Episodio 49. CORALIE FARGEAT, El Renacer de la Sangre: Revenge (2017) - The Substance (2024) - Le Télégramme - Reality + 1z2hb

Esto no es un sueño, no es un sueño. Estamos usando el sistema eléctrico de tu cerebro como receptor. No somos cajazas detrás de ti, a través de la neurointerferencia consciente.

Estás recibiendo esta visión en forma de sueño, pero esto no es un sueño.

Bienvenidos a Maniati Podcast. Bienvenidos a un nuevo programa especial sobre la nueva autoría en el cine. En el cine fantástico. Nueva autoría como ya tratamos a Oswald Perkins, a Julia Ducournau y en este caso Coraline Fajard, una directora que digamos que ha sangrado la palma de la mano en la palma de festival de Cannes y una directora que ha dado mucho que hablar. Digamos un programa que lo vamos a bautizar como el renacer de la sangre, porque siempre bautizamos este tipo de nuevas autorías con un concepto.

¿Qué tal, Laina? ¿Cómo estamos? Bien, relajada, preparada para ver este baño de sangre y vísceras.

Muy bien. ¿Y tú qué tal, Miguel? Bien, bien. Sin más.

¿Has disfrutado viendo estas películas? Sí.

¿Y tú, Montse, qué tal? Se te ha quitado la risa ya. Vemos que tienes un ataque de risa.

Ha habido casi sangre, ¿no? ¿A que sí, chicos? Sí, sí. Yo me comportaré para que la sangre no llegue al río.

Bueno, pues aquí estamos con esta directora y, antes de todo, es una directora que menciona a varios artistas que le han influido en su vida. Artistas que nos gustan mucho. Uno de ellos ya lo tratamos con Sassy Troopers, otro de ellos lo tratamos con Videodrome y otro de ellos lo tratamos con Carretera Perdida y con Tercio Pelo Azul. Un director que nos ha dejado... Pues el miércoles 15 de enero de 2025, estamos grabando un 18 de enero.

Esto es el mundo de los viajes en el tiempo, por lo tanto ya lo veréis cómo va.

Y bueno, dedicarle este programa a este director y darle mención a David Lynch por su trabajo, ¿no? Pues sí, la verdad es que, no sé, supongo que los que somos de nuestra generación, pues se nos ha quedado ahí un poco la adolescencia marcada y un pequeño agujerito ahora mismo, sabiendo que no podremos mirar Instagram para ver cuál es el tiempo del día u otras cosas o pensar que quizás alguna locura se le hubiera ocurrido, ¿no? Porque ya con la edad que tenía podía hacer lo que quisiera, aunque siempre en parte lo ha hecho. Pues yo muy apenada, la verdad, no sé, me emocionó mucho recibir la noticia.

Te decía, la noticia de la Naila, que nos avisó por el Telegram, ¿no? Sí.

¿Y tú qué tal, Naila? Pues estaba en shock, o sea, no me lo esperaba. Más que nada por eso, porque no me lo esperaba que fuera tan pronto, ¿no? Y como que, hostia. Y como decía Montse, pues también aún tenías esperanza de ver alguna cosita más que hicieran, ¿no? No sé, una pena. Pero bueno, por suerte tenemos ahí sus películas y todo lo que ha hecho y sus entrevistas que también no tienen desperdicio, ¿no? Porque ya no es solo las películas, ¿no? Si siempre que he comentado alguna cosa o estos pensamientos que él tenía, que siempre daban que hablar, ¿no? Y bueno, pues eso.

Que se fumen sus pitis como...

Ahora ya se los puede fumar tranquilamente.

Ahora fumará puros.

En Miguel se ha fumado unos cuantos pitis en honor a David Lynch.

Seguro, ya te lo digo yo.

Y se los seguía fumando.

Exacto.

Por lo tanto, tú, Miguel, ¿el mismo día te diste la noticia? Sí, bueno, abrí las redes, vi eso y cerré las redes durante dos días.

Digo, no quiero saber nada de nadie.

Cuando las redes se juntan, ¿no? Claro, digo, ahora resulta que a todo el mundo le ha cambiado la vida a David Lynch, ¿sabes? Digo, hoy nos estamos a tomar por culo.

Directamente David Lynch yo creo que se está partiendo el culo, ¿no? Ahí arriba, ¿no? Bueno, no sé, yo...

Lo único que me hace pensar esas cosas que igual te dan ganas de ver sus películas, ¿no? Otra vez, no sé.

Pero bueno, ya lo veremos.

Lo que sí que vamos a ver, según dicen unos o según dicen otros, que en estas películas que vamos a tratar hay cierto grado de influencia de David Lynch.

Pero eso lo vamos a debatir.

Pues un abrazo a David Lynch, a sus cigarros.