Devolver recibos: claves para no cometer errores 3l4ls

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Hoy vamos a hablar de un trámite muy común, devolver un recibo bancario. Algo que parece sencillo pero que puede traer problemas si no se hace bien. Devolver un recibo es tan fácil como entrar en la app de tu banco o en el área de cliente de su web. Una vez localices el cargo, solo tienes que pulsar en la opción de Devolver recibo. También puedes llamar o acudir directamente a tu oficina bancaria. Pero ojo, porque no todos los recibos se pueden devolver.

Por ejemplo, si es el pago de un préstamo que tú mismo solicitaste o una cuota con importe correcto y autorizada, no podrás devolverlo así como así, a no ser que haya habido un error en el cobro. Ahora bien, ¿qué plazo tienes para hacerlo? Pues si el recibo estaba autorizado, dispones de hasta ocho semanas desde que se realizó el cargo. En cambio, si el cobro no lo autorizaste, el plazo se amplía a 13 meses. Una vez solicitas la devolución, el banco tiene 10 días hábiles para devolverte el dinero o justificar por qué no lo hace.

Pero aquí viene lo importante. Cuidado con las consecuencias. Si devuelves, por ejemplo, una cuota de la Seguridad Social sin motivo, puedes perder la tarifa plana o recibir una sanción. Si devuelves un recibo de luz o de Internet del local donde trabajas, podrías quedarte sin servicio. Y si acumulas devoluciones injustificadas, podrías acabar en una lista de morosos, algo que te cerraría muchas puertas a la hora de pedir financiación o trabajar con determinados proveedores. Así que antes de devolver un recibo, asegúrate de tener una razón de peso.

Y hasta aquí el episodio de hoy. Esperamos haberte ayudado a entender mejor cuándo y cómo devolver un recibo sin complicaciones.