CAFÉ CIENTÍFICO IFCA 3X08 |​ ¡Vivan los algoritmos! 662g1p

Vas a escuchar el podcast del Instituto de Física de Cantabria, el Café Científico de Clara Grima.

Buenas tardes, bienvenidos y bienvenidas al Café de las Artes, lleno, estamos encantados y encantadas la verdad de verlo tan lleno, y nada, voy a presentar a nuestra invitada de esta tarde del Café Científico, ella es Clara Grima, seguramente que la conocéis, pero os voy a dar un breve currículum invitada de Clara.

Ella es doctora en matemáticas, es profesora en la Universidad de Sevilla y es una divulgadora científica que nos encanta y que seguimos desde hace mucho tiempo.

Su investigación se centra en geometría computacional y en teoría de grafos, y es conocida por el descubrimiento de los escutoides, que no sé si lo he dicho bien, publicado en la revista Nature.

Desde 2010, Clara ha llevado las matemáticas al gran público a través de medios de comunicación en RTVE, como por ejemplo, os sonará el programa Una matemática viene a verte, o por ejemplo, ha colaborado en radio con Julia Otero, que seguramente la escucháis.

Ha recibido numerosos premios, incluyendo la medalla de la Real Sociedad Matemática Española, y además fue la segunda mujer española en ser invitada al Congreso Internacional de Matemáticas.

Aquí en España ha sido reconocida también con muchísimas distinciones, hasta tiene una plaza con su nombre en Sevilla.

Clara además es una gran divulgadora, como digo, imparte cientos de charlas al año, de hecho, hoy está aquí, que está liadísima, y ha venido para estar con nosotras.

Y Clara, atención, está convencida de que a todo el mundo le gustan las matemáticas.

De hecho, Clara, creo que hoy estás también dispuesta a demostrarlo.

Así que, ya mismo, fuerte aplauso para Clara Grima.

Es verdad lo de la plaza, ¿eh? Lo ponéis en Google Maps, plaza Clara Grima.

Yo lo pongo todas las mañanas, porque...

A ver si me la han quitado, bueno, no voy a decir nada.

Hola, buenas tardes a todas y a todas.

Muchas gracias, Rebeca, por la presentación y por la invitación.

Para mí es un placer estar en Santander siempre.

Yo, si en el sádget del asunto del mensaje pone Santander, ya voy diciendo que sí antes de abrirlo.

Esta vez me ha decepcionado un poquito, lo tengo que decir, ¿eh? Porque en Sevilla ya hace una harta de calor.

Digo, ¡ay, qué fresquito en el norte! Y no.

Porque ayer estuve en Bilbao y hace una harta de calor.

Y hoy aquí también hace calor.

Pero bueno, os perdono.

Y es verdad que estoy un poquito muy nerviosa, porque es un formato que no he hecho en mi vida.

Y me he quedado charlas, no sé cuántas charlas he dado en mi vida, desde que me dedico sobre todo a la divulgación.

Pero nunca he dado una charla en este formato.

Y, de hecho, tengo aquí testigo, lo he contado esta mañana, tenía una pesadilla súper rara, que me había puesto despertado a las seis y media de la mañana, os lo voy a contar.

Porque tenía que preparar unas cosas para la sede de selectividad, que estoy la semana que viene.

Y, total, quemado perecillo, me he quedado, digo, me voy a quedar una horita más.

Y se ve que en esa hora me he puesto a pensar las charlas.

Y he tenido unas pesadillas horribles.

He pensado que venía Buenafuente con Silvio Abril, los dos en chándal, no me preguntéis por qué, pero venían en chándal, a verme, con lo cual me ponía muy nerviosa.

Y que, además, yo tenía que dar la charla tiñéndome el pelo.

Y eso es porque mi madre, supongo, yo había visto un reel sobre tinte y mi madre siempre me está riñendo porque llevo raíces, 54 años tengo.

Pero me he despertado con un ataque de ansiedad.

Digo, ay, ¿qué voy a hacer? Pues voy a ver lo que hago.

Voy a hablar, cuando me escribió Rebeca a invitarme hace un montón de meses, me dijo, ¿te vienes a dar una charla en Santander? Yo ya lo he dicho, que si me dicen Santander, yo voy diciendo que sí, antes de saber lo que me están proponiendo.

Y me dijo, ¿de qué vas a hablar? Yo dije, de algoritmos.

Por muchas razones.

Una de ellas es porque, voy a sacar un libro de algoritmos, y digo, bueno, pues ya empezamos con la promo.

Y la otra tiene que ver, o sea, es la causa de la que yo estoy viendo el libro, es porque me da mucha pena y me da mucha rabia que la palabra algoritmo, que es una palabra muy bonita, y que abarca, o sea, y que nombra a unos objetos matemáticos o de informática o programación que son muy importantes en nuestra vida, pues haya pasado a ser una palabra que estaba en el ostracismo, que la gente casi no conocía, a una palabra casi maldita.

De hecho, la gente, cuando te hablan algunos periodistas y te hablan de los algoritmos, y dices, cuando vengan los algoritmos, a mí me hace mucha gracia.

Bueno, a lo mejor no me hace tanta gracia, pero me sorprende, digo, cuando vengan los algoritmos.

¿Qué significa cuando vengan los algoritmos? Los algoritmos no van ni vienen, los algoritmos son recetas de cocina y no son entes, ¿no? Me imagino si hubiera una gente así como los de mentores de Harry Potter, que vienen a quitarnos el trabajo, toda la vida asustándonos de los de mentores y de las que había que asustarse era de la autora.

Pero, bueno, dicho esto, sigo adelante.

Esa palabra tan bonita haya pasado, pues, eso, a ser una palabra que mucha gente asocia con algo malo.

Todos los que estamos aquí, ¿sabemos lo que es un algoritmo? ¿Sí? ¿Sí? Bueno, un algoritmo es, yo voy a decir la descripción, es un algoritmo, es una sucesión ordenada y finita de pasos que hay que ejecutar para llegar a la conclusión.