Hay mucho homeópata del alma ahora mismo, que te vende falso estoicismo.

También las emociones entrenan, también.

Te entrenas para tener equilibrio interior, te entrenas para tener serenidad, te tienes que entrenar para evitar la ira, el cabreo, el enfado, la gente que pita, el claxon, esa gente...

Yo primero cuando alguien pita así como loco digo, este es gilipollas.

Pero luego pienso, aparte de que es gilipollas, digo, es muy infeliz.

Vivir es combatir.

La meditación, esto que viene de Oriente.

El mindfulness.

No me jodas.

O sea, yo me parece muy bien el budismo y me parece todo muy bien, pero está en nuestra tradición cultural la meditación.

Marco Urielio la reivindica.

Si quieres estar al tanto de todo lo que pasa, vas a ser muy desgraciado.

Y esto sin redes sociales.

Sin redes sociales.

Ahora le llaman el FOMO.

El FOMO, ¿sabes? Fear of Missing Out.

En la vida hay amigos conocidos y saludados, y no pasa nada donde esté cada uno, lo importante es no confundirse.

Y le pones hasta el acento, ¿eh? Sin amistad la vida no vale nada.

En pez compartido no hay espinas.

Me ha encantado eso.

Bonito, ¿no? En pez compartido no hay espinas.

Uy, espinas, qué bonito.

La piedra perfora la piedra no por la suerte, sino por caer sin parar.

O sea, esa es la clave.

Todos los días prácticalo.

Mensana incorpore serrano.

Cuerpos serranos, el podcast en el que tú preguntas y Boti y Butra responden, porque ya lo decían los romanos, mensana incuerpo serrano.

¿Cómo están esos cuerpos serranos? Soy Marían García, doctora en farmacia y nutricionista, o Boti.

Y Butra, hoy lo hemos dejado en sus labores de investigador, entrenador, que tiene bastante, porque yo tengo una cita en este podcast con todo un romano, bienvenido, Emilio del Río.

¿Qué tal, querida Marían, querida Boti García? Estoy encantado de estar aquí, de teletransportarme al siglo XXI, recién llegado de la Antigua Roma.

¿Y qué vienes a contarnos de la Antigua Roma? Pues que lo que estás haciendo tú es lo que recomendaban los clásicos, tú eres la nueva Seneca, el nuevo Marco Aurelio.

Aquí tenemos a alguien que se ha teletransportado desde el pasado, pero vamos a poner su identidad en contexto.

Emilio del Río Sanz es escritor y hoy viene a hablarnos de su último libro, que es Carpe Diem.

Él es doctor en filología latina por la Universidad Complutense, es profe también, titular de filología latina, es compañero y amigo en el programa de Pepa Fernández.

No es un día cualquiera.

¿Desde cuándo llevas el programa, Emilio? Pues ya, yo llevo desde el 2012, ya no me acuerdo, 11, sí, un montón de años.

Y has escrito un montón de libros, algunos...

Los perpetro, yo no escribo libros, los perpetro.

Escribe libros para dedicárselos a su mujer, eso dice, me parece súper, súper bonito.

Latin lovers, calamares a la romana, todos relacionados, en principio, los primeros, con etimología de las palabras y después le diste a los clásicos uno tras otro.

Sí, calamares a la romana, no tiene nada que ver con comida, es un libro sobre la vida cotidiana, el subtítulo es Somos romanos aunque no nos demos cuenta, luego, locos por los clásicos, que tiene que ver con un podcast que tengo en Radio Nacional.

Por el que recibiste la mención especial del jurado de los premios Ondas del año pasado, del 24.

Sí, del 2024.

Enhorabuena.

Gracias.

Y locos por los clásicos es un libro que tiene que ver, el subtítulo es todo lo que tienes que saber sobre los grandes autores de Grecia y Roma, luego pequeña historia de la mitología, todos en espasa y el último que he perpetrado es este carpe diem y el subtítulo ya lo dice todo también, autoayúdate con los clásicos.

Cuando Emilio me dijo que había escrito un libro de autoayuda, autocrítica de la autoayuda o crítica de la autoayuda de los clásicos, le pregunté si hablaba de los estoicos y él me contestó.

De los estoicos, de los epicurios, hablo de todo.

No es un libro de teorías, no es un libro de filosofías, no le explico ni quiénes son los autores.

Yo me leo a todos los autores para los lectores del libro, a Seneca, a Marco Aurelio, a Epicteto, en fin, a todos estos.

Me diste una respuesta muy curiosa relacionada con la farmacología porque lo comparaste con la homeopatía.

Sí, claro.

Y a lo que voy.

Entonces hablo de todos estos.

Digo, ¿por qué estos son escribir manuales de autoayuda de la buena frente a tantos homeópatas del alma? Me unen muchas cosas a María Angarcía, pero una de ellas es que podemos con los homeópatas.

Y hay mucho homeópata del alma ahora mismo que te vende falso estoicismo, que son respuestas de esas de azucarillo, frases de azucarillo, de tazón de café para problemas complejos que son los de la vida.

Oye, cómo encontrar el bienestar emocional, la serenidad, el equilibrio interior.

Entonces, frente a los homeópatas del alma que hay por ahí, que no solamente los hay del cuerpo y hacen mucho daño, sino del alma y también hacen mucho daño, surge Carpe Diem autoayúdate con los clásicos.