Consultorio literario del oráculo de Adriana 1rs1y

Soy el oráculo de Adriana.

Bienvenidos a mi consultorio sobre literatura universal.

Emitimos en cadena para las 800 emisiones desde Radio Litelén, para su espacio de fama mundial, Rastas de Biblioteca, Bücher Wurms, Buch Wurms, Rastas de Biblioteca.

¿Cuánto sabes de literatura? Ilústranos, por favor.

Queremos tener una gran cultura, la ignorancia nos da pavor.

Me estáis petando el móvil a mensajes con consultas.

Sois muchos los escritores que recudís a mí para solucionar vuestras tristes obras literarias y conseguir la misma fama que tengo yo.

Let's get started. Let's get...

...mainten...

Damos paso a la primera consulta. Un tal Edgardo A. P. Barra Baja, 1839. Nos manda un mensaje por paloma mensajera. Dice lo siguiente.

Hola, oráculo de Adriana. He pensado escribir un relato terrorífico sobre un arquitecto y una casa mal construida que se derrumba, pero me ha entrado el bloqueo del escritor ante la hoja en blanco.

Ayúdeme, Adriana. Tengo que entregar este cuento. Necesito el dinero.

Ay, ay, ay.

Reduzca a escombros todo lo que ha escrito. En la literatura norteamericana del siglo XIX, los relatos fantásticos de terror se llevan mucho.

Olvida las cuestiones arquitectónicas.

Piensa en un protagonista que decide pasar una temporada en casa de su amigo, Roderick Usher, para ayudarle a sobrellevar los síntomas de su enfermedad.

Durante su estancia, fallece Lady Madeleine Usher, una mujer extraña, fantasmagórica.

Eso da más miedo que una viga maestra y un tejado mal construido, créame. Querido Edgardo Allan Poe, no se esconda.

Como oráculo que soy, le digo que usted es capaz de crear una atmósfera de terror que atrapa a los lectores.

Los lectores le adoran. El cuervo, el casco de amontillado, el corazón delator...

¡Ánimo! Me pasan de reacción otra consulta. Nos escribe arroba julio v.28. Dice así.

Hola, Adriana. Tengo planeado un viaje al centro de la Tierra. ¿Qué calzado crees que debería llevar? ¿Y chaqueta? ¿Será necesaria? No quiero resfriarme.

Pues verá, Julio Verne, que ya sé que es usted pillín.

Yo le recomiendo que, si quiere usted vivir buenas aventuras y está interesado en los avances tecnológicos y científicos, debe centrarse en escribir una novela con técnicas realistas y ambientes inusuales, en la que sus personajes se enfrentan a los peligros de su propio entorno.

Casualmente, esta novela se llamaría Viaja al centro de la Tierra y la publicaría en 1864. ¿Verdad que sí? Seguro que la vena romántica del protagonista, en busca de aventura, se puede narrar con prolijas y cuidadosas descripciones de maravillas científicas futuristas.

En cuanto a esa excursioncita de la que me habla, le recomiendo que se vaya a Benidorm, que allí no necesitará chaqueta, podrá llevar chanclas y tendrá barra libre de refrescos.

Pasemos a la siguiente consulta.

Dentro audio, por favor.

Querida Adriana, yo, E. Bronte, te escribo el día 19 de agosto de 1847 desde un lugar.

Aquí me aburro mucho. Lo único bueno es que veo desde la ventana de mi habitación una montaña con unas cumbres tan altas que siempre hay borrascanillas. ¿Qué me recomendaría hacer? Le aconsejo que se inspiren esas vistas que posee para escribir una obra de aventuras y amor entre dos personas abriéndose paso hacia la cima de la montaña.

Intenten que un tal Lockwood sea el narrador de una historia de amor imposible entre Heathcliff y Catherine, dos personas que se conocen desde niños.

Imagine que un amor apasionado surge entre ellos, pero el carácter caprichoso y egoísta de Catherine provoca que rechace a Heathcliff de origen humilde y que se case con Edgar.

No se olvide publicar esta novela en 1847 y titúrela Cumbres Borrascosas. Será una excelente muestra del realismo inglés, se lo aseguro. Soy el oráculo de la literatura.

Y estoy convencida de que usted, querida Emily, y su hermana Annie son capaces de crear un país imaginario llamado Gondal. Hágame caso. Un abrazo.

Vamos a ver qué me pide ayuda literaria ahora mismito.

Sí, me dicen desde Control que tenemos una llamada en directo. Escuchemos a un tal arroba 05 Rilke.

Querida Adriana, estoy aquí en la República Checa en 1905 y necesito que me resuelva unas dudas acerca de mis obras.

Soy un humilde relojero del siglo XX que no sabe cómo titular su nuevo libro.

Trata sobre la muerte, la mitología y la naturaleza, y destacan símbolos como el árbol, los árboles y la tierra.