poco escalofriantes.

La policía ha analizado 329 vídeos en los que aparecían 269 conversaciones, incluyendo datos íntimos de mujeres, que básicamente este hombre abordaba por la calle y se la llevaba si podía a un sitio un poco más apartado y más tranquilo, como un banco en un parque, y mantenía conversaciones con ellas, aparentemente casuales, mientras las grababa con sus gafas inteligentes.

La mujer que se dio cuenta de esto y denunció, y sirvió para tirar del hilo y ver todo lo que había detrás, fue una mujer cuyo vídeo ya tenía 700.000 visualizaciones en TikTok.

Y lo más inquietante del caso, por si todo esto no es lo suficiente, es que prácticamente ninguna de las víctimas se dio cuenta de que estaba siendo grabada, porque según fuentes policiales, en ninguno de los 229 vídeos analizados, vieron que ninguna chica hiciera un gesto o un comentario sobre una posible grabación, y esto nos dice algo bastante preocupante sobre el momento tecnológico en el que nos encontramos, que de paso puedo y voy a vincular a Apple, ahora me explicaré.

Bueno, antes que nada, este caso creo que ilustra muy bien lo que podríamos denominar el periodo de máxima vulnerabilidad tecnológica.

Es el momento en el que una tecnología ya está disponible, ya está en la calle, ya está a la venta, y es viable y funciona, pero la sociedad todavía no ha desarrollado las defensas sociales, las alarmas mentales y las convenciones necesarias para lidiar con ella.

La Ray-Ban Meta, que cuestan 330€, un poco más según el modelo, pero se pueden comprar por 330€, han democratizado en cierta medida la grabación encubierta de una forma que hasta ahora no habíamos visto, porque hasta ahora grabar sin consentimiento requería mucha obviedad, es decir, sacar el móvil y apuntar hacia la persona, o sofisticación técnica considerable para instalar una cámara oculta o para tener un dispositivo muy muy de nicho que a veces ni siquiera es del todo fácil de encontrar o fácil de utilizar y ejecutar.

Estas gafas han eliminado esas dos barreras.

Cuando las Google Glass llegaron hace ya 12 o 13 años, su diseño era tan obvio y tan hostil que la propia sociedad, pese a que no estuvieron precisamente muchísimo en las calles pero algo pudo ocurrir, sobre todo en Estados Unidos, desarrolló un cierto rechazo natural hacia ellas, porque eran aparatosas, tenían una cámara muy visible, tenían un prisma holográfico, todo con una pinta que era como un grito de soy un cacharro tecnológico y la gente enseguida las miraba con desconfianza instantánea.

La Ray-Ban Meta son la antítesis perfecta de aquello, porque parecen unas gafas de sol o de vista completamente normales, son solo un poquito más gruesas que las wafers tradicionales, pero esa diferencia es prácticamente imperceptible.

Y la luz LED que se supone que debe alertar cuando alguien graba es muy pequeñita y como hemos visto en algún tutorial de YouTube hay formas fáciles de ocultarlas con mecanismos digamos muy simples.

No es tan simple como pues lo pinto de negro con rotulador permanente o le pongo encima un precinto y ya está, porque tiene un sistema de detección de estas cosas, pero no es demasiado difícil sortearlo.

Yo mismo de hecho probé hace ya más de un año estas gafas en París, precisamente en un laboratorio que tienen ahí Meta, y ya lo comenté, son sorprendentemente discretas y me gustaron mucho, me convencieron desde el primer momento, porque desde ese momento además me impresionó mucho su diseño, su sonido, como auriculares son mucho mejores de los que yo me esperaba, y la buena calidad de su cámara, pero ahora viendo este caso entiendo que esa misma discreción, que me gustó tanto, también se puede convertir en un arma de doble filo en manos equivocadas que las hay.

El hombre este que detuvieron justo explotó esta brecha, él sabía perfectamente lo que pueden hacer estas gafas, pero sus víctimas no.

Esta asimetría de conocimiento es lo que hace especialmente peligroso este momento, porque quienes adoptan muy temprano la tecnología tienen una ventaja informativa sobre el resto de la población que ya digo puede ser explotada de formas maliciosas como ha ocurrido aquí.

De hecho las fuentes policiales además han dicho que el 85% de las víctimas eran de origen extranjero, es decir, básicamente turistas por Barcelona, lo cual además casa mucho con la teoría de que era el perfil de persona que está deambulando con otros intereses, con las defensas quizás un poco bajas, no es su terreno, entonces quizás ahí hubo incluso una mayor facilidad para ellos.