
El extraño - Audiolibro de H.P. Lovecraft - Narrado 4a3l6j
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El extraño - Audiolibro de H.P. Lovecraft - Narrado Lovecraft nos lleva a un mundo oscuro donde el protagonista nos narra sus años de vida atrapado en un lugar sin luz, a la sombra de una torre. La desesperación lo llevará a trepar la torre y salir al exterior y descubrir lo que le depara allí fuera. El Desván de los cuentos perdidos. Relatos y audiolibros de misterio y terror de Agatha Christie, Arthur Conan Doyle, Edgar Allan Poe, Ambrose Bierce, .. y muchos más, narrados e interpretados con música y efectos. Narrado por: Ander Vildósola Música intro: Ander Vildósola Música: youtubestudio, incompetench.com Vídeo Intro: Estudio Tikismikis Fuente: ciudadseva.com Imágenes: Pexels / Pixabay / https://www.wallpaperbetter.com/es Para consultas escribe a: [email protected] Para más información y/o leer los textos transcritos en la web: https://eldesvandl.wixsite.com/eldesvandl Sigue nuestras redes: - Facebook --- https://www.facebook.com/eldesvandl/ - Instagram --- https://www.instagram.com/desvandeloscuentosperdidos/ - Twitter --- https://www.twitter.com/eldesvandl ¿Quieres anunciarte en este podcast? Hazlo con advoices.com/podcast/ivoox/821083 5b3e1j
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El desván de los cuentos perdidos relatos de misterio y terror por ander bilbao solano el extraño de p lovecraft suscríbete y apoya este canal en ivoox para escuchar los capítulos antes que nadie y sin publicidad infeliz es aquel a quien sus recuerdos infantiles solo traen miedo y tristeza desgraciado aquel que vuelve la mirada hacia horas solitarias en vastos y lúgubres recintos de cortinados marrones y alucinantes hileras de antiguos volúmenes o hacia pavorosas vigilias a las sombras de árboles descomunales y grotescos cargados de enredaderas que agitan silenciosamente en las alturas sus ramas retorcidas tal es lo que los dioses me destinaron a mí el aturdido el frustrado el estéril el arruinado sin embargo me siento extrañamente satisfecho y me aferro con desesperación a esos recuerdos marchitos cada vez que mi mente amenaza con ir más allá hacia el otro no sé dónde nací salvo que el castillo era infinitamente horrible lleno de pasadizos oscuros y con altos cielos rasos donde la mirada sólo hallaba telarañas y sombras las piedras de los agrietados corredores estaban siempre odiosamente húmedas y por doquier se percibía un olor maldito como de pilas de cadáveres de generaciones muertas jamás había luz por lo que solía encender velas y quedarme mirándolas fijamente en busca de alivio tampoco afuera brillaba el sol y a que esas terribles arboledas se elevaban por encima de la torre más alta una sola una torre negra sobrepasaba el ramaje y salía al cielo abierto y desconocido pero estaba casi en ruinas y sólo se podía ascender a ella por un escarpado muro poco menos que imposible de escalar debo haber vivido años en ese lugar pero no puedo medir el tiempo seres vivos debieron haber atendido a mis necesidades sin embargo no puedo rememorar a persona alguna excepto yo mismo ni ninguna cosa viviente salvo ratas murciélagos y arañas silenciosos todos supongo que quien quiera que me haya cuidado debió haber sido asombrosamente viejo puesto que mi primera representación mental de una persona viva fue la de algo semejante a mí pero retorcido marchito y deteriorado como el castillo para mí no tenían nada de grotescos los huesos y los esqueletos esparcidos por las criptas de piedra cavadas en las profundidades de los cimientos en mi fantasía asociaba estas cosas con los hechos cotidianos y los hallaba más reales que las figuras en colores de seres vivos que veía en muchos libros mohosos en esos libros aprendí todo lo que sé maestro alguno me urgió o me río y no recuerdo haber escuchado en todos esos años voces humanas ni siquiera la mía ya que si bien había leído acerca de la palabra hablada nunca se me ocurrió hablar en voz alta mi aspecto era asimismo una cuestión a ajena a mi mente ya que no había espejos en el castillo y me limitaba por instinto a verme como un semejante de las figuras juveniles que veía dibujadas o pintadas en los libros tenía conciencia de la juventud a causa de lo poco que recordaba afuera tendido en el putre y do foso bajo los árboles tenebrosos y mudos solía pasarme horas enteras soñando lo que había leído en los libros añoraba verme entre gentes alegres en el mundo soleado allende de las florestas interminables una vez traté de escapar del bosque pero á medida que me alejaba del castillo
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