Hola amigos, esto es Bajo el Volcán, yo soy Juan Luis Lozano y estás en el 107.9 de tu receptor en Radio Aguilar. Bien, comenzamos. Hoy nos enfrentamos a uno de esos programas que suelo temer. Un monográfico a un único trabajo. Dedicar todo el tiempo a un álbum es una empresa arriesgada. Y más en este caso, cuando el disco que traemos hoy, pensado en 1967 para barrer el mercado, tuvo unas ventas ridículas en Estados Unidos y también en Reino Unido. Y aquí en España ni siquiera se editó. Pero bueno, con el tiempo se ha convertido en uno de los discos fundamentales en la historia de la música rock. Es un disco difícil, pero su influencia perdura a día de hoy.

Vamos a intentar sintetizar una historia que cuenta con bastante documentación y bibliografía y que está disponible a quien pueda interesar. Así que nosotros vamos a ir al grano. El proyecto inicial de Lou Reed y John Cale, dos músicos transgresores, buscaba alejarse de las normas musicales. Porque eso de subvertir la norma o subvertir la regla es una idea tan antigua como el arte. Y en el camino se cruzaron con Andy Warhol, un polifacético gurú del arte de vanguardia, que en ese momento se había propuesto el objetivo de crear una experiencia artística completa. Algo que englobara música, cine, moda, pintura, arte, lo que fuera. Y para ello se utilizó la música.