Cómo salir de un relación tóxica 5wz6y

¿Cómo salir de una relación tóxica después del comentario de un suscriptor que me ha dicho porfa Travis hazte un vídeo porque he estado en una relación tóxica y no sé cómo salir? Pues ahí va, ahí va este vídeo explicativo. Primero de todo, la clave es no meterse. Pero bueno, en este vídeo vamos a ver cómo salir si estás en esa relación tóxica, cómo no entrar, si estás a las puertas de entrar y si has salido pero todavía le estás dando vueltas, cómo digerirlo, esa especie de luto ¿no? Bien, la experiencia ¿qué dice? Primero de todo ¿por qué estás tú en una relación tóxica? ¿Por qué te has metido? Vamos a dejar de meter el foco fuera y ponerlo en nosotros. ¿Es que acaso alguien te ha obligado a estar en esa relación? Es más, ¿es que acaso alguien nos obliga a estar en una relación? No. Primera pregunta ¿tienes miedo a estar solo? Porque ahí irá la clave. Tú ni siquiera te conoces y ahí va la contraposición número uno. Y es que genéticamente, obviamente, tenemos que reproducirnos y eso socialmente hace que tengamos que estar en pareja como una convención social que se supone que es lo correcto y yo te diría tal vez no sabes estar libre, que no solo.

Fijaros la connotación, el peso de las palabras cuando tú dices que estás solo. No, no, está libre para mí, pero el que está en pareja para mí es de hecho lo contrario. ¿Por qué? No está libre. No digo que esté mal estar en pareja, solo digo que si tú no te conoces a ti, tus límites, tus espacios, saber que con la persona con la que vas va a seguir más o menos el mismo rumbo, va a tener el mismo poder adquisitivo más o menos, o si no tú a la larga vas a acabar pagando lo que la otra persona no pueda pagar. Si la otra persona es más derrochadora y tú eres más ahorrador, pasará lo mismo y eso a la larga, no hablemos cuando ya hay responsabilidades todavía más grandes, acaba pasando factura y la cosa acaba muy mal. Por lo tanto, ¿cómo no meterse en una relación tóxica o cómo salir de ella? Pues te voy a preguntar. ¿Te has parado a preguntar tú por qué te has metido así? ¿Es que acaso no había señales? Es decir, esos celos hacia ti, esas críticas, esos comentarios negativos, ¿es que tú tienes que estar siempre demostrando algo? Porque ya de por sí, incluso en una relación sana, siempre hay alguien que domina, que manda, que ordena a la otra persona, sea directa o indirectamente.

Calzonazos sería la otra parte que acepta todo lo que le diga la otra, ya que normalmente suele ser 55-45 la persona dominante, la persona que te dice lo que tienes que hacer y tú vas aceptando todo si guana, o un 60-40%. Muy difícil es que sea 50%. Por lo tanto, si tú ya te has metido ahí porque sólo era la atracción lo que mandaba y tú veías los señales de control o todas esas cosas que ya pasaríamos a términos mayores, que obviamente ya sabéis por dónde los tenéis que gestionar, pero estamos hablando siempre y cuando sean cuestiones de relaciones humanas, interpersonales, eso quiere decir que tú no te conoces a ti, quiere decir que no has reflexionado suficientemente sobre. Oye, genéticamente sí, tenemos la necesidad de conocer gente, pero cuidado con la palabra, con el verbo necesitar o querer.

Querer significa deseo, desear significa esclavitud a eso que deseas, porque cuando no lo tienes estás sufriendo, cuando ya lo has conseguido también estás sufriendo para mantenerlo, por lo tanto ya no eres dueño de tus actos, ya no tienes autocontrol hacia ti y el autocontrol sobre lo que quieres hacer, por ejemplo, si dices ahora mismo, oye, dejo la relación, ¿verdad que no eres capaz? ¿Por qué? Apego, dependencia. ¿Por qué hay ese apego por esa persona? Porque tú ni siquiera te has parado a conocerte a ti, ni siquiera te has planteado estar libre, es decir, solo, lo que tú le llamas solo, porque huy el que dirán y necesito estar con esa persona. ¿Por qué necesitas estar con alguien que no te hace bien? Tenéis que remar en el mismo barco, es que no voy a encontrar a nadie más, es que no tienes que encontrar a nadie. Y ahí va el problema de la gente que obviamente se empieza a sentir mal, incluso no en una relación sana, porque no se ha conocido a ella misma, ya no está haciendo las acciones que querría hacer, por ejemplo, haber hecho un deporte, un viaje, algo que no quería hacer porque la pareja ya no quiere, por lo tanto, ya no lo acaba haciendo. O cómo te vas a ir tú solo a tal lugar si es que estamos en pareja. Por lo tanto, hemos firmado indirectamente un contrato, no la vida real, pero contrato verbal de exclusividad. Y esa exclusividad se malinterpreta con que tú no puedes hacer esto, ni puedes hacer lo otro, porque claro, estás conmigo. Entonces viene el sentimiento de atadura, de sentirse atado cuando.