El instinto: Entrevista a Juan Albarracín, Fernando Cayo, Juan Pereira y Eva Llorach 6t582h

Cómo surge esta idea tan original, yo creo que nunca había visto algo así.

Surge en un momento en el que queríamos hacer una película de cine independiente, de cine pequeño a nivel presupuestario, pero donde necesitábamos una premisa potente y que enganchase al público de alguna manera y que intentara traer algo nuevo a lo que es el cine de género.

Yo creo que ha sido divertido en el sentido amplio de la palabra, porque es una película muy extrema.

El instinto es un thriller psicológico que arranca con una textura muy suave y a mitad de la película te pega un cambio que te deja tieso, clavado a la butaca.

Entonces eso lo hemos vivido nosotros también de una manera muy intensa, creando personajes complejos, con mucha complicidad entre los tres, porque era necesario, porque nos metemos en territorios un poco extremos.

Lo que está dispuesto a hacer una persona por sanar cuando está en un momento absolutamente vulnerable, que hay que tener mucho cuidado dónde se meten esas personas.

Y ese es el reto de los actores y del guionista y del director, dar credibilidad a ese mundo que no es el primero que te imaginas.

Pues también con encontrar un antagonista, donde hubo una pura búsqueda de oficio de guionista de probar combinaciones de protagonista-antagonista, que en un momento dado, como el personaje tenía una fobia, pues por qué no que fuera un psicólogo.

Y por qué no un psicólogo, por qué no buscamos algo que sea distinto.

Y donde buscando referencias, pues al final encontramos que hay una similitud entre las conductas animales o caninas con las del ser humano, incluso en el vocabulario, de mira qué perro, este tío es un perro, y de repente fue, oye, por qué no, un estrado de perros de caza.

Yo tengo perros, he tenido siempre perros, ahora tengo dos, tuve otra perrita en su momento, tengo una gata, en fin, el mundo animal me resulta familiar y me encanta.

Entonces, en un momento de mi vida sí que tuve o con un adiestrador, que luego, en la preparación de la película, he acudido a él de nuevo, para ver su forma de trabajar, el cómo visten, el cómo van, cuál es su manera, coger un poco la vibración de ese tipo de personaje que es particular, aunque hay muchos tipos de adiestradores, es un mundo.

Y el mundo de la caza, por ejemplo, que no me resulta tan familiar, porque no es algo que me agrade, pero es un ámbito muy importante en España.

Y el mundo de la caza tiene algo que se vincula a películas como Los santos inocentes, ese mundo que tiene cierta oscuridad, cierto peso, violencia, hay como algo ancestral en ese tipo de personajes y por ahí es un poco por donde he tirado.

Te puedes encontrar personajes muy oscuros y muy peligrosos.

Y lo bonito ha sido que ha habido pases en el recorrido de festivales que hemos hecho, gente con agorafobia que ha venido a ver la película, que sufría agorafobia en ese momento y que por tanto era un esfuerzo ir a verla, pero se había enterado viendo la programación de que iba y que de forma completamente genuina nos han acercado y han dicho, oye, he conectado un montón con el personaje de Javi, me he sentido como muy, no sé, muy feliz, entre comillas, dentro de lo que se puede, de que este trastorno se represente así, de que se indague sobre esto.

El otro día en el prestigio de Valencia había una persona que lo sufría y lo vio y me dio la enhorabuena.

Entonces, eso es el mejor aplauso, mejor reconocimiento de alguien que vive esas situaciones porque mejor que él no las conoce nadie.

Para una persona que le cuesta salir de casa o que no puede salir de casa, que le merezca la pena ir a ver una película donde se recrean en el trastorno que están padeciendo y tal, pues es maravilloso como cineasta porque te das cuenta de que de repente eso que has hecho tiene sentido.

¿Y qué os lleváis a nivel personal de esta experiencia? Me quedo con la libertad y las ganas de toda la gente que ha participado en la película.

Creo que ha sido un equipo bastante joven y con muchísimas ganas, desde el director a los productores, que arriesgarse con una película así es un riesgo.

Nosotros, que hemos ido con muchas ganas, nos hemos dejado la vida en estos personajes y también la libertad de todos, de poder hacer la película que queríamos.

Juan es su primera película, ya puede hacer la peli que quiera, si hace una segunda seguro que ya le van a decir muchas cosas más y creo que nosotros también hemos podido venderle al director o proponerle cierta libertad para jugar, para hacer cosas que a lo mejor en otros proyectos no podemos hacer y creo que eso, me quedo con la libertad del proyecto y las ganas.

Yo también me quedo con el recorrido creativo general, con el equipo que decía Javier, porque es un grupo de gente joven super talentoso, con Tani Campos, uno de los productores que es asesor del guión también, ha sido conocer a mucha gente interesante, a la gente de Twin Freaks de Murcia y estar muy todos por la labor, incluso ahora en el momento de la promoción, no es que nosotros estemos hablando de una película que no resulta ajena, que nos han contratado para eso y tú haces lo que te toca, no, estamos muy implicados en esto y me parece que es algo muy bonito, es llegar a ese grado de comunión con el equipo y con lo que estás haciendo que no ocurra.