Honrar a los ancianos 581n24

Y ahora con ustedes álvaro serna morales hace algunos años una joven de veintiséis años quiso darse la oportunidad de experimentar personalmente cómo era la vida de una anciana así que se disfrazó con arrugas peluca y bastón para iniciar su aventura la primera situación que se presentó fue cuando intentó parar un taxi para que la llevara al aeropuerto de la ciudad todos intentaban parar pero cuando estaban cerca y la miraban seguían su rumbo creerán los conductores pensó ella que las ancianas no dan buenas propinas luego al llegar al aeropuerto y acercarse a la ventanilla de la aerolínea se encontró con una fila de jóvenes hombres de negocios buenos días saludaba el empleado con una sonrisa de oreja a oreja que tenga un feliz viaje cuando al anciano le tocó su turno y lo vio a través de sus gruesas gafas lo único que recibió fue una mirada al tiquete nombrando la ciudad destino en un susurro y un cortante el que sigue mientras yo salía de allí dice la joven mi corazón lloraba por la anciana y entendía entendí cómo se sentía intimidada y a la defensiva todos los ancianos que están a mi alrededor y aquella anciana en particular y nosotros iramos y consideramos tenemos en cuenta las debilidades y las limitaciones tratamos a los ancianos con dignidad y respeto recordamos que si llegamos a esa edad nos gustaría tener un buen trato y atención a la edad de la vejez se le denomina la tercera edad debido a que alude a las tres últimas décadas de la vida de una persona a la edad de sesenta y cinco años las personas son consideradas como adultos mayores y a partir de los ochenta son considerados ancianos pues ya se evidencia el paso del tiempo por los efectos fisiológico como por las experiencias y conocimientos acumulados es bueno tener en cuenta que vejez no es sinónimo de dependencia insuficiencia o enfermedad si bien es cierto se vuelve un poco más vulnerable el cuerpo no se debe dar la vejez como la época de la enfermedad al contrario se debe pensar como personas que benefician la social edad y al mundo en general con nuevas oportunidades de desarrollo empeño y consejo sereno y sabio hay que rectificar la imagen negativa de la vejez y esta es una tarea de cada uno de nosotros de esta generación para agregarla a la siguiente quitaré esos estereotipos de inutilidad ad aislamiento resignación abandono e incapacidad del anciano la presencia de los ancianos en el mundo es un don y una riqueza humana y espiritual nueva sus experiencias deben ser valorizadas y la sociedad tendrá un patrimonio invalorable para los siguientes años pues los ancianos tienen mucho que decir y compartir a esta generación da gusto escuchar palabras de ánimo y reflexión como las siguientes joven fui y he envejecido y no he visto justo desamparado ni su descendencia que mendigue pan palabras del rey david en el salmo treinta y siete veinticinco contando brevemente su propia experiencia para su familia y todas las generaciones recordando su juventud pero ahora colocando el sello de autoridad respeto y subir seguridad en la bondad y misericordia de dios para los hombres de bien la vejez la edad de la sencillez la contemplación la gratitud la sabiduría la reflexión la prudencia la paz la edad el ser y no debe ser la edad de la amistad la calma el deseo de servir sin figurar ni cobrar de lo que se ha recibido ahora se da por gracia y a quien lo quiera recibir linda una mujer que vivió ciento seis años dejó un lindo testimonio cuando fue su cumpleaños ciento uno le dijo a una amiga lo siguiente comillas ya tengo ciento un años pero sabes que soy fuerte físicamente estoy algo impedida pero espiritualmente hago todo no dejo que las cosas físicas me abrumen no les hago caso no es que iba la vejez porque no le haga caso es que la vida sigue y la vejez continúa su ca amino y yo la dijo el único modo de vivirla es vivirla en dios comillas hay que hacer cambios que beneficien a los ancianos pero no esperemos que estos cambios vengan por iniciativa u orden de los gobiernos o entidades de beneficencia social no empecemos a hacer esos cambios nosotros en nuestra familia nuestro entorno en nuestra iglesia en nuestra comunidad