Como cada viernes nos vamos al restaurante el Chef del Bonito y hablamos con Alberto Criado. 4mz4n

Espera, ahí. Los viernes de las 11 nos vamos al Chef del Bonito y hablamos con Alberto Criado, que ya le tenemos por ahí.

Buenos días, Alberto. Buenos días.

Bueno, ¿qué tal? Ayer no tuvimos tiempo, pero había una noticia que dar, pues no muy agradable, ¿no? Pues no. Esa misma cosa que acabas de decir.

Veníamos ayer, Ricardo Turbia, y estábamos hablando de otras cosas, del Bonito y tal.

Dije que tengo que dar una noticia no muy agradable.

Bueno, pues sí, no es agradable.

Ayer falleció, y además inesperadamente, y con 69 años que no son para irse, Gabriela Rumosa, divulgador gastronómico, fundador de la Academia Castellano-Leonesa de Gastronomía y Alimentación, miembro de la Academia de Gastronomía de Cantabria, presidente de la Conferencia de los Cocidos, miembro de la Conferencia de la JALREC, colaborador de Cantabria en la Mesa.

Todos los sábados escriben Cantabria en la Mesa.

Mañana, me imagino, el Cantabria en la Mesa será exclusivo, dedicado a él. Flipando.

Ha escrito miles de libros de cocidos, autor del blog Gastronómicos en Consincio.

Yo te decía ayer que yo le recuerdo tal de que le entrevistamos aquí para Radio Meruel, que siempre digo que somos una más radio humilde y un programa mucho humilde, pero entrevistamos a los gordos, a Eneco, a Martín...

Por eso.

También a Gabriel.

Y me acordaba ayer que hablando con Ricardo, cuando hicimos la ponencia en Puente Viesgo, Ricardo y yo del Bonito, él cocinó Toni, el del Molino, cocinó cocido, hicieron como una salud mental con Argumosa.

Y yo me acuerdo que entrevisté a Argumosa, que estuvimos hablando de las tratulencias con el cocido, cómo había que poner la salud...

Bueno, por ahí está grabado el programa o el espacio de aquel día.

Y bueno, un tío que...

Ayer que estuve también en la Feria del Vino, estuve con Jesús Vaquero, con el Mule, y digo, vaya putada, ¿no? Dice, ¿a ti no te caía bien? ¿En qué va, hombre? Era una broma.

Yo recuerdo cuando aquí, en este espacio, que vacilo mucho, pues creo que con Fredo, ¡eh, vamos a hacer caricos de Meruelo con Bonito y vamos a ir al concurso este de cocidos de Cantabria y le vamos a ganar vacilando! Y fui allí y me acuerdo, me trataron de lujo al Foncho Fraila, a las Carolina, ¡eh, este es el ché de Bonito, Alberto! Bueno, yo voy a vacilar.

Y me viene el Mule y me dice, oye, dicen estos que no les ha molado mucho el...

¿Cómo se llama? Los caricos con Bonito.

Digo, espérate un poco que ahora voy yo para allá.

Donde la Algumosa, el Luis Cordero y el pobre Eugenio, que ahora ha escrito unas cosas que hacen hacer llorar ahí en el Facebook, ha puesto Eugenio el Purilla también, que bueno, está destrozado.

Y yo me acuerdo que les dije, digo, ¿pero a dónde vais vosotros si tenéis más años, platanara? Digo, tenéis que evolucionar, quitaros del medio, que sois unos abueletes, ¿eh? Y hay que... En bromas.

Y entonces le decía, ¿qué le tienes manía? Que no, hombre, que eran bromas.

Yo voy a vacilar y vacilé.

Y yo ya te digo que les tengo mucho aprecio a la gente mayor, a Luis, luego si me da tiempo, hablamos un poco de ese cocido de Torre la Vega que hicieron Luis y Ginio, esta Algumosa y tal.

Y una pérdida para Cantabria brutal.

Ya te digo, mañana en el diario Monterrey, me lo imagino en portada, creo que Ricardo ha escrito una cosa sobre él, hay cosas en las redes sociales brutales.

Es un tío que ha tenido de la gente más importante de la gastronomía de Cantabria.

Y voy a seguir, ayer estuvimos en la veinteava feria del vino de Cantabria y en el Santander, en el hotel, en el Valle Real, y muy bien.

Pero había un ambientillo, pues Ander, la miembro también del... Sí, de la Academia de Gastronomía.

Se veía cierta gente que estaba por compromiso, ¿vale? Porque había un ambientillo rarete, ¿sabes? Pero bueno, muy bien. Nosotros muy contentos, porque yo iba invitado por Burgos y por una chica de Salamanca del pueblo de León, de Madriángela, Rivas, que es una artista, que tenía tierra aranda, un vino brutal que probó la Bibi y Jesús Vaquero y tal.

A ti te vi más con el jamoncito en la mano.

Sí, yo como... La gente...

¡Ah, pues, y whisky, no sé qué! ¡Alcohol! Y la Bibi, que es más lista, se fue a donde era Japón y yo detrás, como un perrito, también quiero.

Y nos pusieron un jamón de ese whisky, fue lo brutal.

Bueno, había muchos vinos y tal.

Lo que yo decía... Es una pena, y siempre lo he dicho, que yo tengo esa espina clavada de no entender de vino.

A mí pasa igual.

Es una putada, porque la verdad que, bueno, oías a Ángel hablar que es el maledaje, que es la madera, que se ha frutado, que si no sé qué, y yo flipaba.

Yo huelo, sé si está rico o no, si huele guay o no, pero claro, no tengo ni idea de lo demás.

Y al no beber alcohol, me parece una putada, porque yo creo que se han perdido esos valores.

Ángel le decía, dijo...

Alberto, ¿con qué malidad es una cachofa? Tienes razón, ¿con qué malidad es una cachofa? ¡Qué difícil es!