Fuente sorda 30/5/25 5nc68

Fuente Sorda, un espacio de los servicios informativos de Radio Andújar. Escribe y presenta Juan Parras.

¿Qué tal, señoras y señores? Bienvenidos, buenas tardes.

Cuanto antes asumamos los s de vehículos en cualquiera de sus formas o tonelaje que las decisiones que toma la Dirección General de Tráfico las generamos nosotros, mejor nos entenderemos.

Y es que todas las señales prohibitivas o limitadoras están basadas en hechos reales.

Es decir, que somos los conductores con nuestra actitud los que las hemos creado, las que al mismo tiempo las obviamos, los que decidimos no respetarlas en favor de un exceso permanente y de ahí que nos recuerden a lo largo de todo el recorrido la velocidad máxima o el sí o el no del adelantamiento si debemos poner la luz de cruce o cuidarnos del agua o la niebla.

Si fuéramos sinceros con nosotros mismos, ¿qué necesidad hay de invertir tal cantidad de dinero en las miles de señales que nos encontramos al paso? En realidad, con que se nos avisara el límite de velocidad al principio de cada debía ser suficiente para evitar las habituales y desagradables sorpresas que suelen llegar luego de desplazamiento en forma de denuncia por exceso.

Es lo mismo que ocurre con la salida y entrada a los centros escolares a lo que nos referíamos el pasado miércoles en este mismo espacio en donde vemos a diario una profusión de coches de todo tipo que acercan o esperan la salida de los alumnos en los alrededores del colegio y que, de rechazo, dificultan el paso de los otros coches que por allí coinciden.

Además, comprobado como está, que muy pocos atienden a la lógica y lo que hacen es poner en peligro a los menores, se ha hecho imprescindible la presencia de la policía local que se encarga de regular la circulación y de proporcionar a los más indefensos un mínimo de seguridad.

Allí donde la concienciación del centro y de los alumnos, además de los progenitores, es compartida, son ellos los que se han responsabilizado de tarea tan importante y desde luego que no es necesario decirle a quien circula por esa zona en momentos tan críticos que la preferencia es de los petones.

¿Entre nosotros? Evidentemente no.

Nuestro caso es digno de ser estudiado por especialistas en la intrascendencia y el egoísmo porque lo que parece interesarnos antes de nada es encontrar un sitio en donde aparcar el vehículo y lo de menos es en qué situación lo dejamos.

El mejor ejemplo de permisividad municipal y de peligrosidad concentrada sin duda que en los alrededores de Safa en donde se organiza diariamente un caos y que hasta el momento seguimos saliendo ilesos y ojalá se mantenga siempre porque lamentaríamos un accidente mortal.

Pero es que con sólo observar la actitud y la actuación de algunos tutores o padres se llega a la conclusión de que Siandújar es una ciudad llana de distancias cortas que se recorre en menos de 20 minutos ¿a qué tanto vehículo para llevar a Israel a los niños de casa, al cole y viceversa? El día que desde el ayuntamiento se decida poner orden y controlar estos excesos seguro que no faltarán los que critiquen la decisión.

¿En realidad ocurre en todos los colegios? Ciertamente, pero en el caso de este centro escolar es realmente preocupante por la dimensión que alcanza y la presión que ejerce sobre el resto de vehículos que por esas zonas circulan en esos horarios.

¿Y es que sólo en unos metros cuadrados se transcriben las normas de tráfico repetidas e insistentemente? ¿Cómo? Por ejemplo entrando y saliendo del coche por zona prohibida ya que se accede desde la calzada y no desde el acelado que es lo obligatorio y lo lógico porque no sólo ocurre esto sino que no faltan los que abren las puertas del vehículo sin cuidar si en ese momento se le acerca otro que deberá frenar en seco si no quiere llevarse por delante la puerta y todo lo que se encuentre con ella porque se ocupa la importante zona de paso de vehículos a lo largo de la calle estrechándola como si se tratara de un cuello de botella que no debería permitirse bajo ningún concepto y finalmente señoras y señores porque la situación responde a un uso desproporcionado aunque con sentido, de lo que es de todos Por cierto, si ocurre lo que todos tememos que se sepa en la concejalía correspondiente que le salpicará directamente y tendrá que responsabilizarse de lo que se derive de él ya que pudiendo evitarlo o inhibirse de sus funciones también es tenido en cuenta cuando se llega a la conclusión judicial y se buscan culpables ¡Les dejamos! Gracias, buenas tardes, feliz fin de semana hasta el lunes, señoras y señores, gracias