Masculinidad en debate perfecto | Petit Comité T3E8 u3o61

Hola a todas, esto es Petit Comité. Estamos hoy con ni más ni menos que Beatriz Jimeno, activista y escritora feminista. Hola, Beatriz.

Hola.

Me hacía mucha ilusión que vinieras porque, bueno, no solo hemos tenido conversaciones muy interesantes, sino que teníamos un par de conversaciones pendientes. Y yo, en este momento exasperante que estamos viviendo en la España actual, apetecía mucho hablar contigo porque creo que podemos arrojar entre las dos un poquito más de luz, ¿o no?, sobre lo que está pasando, ¿no? ¿Cómo estás tú? Estoy bien, estoy bien, estoy tranquila. Estoy tranquila, que ya es mucho.

Que ya es mucho. Todos los acontecimientos feministas durante los últimos tres meses a mí es que me parece como que en algún momento tiene que parar algo porque no me da la cabeza para comprender, o sea, para integrar tanta violencia tan distinta, ¿no? Es como que cerramos el año con el tema de Giselle Pelicó, que era catastrófico. Continuamos con el tema de Íñigo Orejón, que era para adherirse por una ventana. Luego llegó el caso de Juana Rivas otra vez, de vuelta, con el tema de su hijo.

No sé, ¿qué sensación te da todo esto? Bueno, claro, lo peor es que todo eso, que es el patriarcado de siempre y justicia patriarcal, que es uno de los troncos del patriarcado. La justicia hasta ahí se ha hecho fuerte, ¿no? Pues claro, nos coge en un momento de debilidad, de auge del fascismo, de retrocesos. Entonces, no nos coge en un momento expansivo, ¿no?, como a lo mejor hace años. Entonces, bueno, es duro, pero tampoco es algo extraordinario. O sea, es el patriarcado rearmándose y, bueno, en un ciclo de retrocesos. Entonces, bueno, duele, duele, duele más porque sabes lo que va a costar.

Lo de los ciclos de retroceso, el ciclo de retroceso que acabas de decir me parece importante porque es como la sensación de que avanzamos en círculos, ¿no? Si es que lo comprendemos como avanzar, yo creo que sí, pero no es lineal, ¿no?, de alguna forma.

No es lineal, pero la historia no es lineal, ¿no? Sin embargo, creo que con los derechos de las mujeres sí avanzamos o creo o quiero pensar que el cómputo final, digamos, es que estamos avanzando. Es verdad que hay retrocesos, es verdad que da esa sensación a veces y que desanima. Yo espero que al final de este periodo, quequiera que sea, este neofascismo extrema derecha, cuando esto acabe, no tengamos que decir, retrocedimos más que todos nuestros avances. Yo espero que el cómputo final siga siendo positivo.

A mí me asusta todo este combinado, ¿no? Porque creo que, por lo que sea, esperamos que acabe en algún momento, pero no tenemos las herramientas para, de alguna forma, forzar un final de algún tipo, ¿no? Hay algo en torno al activismo que decae permanentemente.

La figura de la influencia mediocre es más importante que el activismo sobre el terreno, lo que al final da lugar a que el activismo que hoy en día sea más potente sea el activismo de la extrema derecha. Sí. Yo es que creo, yo tampoco soy una teórica de los movimientos de izquierdas ni de nada de esto, pero bueno, yo creo que no tenemos herramientas, que no sabemos cómo hacerlo en este momento. Por tanto, creo que es un momento también de reflexionar. Es verdad que el activismo más fuerte es el de la extrema derecha. Yo tengo la sensación de que cuando la izquierda llega al poder, tengo la sensación, no tengo la certeza. Lo he vivido, pero también lo hemos visto.

Puede hacer muy poco, porque las estructuras, la estructura es de derechas, el orden es de derechas, el poder es de derechas y por tanto, cuando la izquierda llega, puede hacer muy poco. Por tanto, la gente se frustra y se llena de resentimiento y busca cualquier tipo de cambio, lo que sea, digamos. Busca el cambio y por eso se va en parte a la extrema derecha. Pero también eso, porque creo que cuando nosotras… Llega la derecha y hace todo.

O sea, se salta la Constitución, lo estamos viendo en América. En Estados Unidos se salta la Constitución, se saltan las leyes, se salta lo que haya que saltarse y en principio no pasa nada o pasa poco. Y claro, llegamos nosotras y bueno, pues no nos saltamos las leyes, no nos saltamos la Constitución, no podemos. Tampoco querríamos, no sé si querríamos, pero en todo caso no podemos.